Por la jerarquía de los participantes, la reunión de Washington tiene mucha similitud con la cumbre de Las Azores, en donde Bush, Aznar y Blair decidieron la suerte de Irak. La presencia de Bush, Benedicto XVI y Brown en Washington ¿es simple coincidencia? Con antelación se había anunciado el viaje del Papa, pero nada se había dicho del Primer Ministro Inglés.
La presencia en Washington de estos temibles mandatarios, le pone al mundo la “piel de gallina”. La incontinencia guerrerista de estos señores, no es para menos. Hasta en los ejércitos de ángeles, arcángeles, querubines y serafines que habitan los espacios siderales, debe haber temor ante la acusación de “terroristas”como posibles causantes del cambio climático. ¡Guerra preventiva! De ahí la presencia del “panzer” Benedicto XVI, representante directo de Dios en la Tierra. La fórmula es sencilla: Cambio climático = Dios = Papa = Tierra = terrorismo celestial (huracanes, inundaciones, sequías) ¡No hay pele! Bendición papal a la guerra y a Bush ¡Venta de Indulgencias! como en los mejores tiempos del papado que le abrió las puertas a la Reforma de Lutero, para salvar la quiebra económica de El Vaticano! Reunión en la Sinagoga Judía de Nueva York. ¡Money! Verdadero motivo del viaje.
Pero además está el representante del viejo Imperio Británico y su larga experiencia en la “guerra del opio”, impuesta a China. Para crear la nueva filosofía de la guerra, el Papa, en italiano alemánico, dijo: “Sé molto obbligato tutti il mondo assorbere oppio (cocaína) per salvare il dollaro di suo cascata verticale”. Y es ahí donde entran las FARC que, por su terca guerra de liberación nacional, impiden el libre comercio de la coca.(igual ocurre con los talibanes en Afganistán). Entonces intervino Bush, “en seis años no hemos podido derrotar a las FARC a pesar del Plan Colombia y de la genial conducción del presidente Uribe, Nº 82 en nuestra lista de narcos más notables, fiel cumplidor de nuestras ordenes aun cuando no le aprobemos el TLC.” Y por otra parte, guerra preventiva contra algunos países de la OPEP (Irán, Ecuador, Venezuela), por el declive del petróleo y el aumento indetenible del precio .Canadá junto a México son los principales proveedores de petróleo de los EE.UU. ¿Por qué no forman parte del eje del mal?
Para estos omnipotentes mandatarios, el único problema en cierne sobre el planeta es “el terrorismo”, inventado por ellos. La pobreza no existe ni las enfermedades ni el SIDA ni las hambrunas en las poblaciones que habitan la periferia del Sahara o Haití. Tampoco les preocupa el aumento del precio de los alimentos de la dieta diaria por causa de la producción de biocombustibles. Un vehículo detenido por falta de combustible despierta más compasión, que millones de estómagos hambrientos. ¡Insólito!
Por otra parte están las declaraciones del Papa referidas a la epidemia de pedofilia que padecen obispos y sacerdotes en EE.UU. La incontinencia sexual ha causado la ruina de la iglesia católica estadounidense, por el pago (2.000 millones $ U. S.) de compensaciones a las familias víctimas de los sodomitas. El Papa ha reconocido que una parte del clero (5.000), es católica, apostólica, romana y pedófila. ¿Qué habrá? ¿Sanciones o más encubrimiento?
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