Después de la Segunda Guerra Mundial el impacto cultural de la globalización ha sido devastador, las potencias capitalistas necesitaban no sólo su aceptación ideológica en el imaginario mundial, era necesario imponer el consumo irracional como modo de vida.
La globalización con sus grandes y poderosos aliados: televisión e Internet, impactan toda la vida social en el planeta; su hegemonía impone y condiciona absolutamente todo, obligando a los pueblos y naciones a crear, por ejemplo, los “Movimientos de resistencia Cultural”.
Vamos a hacer con las lectoras(es) un ejercicio práctico para una mayor comprensión de lo afirmado arriba: piensen el nombre de una muñeca; seguramente la mayoría pensó en la Barby (Barbie).
La clase social de Barbie y su personalidad han influido en varias generaciones de madres -que tuvieron su muñeca- y en sus hijas: rubia, cabello liso, flaquita, modelo, ojos azules, centrada en el tener -consumidora irracional-, moderna, varias profesiones, siempre a la moda. Barbie practica tenis y submarinismo.
De seguro no sabían que Barbie fue nombrada por UNICEF embajadora para el Tercer Mundo en 1997, y subliminalmente la vistieron con la bandera de los EEUU.
Con la Barbie, la globalización ha colonizado e impuesto valores y estilos de vida a millones de familias en el mundo ¡¿eso no es política?! Definitivamente la Barbie es escuálida
El marketing creó un “producto” Miss Irene Sáez (Barbie-Irene) y quisieron imponerla como presidenta de Venezuela en 1998. ¿Eso no es política?
La serie “El Zorro” ¿No justifica la colonización, esclavitud y explotación de México por España? ¿Eso no es política?
La violencia contra la niñez y de la niñez, la promoción de la desigualdad como natural en el “El Chavo del Ocho” ¿No es política?
Cuando los apátridas agreden a los deportistas olímpicos venezolanos ¿Eso no es política?
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