Quienes las siembran aparentan militar en aceras opuestas del espectro político venezolano. Sin embargo, paradójicamente convergen cuando producto de sus acciones contribuyen al crecimiento del escepticismo, desconfianza ,angustia y falta de credibilidad en las autoridades del gobierno nacional.
Me atrevo a asegurar que los popularmente conocidos como “ni-ni” han sido de una u otra manera impactados por uno u otro bando. Unos sueñan con volver al pasado en busca de privilegios perdidos y otros se disfrazan de rojo-rojito repitiendo los mismos vicios burocráticos de la IV república con el fin de asegurar los privilegios adquiridos.
Las dudas, por ejemplo, son sembradas desde muy temprano por radio y TV hasta la media noche inclusive y no hacen otra cosa sino reportar compulsivamente huelgas, cierre de autopistas, y motines de reclusos. Pareciera que se pusieran de acuerdo para escoger el día de la semana que mas le conviene y de esa manera dar la sensación de caos y de país revuelto por todas partes. Para nada son balanceados cuando informan y se muestran abiertamente simpatizantes de partidos de oposición.
Por otra parte, el desencanto, se produce cuando algunos funcionarios públicos no solo son ineficientes y maltratan a los usuarios sino también obligan a sus subalternos a participar en marchas en contra de su voluntad. Llegan tarde al trabajo y regresan a la oficina luego de largos almuerzos; por lo tanto carecen de autoridad moral a la hora de exigir responsabilidades.
Las largas colas de Mercal, Pdval ,Bancos etc,etc no necesariamente reflejan que la población y el poder adquisitivo haya aumentado, sino mas bien reflejan la ausencia de sensibilidad, supervisión y atención esmerada a la hora de prestar el servicio al público. El Metro de Caracas y el SAIME están demostrando que la lucha contra el burocratismo y la ineficiencia si es posible ganarla.
Earl Nightingale, autor estadounidense, en su obra “El secreto mas raro” dice lo siguiente:
“Un agricultor siembra una semilla de maíz y la otra de veneno ,las riega e invariablemente la tierra producirá lo que fue plantado..”.Complementa lo anterior refiriéndose al pasaje bíblico: “Lo que se siembra se recoge”.Claro que el autor se refiere específicamente al escaso conocimiento que del poder mental tenemos los seres humanos, lo que según su criterio trae como resultado que seamos mas o menos optimistas y exitosos en la vida.
Las duda inducida o no siempre va a estar presente pero el desencanto ,en mi opinión, es mucho mas peligroso porque viene desde el mismo vientre del gobierno. Sus agentes son defensores a ultranza del burocratismo heredado y de sus cuotas de poder adquiridas. Pueda que se vistan de rojo, tengan el pelo rojo, hasta los dientes rojo y tengan una foto grandota del CHE en sus oficinas; pero no se confundan porque en el fondo son los compinches ideológicos de los sembradores de dudas.
Los sembradores de dudas y desencantos son caimanes del mismo caño o caras de la misma moneda. Aparentan operar en direcciones opuestas, aunque la realidad es que sus acciones conducen al logro de un mismo fin.
a.padrino@prodigy.net
@AntonioPadrinoQ