La idea es que frente a ese plan de cantar fraude e intentar guarimbas, salgamos a la calle con la idea de hacer pequeñas concentraciones (un por si acaso), pero no para vernos las caras y estar pendiente por el plan del adversario, sino para estar movilizado políticamente. Este estar “movilizado políticamente” tiene el sentido de poner andar una agenda que nos permita empatar la campaña presidencial con la campaña que culminara con la elección de los gobernadores y las gobernadoras.
Propongo entones, que la militancia cívicamente se instale en cada plaza bolívar de cada uno de los 335 municipios que tienen el país y en pequeños grupos de 30 o 40 camaradas comience a organizarse y ordenar la agenda para el 16-D. La agenda indiscutiblemente tendrá sus particularidades que responderá a las características y situación de cada estado y municipio, pero en esa agenda puede incluirse temas o problemas que son comunes en la entidades territoriales y locales.
Sugiero entonces, salir a la calle a debatir democrática y protagónicamente. Si se observan intentos de guarimbeos por parte de la oposición, seguir las orientaciones que el PSUV debe trasmitirnos por los canales regulares. Si el Plan de guarimba no se presenta, es importante estar activo. Es decir, es importante mantenernos movilizados o encuartelados civilmente a través de discusiones en grupo en las plazas Bolívar.
La agenda pude incluir temas, puntos y problemas que serán importantes para aprovechar mejor un nuevo plan de gobierno del comandante Chávez y preparar la batalla para el 16-D. Hay una versión para el tercer plan socialista nacional, perro aún no tenemos una versión para el primer plan estadal y municipal socialista. En consecuencia, un punto de esa agenda debe estar orientado a exigirle a las autoridades del PSUV en cada entidad, el diseño y formulación de un plan socialista estadal que nos muestre: Qué entidad Territorial necesitamos construir en perfecta sincronía con el tercer plan socialista nacional. La idea es hacerle un corte a gestiones improvisadas que muestras escasa coordinación con las políticas nacionales y en darle viabilidad a la frase: ¡Un Solo Gobierno!
Un segundo punto de esa agenda, tiene necesariamente que discutir y lograr un pronunciamiento contundente por el rescate de nuestra bandera: Democracia Participativa y protagónica y desarrollo del Estado Comunal. Ya no deben darse más excusa que haga infinito el invento de la cooptación. Una vez concluida la elección de los gobernadores; el PSUV debería abocarse a construir un partido con la participación de la militancia para darle sentido práctico a principio de la democracia participativa y protagónica. El método de tener autoridades elegidas por la base no deja de ser una opción con posibilidades de contaminarse, pero es una fórmula más acorde con nuestra bandera.
Es importante incluir en estos debates, la visión de hacer una evaluación de cada uno de los PSUV estadales y hacer los ajustes que se consideren necesarios, tanto en los respectivos CC-Carabobo como a nivel de los equipos estadales. En muchas entidades, los camaradas y las camaradas que integran el comando y el equipo de coordinación estadal que son los mismos, no tienen tiempo para asumir estas dos responsabilidades y les falta formación y más práctica política para entender las responsabilidades que asumen. Hay deficiencias que a veces se perciben problemáticas.
Estos dos puntos y otros que pudieran incluirse, son muy puntuales para justificar estar movilizados políticamente en estos días. Estos debates no deberían conducirse bajo la condición de si hay o no hay guarimbas. Independientemente de esa situación; la discusión debe iniciarse. Es básico para los estados y municipios exigirles a las autoridades planes y que nuestros candidatos a las alcaldías y a las gobernaciones deberían tomar como las propuestas fundamentales para conducir sus gestiones.