Estas líneas van dirigidas al Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, ya que ese banco no solo retarda los créditos hipotecarios  o los financiamientos de urbanismos y viviendas a los profesionales e infinidad de familias que, con mucho sacrificio, mucho tesón trabajan de sol a sol para poderse costear la adquisición de una vivienda digna, como olvida el agarrón que tuvo el Presidente Chávez un 26 de enero de 2011 con el Presidente de ese banco, Pedro Rodríguez Serrano, el cual quiso vacilárselo y burlarse de nuestra Constitución y demás leyes de nuestra República Bolivariana de Venezuela, pero menos mal que Chávez es Chávez y le puso un parao en seco y de inmediato.

Pero a través de estas breves líneas, pretendo explicar mi asombro y casi trauma, ante las Oficinas de estas sucursales, que por cierto son privadas, no están en manos del Estado Venezolano, para aquellos que dicen que toda empresa que toca el gobierno dizque la vuelve miér…coles. Pero nada dicen de estas joyas. En fecha 18 de abril de 2011, encontrándome yo en la Oficina de la referida entidad bancaria, en la que se encuentra frente al Centro Comercial Trébol III de Ciudad Guayana, Estado Bolívar. Considerando que esta agencia está ubicada en una de las zonas más relevantes y centricas de la ciudad -debido a que se trata de una zona reconocida de oficinas y algunos comercios- cualquiera supondría que recibiría mínimo un servicio digno (aunque no importe dónde esté ubicado debería ser su bandera).

El día lunes me acerqué en horas de la tarde a cambiar un cheque por efectivo. No poseo tarjetas que me coloque como "titular". Así que me dispuse a tomar mi ticket de la cola virtual de los "no titulares", la cual, por razones obvias, tarda muchísimo más que la de “titulares”.

Luego de 15 minutos sin moverme del mismo sitio, empecé a observar con detenimiento el modo de trabajar de los cajeros a los que el banco paga por hacer "servicio" con el dinero de los titulares (no del dueño, gerentes o directores del banco). Noté que habían sólo 4 cajeros, 3 dispuestos a atender a los clientes del banco en sus operaciones de taquilla según el numero que aparecía en su ticket, pues el cuarto que falta en mi cuenta estaba sacando números con su ventanilla cerrada... si, en plena hora pico de los bancos.

 De repente 1 de los cajeros que atendía cerró su ventanilla, además de que pude notar que el sistema de “cola virtual” implementado por este banco, de la taquilla Nº 3 se había desconfigurado, yo tenía el Nº 3325 y duró mas de una hora que no pasaba del Nº 3175, nada más y nada menos .., y los únicos cajeros disponibles a atender la macrocola de los que si tenían tarjeta del banco, es decir, titulares, amigos, panas, alguno que otro coleón vivo que supo aprovecharse del desastre y desorden propios de esta agencia.

A pesar de que algunas personas se empezaron a molestar, nadie (como cosa común) hizo nada. Me dispuse entonces a hablar con el gerente de la sucursal, una mujer que sólo repetía sin cesar "es un problema del sistema", no importaba lo que yo dijera, era eso lo único que repetía, incluso que aceptaba su premisa. Le indiqué que con cosas como esas evitaría que yo quisiera abrir una cuenta en ese banco, a lo que me contestó "si usted quisiera abrir una cuenta no tendría que hacer esa cola.".

Realmente desconozco el modo en que seleccionan a su personal, pero de algo quedé muy seguro, los seminarios sobre “servicio al cliente” que deben dictar no están funcionando o los quitaron del cronograma. Algo tan sencillo como que me pidiera disculpas, diera alguna excusa (hasta falsa, ya no importaba) y me dijera que pronto lo solucionarían habría hecho que yo me sintiera respetado por el banco... cosas que no sucedieron y ni se acercaron...

Sé que no harán absolutamente nada luego de leer esta queja, pero por lo menos yo no aceptaré más cheques del banco provincial y trataré de indicarle a mis allegados que tampoco lo hagan.

