La Oficina de Servicios de Investigación del Congreso de Estados Unidos, publicó en fecha reciente, un nuevo informe sobre las sanciones contra Venezuela, en el cual sostiene y admite que "fallaron en desalojar al presidente Nicolás Maduro del poder y contribuyeron a una crisis económica en el país. Pero hoy se reconoce que el pueblo venezolano, vive un proceso real de recuperación de su economía. Reconocido por el FMI y el Banco Mundial, además los señalan los resultados económicos. En el reporte preparado con fines informativos para los congresistas estadounidenses, se destaca que la imposición de numerosas sanciones durante la administración del demente expresidente Donald Trump resultó inefectivas para su propósito de debilitar al Gobierno del presidente Maduro. De hechos tales acciones se transformaron en sufrimiento para el pueblo venezolano.
Hasta la fecha, 928 sanciones contra Venezuela, han ocasionado un daño profundo en la economía, la producción, el desarrollo, el bienestar del pueblo, afectando en primer orden la alimentación y salud del pueblo venezolano, principal víctima de las medidas. A la difícil situación derivada de 928 medidas coercitivas unilaterales, que han hecho perder al país ingresos por más de 44 mil millones de dólares anuales durante ocho años consecutivos, se suma el sobrecumplimiento de las sanciones. “El sobrecumplimiento ocurre cuando los bancos o empresas dejan de trabajar con una persona, entidad o país sancionado por miedo a que le apliquen sanciones. Los estadounidenses lo describen así: todo aquel que ayude a evadir las sanciones será objeto de sanción”, así lo sostiene el Observatorio Venezolano, Antibloqueo en su publicación.
A partir del decreto de Barak Obama en 2015, numerosos bancos internacionales cerraron cuentas y bloquearon pagos desde y hacia el Gobierno de Venezuela. En 2017, estas entidades financieras pasaron a congelar o retener recursos venezolanos. “Muchas empresas cerraron sus operaciones y contratos en áreas como petróleo, transporte, tecnología, salud, energía eléctrica y agua potable”. El sobrecumplimiento de las sanciones quedó evidenciado cuando desde Estados Unidos, impusieron un sistema de vigilancia a las transacciones financieras de Venezuela, para impedir el pago de alimentos y medicinas. La respuesta del entramado financiero internacional fue excluir del Sistema de Mensajería Interbancaria Mundial (SWIFT, por sus siglas en inglés) todas las operaciones del Gobierno venezolano. Creo que en cuanto agresiones y sanciones en contra del pueblo venezolano, no se ha dicho todo, increíble el odio y la maldad, de la oposición venezolana, en contra de nuestro País.
La administración de Joe Biden, ha realizado una serie de cambios respecto a las sanciones aligerando el peso en algunos puntos relacionados a las exportaciones de petróleo venezolano, pero todo el mundo debe saber que la Casa Blanca, no ha eliminado ninguna de la 928 emitidas, pero siguen otras restricciones impuestas desde 2018, En el texto se realiza un recuento de estas medidas coercitivas unilaterales Algunos legisladores en el Congreso han apoyado el alivio de las sanciones, argumentando que las restricciones amplias no han logrado sus objetivos y en cambio, han perjudicado al pueblo venezolano. En cambio, otros miembros se han opuesto al alivio de estas medidas. Podría ser difícil, para un reducido grupo, creer en las afectaciones que las sanciones han dejado sobre la vida cotidiana de los ciudadanos de a pie en Venezuela.
En el informe que presentan un grupo de parlamentarios del congreso estadounidense, reconocen que el pueblo venezolano, no presentan grandes problemas por efectos de las sanciones, referente a salud y alimentación, confesión que indica el fracaso de las sanciones. Las sanciones aplicadas desde 2017 han hecho "un tremendo daño a la economía y a la sociedad" por sus efectos no solo a las empresas públicas, sino también a las compañías privadas.