En la antigua Roma el sicario recurrían al puñal y el veneno, en la actualidad el sicariato tiene otros recursos y alcances.
El
documental “Confesiones de un sicario económico”, realizado por el
cineasta Zeitgeist Addendum, (basado en el libro de John Perkins), nos
describe qué es y cómo actúa el sicariato imperial para aniquilar
económicamente a los países.
El mismo nos dice: primero identificamos un país que tiene
recursos, como petróleo. Luego le concertamos un enorme préstamo por
parte del Banco Mundial u otra organización. El dinero nunca llega al
Estado, sino que va a parar a las grandes corporaciones y ricos del
país, para construir infraestructuras.
El país se endeuda y queda a merced del imperialismo, que le impone:
condiciones especiales en la compra-venta de petróleo y materias
primas, instalar bases militares u obligarles a vender -privatizar los
servicios públicos- a las corporaciones.
La televisión privada en Venezuela actúa con la misma lógica
del sicario, pero su impacto asesino es de variado espectro y alcance:
manipula, confunde y crea esteriotipos a nuestros niños, participa en
golpes de Estado e intentos de magnicidio, actúa como sicaria
económica, promueve el odio y la guerra civil, es lacaya de países
hostiles a Venezuela y del imperialismo.
La Televisión sicaria construye una narrativa e impone valores
que justifican el consumismo depredador que destruye la naturaleza y
promueven la explotación del ser humano, la pobreza, el hambre de los
pueblos.
¡El Socialismo se gana o se pierde en la cabeza de los Pueblos!
Artículo publicado en el diario : Correo del Orinoco
http://manuelote.blogspot.com/