Ahora luego de respirar profundo, les cuento detalles amig@s lector@s:

Cuando el que seguía por ser atendido de la cola de le tocaba su turno, el cajero que lo iba a atender lo paró en seco para darle su puesto a un titular o a alguna persona de la caja Nº 3 ( en la cual no había nadie) y entre ellos mismos habían decidido que los de la caja 3 serían atendidos por los de las cajas subsiguientes, pero no se informaba a los que estábamos esperando allí a los fines de hacer nuestra transacción. Cuando este último señor terminó el cajero volvió a llamar a otro y se peloteaban entre ellos, y alguna gente pérdida, pero ninguno de ellos ayudaba a aligerar la carga. Ya había pasado 35 minutos en quela espera en la que yo estaba y los 3000 del sistema nada, no se movía -de nuevo-, el señor que le habían quitado en dos oportunidades la posibilidad de hacer su diligencia se arrechó y empezó a gritarle a los cajeros improperios.

La gente empezó  a discutir, yo no aguanté y les dije que con esa actitud no ganarían nada, que hablaran con el gerente! No me pararon y fui yo a buscar el gerente. Consigo a una mujer “pofpof” que era la directora (eso decía el cartelito de su oficina) y con la voz más calma posible le dijo “señora no podría usted agilizar de alguna manera este problema?”

La señora sólo me contestó: hoy tenemos mucha gente y los otros cajeros están almorzando (eran ya casi las 4 de la tarde). 
Disculpe, pero mi tiempo también vale y como es común desde que tienen horario corrido esta es la hora en que la gente puede venir. No hay forma de que si el sistema se desconfigura o se presenta algún tipo de situación o ante el congestionamiento habitual de ese banco, resolver este tipo de problemas? esa no justamente la tarea de un gerente o director?

La doña esa lo único que repetía era “no puedo hacer nada, tiene que esperar”. Le pregunté un par de veces: si yo quisiera abrir una cuenta en este banco, cosas como esta es que me alejarían de esa posibilidad. La muy estúpida lo que dijo fue: si usted quisiera abrir una cuenta no tendría que hacer esta cola.

Qué mujer tan ignorante!!! Nada le costaba decirme “disculpe señor, pero hoy se nos presentó una emergencia, los cajeros no están completos, el sistema se desconfiguró pero trataré de resolverlo”. Me dice eso y me quedó tranquilo haciendo mi colita hasta que me tocara, como usuario lo único que quería era que escucharan mi frustración y que me dijeran que tratarían de resolverlo, pero no… eso no lo enseñan en los cursos de servicio al cliente que le deben dar a esa gente.

Cuando salgo más caliente que plancha de chino les grito a todos los demás que siguen esperando: “por eso es que este país está como está, todo el mundo espera que otro haga algo y cuando lo hace se quedan calladitos viendo desde lejos… en vez de apoyarlo pues la pelea es por el derecho de todos a ser respetados!!!!” 
 
En fin, ya me desahogué… pero que arrechera me da cada vez que lo recuerdo… que recuerdo que hayan algunos carajos que hablen paja de las empresas que han sido expropiadas por el gobierno revolucionario, y no se trata de que le hagan críticas y observaciones, que son bien válidas a los fines de prestar un mejor servicio, no, sino que es fácil decir que empresa que toca el gobierno, empresa que vuelve mier… coles, pero cuando un privado presta un mal servicio, nadie dice nada. Por un lado los abusadores y por el otro los que se dejan abusar y no les importa nada sino sí mismos… qué desgracia…

Por eso Presidente Chávez, aplíqueles el ácido de la ley a estos señores apátridas, investigue y nacionalice este banco porque que caos y que despelote tienen allí.

Patria Socialista o Muerte!!!

Estamos Venciendo!!!.

(*)Militante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)  

j_martorano@hotmail.com