Ante la burla y descrédito escuálido, se debe informar sin eufemismos lo que queremos decir cuando hablamos de reducir la pobreza extrema y la desnutrición, hablarles de la crueldad y violencia que contienen las condiciones infrahumanas de existencia.
La violencia capitalista expresada en la pobreza nos dejó la herencia de niños, mujeres y hombres luchando con los zamuros en los vertederos de basuras, madres de 6 o 7 hijos convertidas en “amantes” de sus hijos mayores, para garantizar algún ingreso y que la hipocresía llama: “incesto”.El capitalismo releva de valores a la pobreza extrema y luego la discrimina. La pobreza capitalista produce delincuentes, inseguridad, deja el tatuaje de minusvalía y sumisión en el alma: “venta” al mejor postor.
La Revolución Bolivariana, al reducir la pobreza y desnutrición, no sólo ha impactado lo cuantitativo, ha cambiado la calidad humana; eso hay que decirlo.Difundir los logros, consensuar el socialismo, construir y elevar la conciencia social y política será muy difícil para la Revolución; las asimetrías comunicacionales, mediáticas, son abismales; la burguesía controla el aparato ideológico: televisión, radio, cine, industria de ocio y entretenimiento, religión, escuelas, universidades privadas y públicas, etc.
Por ello, seguiré insistiendo en la necesidad del mayor control y participación del Gobierno-Estado en todos los medios audiovisuales que operan en el territorio (espacio radioeléctrico, cable y satelital). ¡Una Revolución no puede ser tan blandengue!--oliva2021@gmail.com
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