En un artículo anterior y cuyo título fue: ¿PSUV medio Fraudulento?; Planteaba el asunto de unos cuatros o cincos camaradas en todas las entidades federales que con la bendición de las autoridades nacionales y la llamada cooptación, decidían por su cuenta postularse para una cosa, para otras más y para otra que viniera. Cargos que van a una elección por el CNE, son cargos que están entre los derechos absolutos de estos camaradas.[i]
Se produjo el reglamento y suponíamos que este instrumento erradicaría esta especie de derecho absoluto y único para estos compatriotas. El reglamento no aparece oficialmente en la página Web del PSUV, por lo menos hasta la noche de este miércoles 06/02/13 y esa situación de ser un documento casi clandestino, crea su ruido. Si colocas en el sitio “Buscar” de la página Web del PSUV, la frase: “Reglamento de selección de candidatos para alcaldes”; la página te remite a la declaración que ofreció Diosdado a los medios de comunicación. Más allá de esa “información”, el asunto se encuentra en la penumbra.
Como hasta el momento que hice la consulta a la página Web del PSUV no había un documento oficial sobre el método, creo necesario releer esta declaración con el librito rojo y con el documento de la cinco líneas estratégicas en la mano para captar el trancazo que le puede llegar a la democracia protagónica y observar, después de realizara la respectiva comparación; la distancia entre lo que hacemos y lo que está en esos documentos. El partido maquinaria se fortalece.
Hay toda una movilización que ahora se mueve en las pantallas de los monitores de computadores, en las cuales se cocinan las cartas con la idea de plantear una "justificación" para asegurarles a estos pocos camaradas sus derechos absolutos y privados y hacerse con las candidaturas a las alcaldías. No nos extrañe, que estas cartas venga adornadas con una cita de Bertolt Brecht, planteando que estos cuatro o cincos camaradas son hombre imprescindibles.
Hay cartas que están en proceso de elaboración y que pronto llegaran a la Dirección Nacional para su consideración. Las cartas serán totalmente legales o como suelen decir los abogados: Ajustada a derecho.
El texto de la declaración de Diosdado en resumen, dice que Los diputados y diputadas no podrán pero podrán -¿y serán?- candidatos. La información que se ofreció dice así:
“No podrán ser postulados los diputados y diputadas a la Asamblea Nacional, a los Concejos Legislativos Regionales o al Parlatino (principales y suplentes), sin autorización expresa de la Dirección Nacional del PSUV y el Alto Mando Político de la Revolución”. O sea, si tiene la autorización del alto mando político, no hay democracia participativa y protagónica que valga.
Leída adecuadamente esta información, me vino a la mente un decir mexicano: pos no, pos sí mi cuate. Si la Dirección Nacional y el alto mando político acompañan el sentido de estas cartas; el trancazo a la participación protagónica en algunos escenarios será contundente.
La información de prensa dice que Diosdado
(…..) Resaltó que el reglamento contempla que la Dirección Nacional del PSUV tendrá la atribución de aplicar cualquier método de selección de candidatos y candidatas, distinto al establecido, de acuerdo a la situación política de cada municipio o circunscripción electoral: “Ojalá que no haya ninguna necesidad de aplicar algún método especial”[ii]. Ojalá digo yo, que la democracia participativa y protagónica gane la primera lucha dentro del PSUV.
Si a la Dirección nacional le da la gana, puede “aplicar cualquier método”. O sea; el protagonismo continúa siendo un espejismo y como muchos diputados y diputadas que conocen de estas caídas están preparando las respectivas cartas para solicitar que la Dirección Nacional “aplique cualquier método”, que tenga la virtud de colocar a estos diputados como candidatos a las alcaldías.
¿Será que un curul de un Consejo Legislativo no ofrece muchas oportunidades y una alcaldía si? ¿Será que en las alcaldías hay más chambas?
@ClaudioElcuaco