“La clemencia con los criminales es un ataque a la virtud”

Simón Bolívar.

Desde hace días venimos alertando desde nuestra opinión, la acostumbrada maniobra de descrédito contra el gobierno revolucionario de Venezuela y las instituciones democráticas que le dan su sustento. Esto es parte de todo un aparataje orquestado desde los centros de poder mundial, las transnacionales y el imperio norteamericano, que se dispara como consecuencia del discurso del presidente Chávez en la sesenta y un Asamblea de las Naciones Unidas.

Buscan un magnicidio y lo alientan a nivel de los grupos opositores golpistas y extremistas, pero no es necesario que el asesinato al presidente de la república sea físico. Frente a lo que podría suceder contra el imperio y sus lacayos en Venezuela, Latinoamérica y el mundo entero, buscan la muerte moral y política de la revolución bolivariana.

Están buscando vincular al presidente Chávez y a todos los dirigentes de esta revolución, a hechos que ellos mismos están creando y llevan implícitos actos sangrientos. Todavía quedan importantes vestigios de la cuarta república en el gobierno revolucionario, estos sectores promueven la desestabilización del estado venezolano.

Es curioso, que cuando el gobierno nacional se anota un éxito en la defensa y conservación del medio ambiente en el sector de la Paragua, sucedan los hechos que los medios de comunicación se desbordaron en calificar con epítetos desproporcionados contra el gobierno bolivariano y la Fuerza Armada Nacional. Utilizan siempre el método propagandístico-Gobeliano, al más puro estilo de la cuarta república.

Durante cuarenta años de gobiernos adecos-copeyanos, no se pronunciaron contra las sangrientas represiones a estudiantes, obreros, indígenas, sindicalista, ni contra las desapariciones forzadas y los asesinatos de dirigentes políticos en nuestro país. Ahora se presentan con un farisaísmo mediático rasgándose sus vestiduras.

Resulta bochornoso ver al cada vez más empequeñecido Andrés Velásquez, haciendo la comparsa al sistema que le arrebató la opción a ser presidente, denunciando irresponsable y patéticamente actos que todavía la justicia Venezolana está investigando.

Causa Risa, ver al presidente depuesto y burlado, por el mismo sistema que el decía combatir, declarar irracionalmente, lo que las televisoras-partidos le dictan. Ese es el colmo de un protagonismo necrológico que se fundamenta en hechos horribles de sangre y dolor para familias venezolanas. Esto ha sido una práctica constante en la oposición golpista, que se hizo patético en los días del golpe de estado y del paro petrolero.

Cada vez que hay un hecho de sangre, las televisoras venezolanas y las grandes transnacionales de la información están preparadas para montar inmediatamente el espectáculo. Por eso es que venimos denunciando las maniobras de la oposición terrorista, para motivar hechos bochornosos y violentos y luego endosarlos al gobierno nacional a través de torpes ollas mediáticas que siempre quedan desenmascaradas.

Siempre los medios-partidos de comunicación tienen la noticia redactada, caliente y con las microondas listas para transmitir todo tipo de malas noticias. Demostrando así alguna complicidad con elementos infiltrados en el gobierno nacional, en la Fuerza Armada y en los cuerpos de seguridad del estado. También esto puede revelar una premeditación de algunos hechos violentos que podrían estar organizados desde instancias organizadas del sector golpista de la oposición venezolana.

La oposición tiene un libreto, lo van a cumplir hasta las ultimas consecuencias, porque este guión terrorista es la forma como el imperio plantea una lucha intestina de primera línea, para captar ciertos descontentos en los sectores populares de la población venezolana. Buscan la oportunidad de poder intervenir en nuestro país a través de la carta democrática, para justificar acciones militares y posibles embargos comerciales, económicos, tecnológicos y de cualquier tipo.

El gobierno bolivariano a través del presidente de la república y del ministro del interior y justicia, salieron a dar la cara frente a este bochornoso hecho. Aclararon que no iba a funcionar la solidaridad automática que tanto caracterizaba a gobiernos anteriores. A propósito de esto, por ahí anda López Sisco, libre y premiado por la gobernación del estado Zulia, con un alto cargo político de asesor de seguridad del estado Zulia. Eso explica el caos y la crisis de la policía regional de este estado.

Los voceros de la oposición venezolana, exigen el retiro del teatro de operaciones que funciona en la zona en la cual sucedió el lamentable incidente. Solicitan que regrese el viejo modelo militar que funcionaba en esa zona minera del país y que poco hizo para frenar la depredación del medio ambiente en esa zona de los estados Bolívar y Amazonas. Ellos necesitan las fronteras abiertas para poder hacer su juego con las fuerzas paramilitares y de sicarios, que tanto necesitan para llenar de violencia a nuestro país y para seguir saqueando las inmensas riquezas del sur de Venezuela.

Hacemos un llamado de alerta al pueblo, porque ya se acerca la fecha del plazo que ha fijado el imperio para desestabilizar al estado venezolano y a todas sus instituciones. Debemos estar atentos ante cualquier aventura violenta de los sectores golpistas-terroristas de la oposición venezolana. Debemos salir a la calle ante cualquier amenaza a nuestra revolución y al sistema democrático venezolano.

No podemos tolerar un golpe a nuestra Constitución Bolivariana. Recordemos que somos el Pueblo de Simón Bolívar.

¡El Pueblo Nunca Olvida!