La guerra del imperialismo no es contra un país, es contra la Soberanía, contra la autodeterminación, contra el concepto de lo público como los derechos humanos. Las sanciones planteadas por los Estados Unidos sobre China para frenar el desarrollo, no se trata de una medida que respeta la soberanía. Se trata de factores que atentan contra sus propios intereses. Es la visión del imperialismo contra la autodeterminación de los pueblos. El imperialismo ha secuestrado el multilateralismo, así como lo ha hecho con organismos internacionales, los cuales han pretendido generar desequilibrios regionales y ha falsear cifras. El imperialismo norteamericano rechaza la voluntad de los pueblos, bien lo demuestran en casos como la elección en Bolivia de Evo Morales en 2019, los reiterados casos de agresión contra Venezuela. El imperialismo siempre miente, es una estrategia para engañar y farsear la verdad, luego actúan criminalmente.
El bloqueo imperialista, ha reducido los ingresos de Venezuela, al 1%, generando pérdidas al país, por más de 116 mil millones de dólares, los cuales equivaldrían al desarrollo de programas sociales. En contraposición a ello se ha procurado realizar transferencias sociales, dedicadas a cubrir las necesidades del ser humano dedicadas a materia alimenticia, de educación, salud y viviendas de más de 13 mil millones de dólares. Es muy fácil para la Casa Blanca, ubicar aliados que le sirvan a su causa, aun cuando el vasallo pierda todo, tenemos el caso de Lenin Moreno que destruyó la arquitectura estratégica de inserción global solidaria que Correa, Chávez, Lula y Kishner lograron para el Ecuador con ALBA, UNASUR y la CELAC que garantizaba préstamos sin condiciones leoninas por parte de China. Era más importante para el sátrapa de Lenin Moreno, la destrucción de su enemigo Rafael Correa y el pueblo ecuatoriano, que la continuidad de desarrollo de Ecuador. En menos de cuatro años, destruyo todo lo realizado por el Presidente Rafael Correa. Que volverá.
Otra jugada maestra del imperialismo, con sus aliados: Recordemos la manipulación criminal de la Misión Electoral de la OEA en la reelección del Presidente Evo Morales, en Bolivia, allí se manipuló un incidente electoral menor, para legitimar un golpe de Estado. Además se han creado mecanismos intervencionistas peligrosos de acuerdo con intereses privados estadounidenses, menoscaban la soberanía electoral de las naciones del Sur y "certifican" o "descertifican" la idoneidad de los procesos electorales. Simón Bolívar lo tenía clarísimo en el Congreso Constituyente de Bolivia de 1826 cuando planteó que el Poder Electoral debía ser el cuarto poder del Estado para evitar abusos contra la voluntad mayoritaria de los pueblos. El próximo domingo 7 de febrero tenemos elecciones generales en Ecuador, sabemos dos cosas: que ganara el humanismo y que el imperialismo tiene sus sucias manos metidas.
El multilateralismo ha tenido un papel muy relevante en la globalización. Mientras que, anteriormente, los países trabajaban en base a unos intereses unilaterales, la creación de los organismos multilaterales provocó una mayor cooperación entre todos los países que integran el planeta. Una cooperación que, a través de los tratados logrados en Breton Woods, garantizaban la estabilidad y la paz mundial, ante los desastres ocasionados por la Segunda Guerra Mundial en años anteriores. Señalamos los organismo multilaterales mas conocidos: Fondo Monetario Internacional (FMI), Naciones Unidas (ONU), Banco Mundial ((WB),Organización del Comercio Mundial (OMC), Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Organización de Estados Americanos (OEA) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCD). La Casa Blanca que es la expresión ejecutora del imperialismo, tiene una visión, se siente, actúa y somete a su voluntad a los organismos multilaterales. Esa es una de nuestra diferencia con la Casa Blanca y sus aliados vasallos.