La grave violación de la soberanía de Ecuador, ha puesto una vez más, de manifiesto la política intervencionista del gobierno de EEUU, seria ingenuo o malintencionado, apartar la decisión del gobierno de Colombia, de una estrategia concebida en la “doctrina de guerra preventiva”. El gobierno de Uribe, ha instaurado y legalizado, un sistema donde los narcos y los paramilitares, son la base de una concepción de guerra de exterminio, realidad no ajena al mandatario colombiano, que ostenta en su currículum, vínculos con el Cartel de Medellín.
Las constantes denuncias del presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, sobre la existencia de planes de intervención estadounidense en la región, fueron calificadas por la oposición venezolana, como una cortina de humo a los problemas nacionales. Pero la realidad nuevamente supera a la ficción, la operación militar combinada entre EEUU y Colombia, calificada de masacre inhumana, es característica para estos dos países, para Estados Unidos es parte de su historia, desde la conquista con el exterminio de los nativos, pasando por mas de un siglo, invadiendo y masacrando a otras naciones.
Colombia lleva mas de medio siglo aplicando, el asesinato político como respuesta a sus opositores, cada plan de paz alcanzado en estos períodos, culminaron con el exterminio de los pacificados, el ejemplo mas claro de esto, fue el exterminio de 8.500 miembros de la Unión Patriótica. El gobierno actual no se ruboriza, al mentir sobre su supuesta democracia, hoy legaliza asesinos con miles de muertos, que han torturado, que han mutilado a seres humanos, que si confiesan sus crímenes, sus penas serán de 8 años de cárcel, institucionalizando con esta política, el terror y la impunidad.
Nuevamente las instancias internacionales son incapaces, de frenar la política de agresión militar a otras naciones.
Ecuador apeló a la instancias internacionales, para condenar la agresión a su país, logrando que se realizara la reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), la misma estaba convocada desde el lunes pasado, esta solicitud estuvo respaldada por Argentina, Brasil y Chile, solicitud que fue aceptada por el secretario general, José Miguel Insulza, debido a la urgencia de la crisis regional canciller, María Isabel Salvador, fue quien se encargó de advertir a los diplomáticos del continente sobre el antecedente que crea la avanzada colombiana.
Pero nuevamente el apoyo de Estados Unidos, permitió que Colombia logró saliera ilesa, ante la demanda de Ecuador en la OEA. Aunque Quito tuvo el apoyo mayoritario del continente para sancionar a Bogotá, el debate debió pasar a cuarto intermedio hasta hoy luego de que Colombia rechazara dos de las tres propuestas elevadas por el gobierno ecuatoriano. La condena de la violación territorial a Ecuador por parte de militares colombianos y la creación de una comisión investigadora que vaya al lugar de la escena.
Lo único que aceptó el representante del presidente colombiano, Álvaro Uribe, fue la convocatoria a una nueva reunión de los cancilleres del continente, pero solicitó que el encuentro se efectúe el 25 de este mes, en vez del 11, como había propuesto Ecuador. En una señal de fuerte respaldo a Colombia, minimizando lo sucedido el mandatario norteamericano, George Bush, habló en persona por televisión y dejó en claro que no iba a estar presente.
Nuevamente la OEA, como la ONU, organismos creados para resolver conflictos entre naciones, demuestran su incapacidad o complicidad, para enfrentar el accionar militar de EEUU y sus gendarmes regionales. Lo acaecido en Ecuador, sigue sucediendo en el Medio Oriente, donde Israel acaba de realizar un ataque, a la franja de Gaza, con más de 500 victimas, entre ellos más de 100 muertos. La misma invasión a Irak de manera ilegal, no aprobada por la ONU, demostró que no existen normas internacionales, solo la ley del más fuerte.
El porque Venezuela ha reforzado militarmente sus fronteras, no es una apuesta a la guerra, solo es la defensa de su territorio.
La campaña mediática de la oposición venezolana, hace eco a las directrices de EEUU, mientras toda América Latina condena la agresión a Ecuador, ya sea por la mayoría de los gobiernos del Continente, como los pueblos de cada nación, los voceros de los partidos opositores, condenan al gobierno del presidente Chávez, con actos políticos y declaraciones. Como otrora condenaron, la concepción del libertador Simón Bolívar, de una América Latina unida, en su gesta por la libertad de los pueblos del colonialismo español, pero también Bolívar sufrió las traiciones y la condena de la oligarquía de la época.
La situación en Colombia, la agresión a Ecuador, para la derecha venezolana son ajenas a su política, ellos solo se suman a las mentiras, las hacen reales, las falsas declaraciones de las autoridades de Colombia, ahora el presidente Chávez, “financia a las FARC, como ellos lo financiaron cuando estaba preso”, aceptan los datos aportados de una computadora, que curiosamente sobrevivió un bombardeo, que inexplicablemente se puede abrir y contiene informaciones por más de dos décadas.
La oposición cuenta con su nuevo socio PODEMOS, que apresta sus maletas para ir a Colombia, para hablar del conflicto regional, que puede plantear este partido, si ya habla de un paro nacional de brazos caídos, para frenar la producción del crudo venezolano. Su iniciativa no es ajena al paro petrolero del 2002, será que este grupo se esta transformando, en el nuevo Bandera Roja (organización que vino de la izquierda, para ser el brazo armado de la oposición), solo que PODEMOS, apuesta a la dirección política de la oposición.
La falta de planes de este sector político, los ha devenido en papagayos o loros, solo viven de la crítica de los errores del gobierno, o criticando la política internacional de Venezuela, apoyando a la EXXON, en su demanda contra Venezuela, hablan de la irrealidad de una acción militar de EEUU, además ahora se ponen una venda a lo ocurrido en Ecuador, o acusan a Correa y a Chávez como terroristas, para apoyar nuevamente a la administración Bush.
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