Los cancilleres boliviano y venezolano rechazaron este jueves en La Paz que Estados Unidos decidiera excluir a Venezuela, Cuba y Nicaragua de la Cumbre de las Américas de junio en Los Angeles.
"Lo que estamos denunciando acá, o insistiendo en denunciar, es que debemos evitar que se escinda a algún país de la participación en una Cumbre que es de todas las Américas", afirmó el jefe de la diplomacia venezolana, Félix Plasencia, en una rueda de prensa en La Paz con su homólogo boliviano, Rogelio Mayta.
"Pareciera anocrónico pensar en la posibilidad de celebrar una Cumbre de las Américas donde se excluya la participación de algunos miembros de esta región", dijo Mayta.
Estados Unidos no invitará a Cuba, Nicaragua y Venezuela a la próxima Cumbre de las Américas, dijo este lunes en Washington el jefe de la diplomacia estadounidense para la región, Brian Nichols.
"Cuba, Nicaragua y el régimen de (Nicolás) Maduro no respetan la Carta Democrática de las Américas y por lo tanto no espero su presencia", declaró Nichols.
Mayta afirmó que una Cumbre "con alguna exclusión" va a afectar el multilateralismo en el continente.
El canciller venezolano agradeció además al presidente boliviano, Luis Arce, por criticar la decisión estadounidense contra tres países con gobiernos de izquierda aliados de Bolivia.
"No hay razón alguna que justifique la exclusión de los pueblos y las voces en nuestra América", escribió Arce el miércoles, al exhortar "a que todos los países de América sean invitados a la Cumbre" de Los Angeles.
La semana pasada, Cuba denunció que Estados Unidos la excluyó de los preparativos para la cumbre y lo calificó de "retroceso histórico" del gobierno de Joe Biden.
La comisión oficial arribó al aeropuerto internacional de El Alto y fueron recibidos por el vicecanciller boliviano, Freddy Mamani.
"Venir a Bolivia es acercarse a la profundidad de nuestra propia realidad, de nuestra propia patria", comunicó Plasencia.
Los Gobiernos de Venezuela y Bolivia retomaron sus relaciones diplomáticas en noviembre de 2020, luego de un periodo de paralización debido al reconocimiento del líder opositor Juan Guaidó, por parte del gobierno de facto de Jeanine Áñez.
Con información de agencias / Telesur.