La polémica del comandante Chávez con la periodista Andreína Flores de Radio Francia Internacional y RCN está dejando una imagen desagradable en la opinión internacional y también dentro del país, que ha podido evitarse de una manera más sencilla, quizá con un poco más de asesoramiento al Presidente.
El comandante Chávez ha podido aprovechar la pregunta para simplemente repetir y volver a explicar, pensando en muchos venezolanos y extranjeros que lo oyen y necesitan herramientas para explicarse lo ocurrido, que estábamos en presencia de una elección no-nacional, aunque cualquiera puede sumar los votos a su entender y hacer totalizaciones, sino de elecciones regionales, por estados y por circuitos.
Eso es lo que explica que la alianza PSUV-PCV, con más de 40 % de los votos en Anzoátegui sólo tenga un diputado, el 15%, o que en Zulia, con un porcentaje similar, apenas tenga tres diputados, el 20%. En otros estados, en cambio, el reparto favoreció al PSUV-PCV y como son 23 estados y un DC en esta república de formas federales pues la alianza que respalda al Presidente acumuló más respaldos regionales y consiguió casi 60% de diputados.
Para el Parlamento Latinoamericano, que sí era una elección nacional, las votaciones fueron parecidas y los asientos se repartieron de forma más pareja. Y punto. Pero la polémica con la periodista ahora es publicitada como que el presidente se sintió derrotado, o furioso, o que buscó ganar tiempo para ver cómo estructuraba una respuesta, o sigue bravo con el Comando de Campaña o con sus colaboradores que le hicieron creer que ganaría en Anzoátegui y habría empate en Zulia, en fin, una mala imagen.
Ojalá que al MINCI ahora no se le ocurra victimizar o descalificar a la periodista porque, sea cierto o no, así sólo tendremos más gente mirando el video y formándose una imagen de mal perdedor del presidente, dentro y fuera del país.