¡Los chavistas nos siguen faltando el respeto! El vacilón que nos tienen montados va para largo. En estos carnavales nadie se disfrazó de Antonio Ledezma, ni mucho menos de Ramos Allup, y de Fracaso Petkoff ni de vaina. En cambio uno salía por allí y veía carajitos disfrazados de patriotas, de Simón Bolívar, de Antonio José de Sucre, de Luisa Cáceres de Arismendi, y ¿adivinen? De Chávez. Acabamiento de mundo.
Y el dictador dio la orden de devaluar la moneda -ajuste dicen los chavistas- y nosotros le caímos encima a Nicolás Maduro, quien no estuvo en ese peo, allí estuvieron Giordani y Nelson Merentes, pero claro, nosotros le caímos a Maduro por si acaso hay elecciones ya lo estamos poniendo mal. Decía el papá de Margot que “cuando nosotros, en el gobierno de Carlos Andrés, lanzamos el paquete gracias a Miguelito Rodríguez, Moisés Naim, Ricardo Hausmam y Gerber Torres, la gente salió desde Guarenas, pasando por Caracas y toda Venezuela, a saquear lo que encontraba a su paso, en cambio, estos chavistas lanzan su paquete, y más de 19 millones de venezolanos salen a divertirse en carnavales, así que la oposición tiene que explicarme bien esa vaina a mí, porque los marginales esos siguen recibiendo casas y van a los CDI y nadie les cobra un carajo”, así dijo el hombre frente a Globovisión que estaba de fiesta con Guillermo Zuloaga, porque parece que estaban celebrando el día del Especulador.
Tenemos que revisarnos, ya Diego Arria se arrechó y creó una vaina nueva que ni sé cómo carajo se llama, es decir, que se apartó de la mesa, hay otros compañeros que están creando una Junta Patriótica –eso es lo único patriota que tenemos -, porque creen que no hay gobierno y que en cualquier momento nos llaman a gobernar, otros que no quieren nada con Embajada Radonski porque sienten que dejó de ser radical para meterse a pendejo, otros apoyan a Antonio –sin período- Ledezma y a María Corina Machado, porque dicen que son los más arrechos, los que saben darle duro al dictador.
En fin, que nos agarró el carnaval y seguimos fracasando, y los chavistas de fiesta en fiesta, y eso que el dictador está en Cuba y no saben cuándo viene. Ayer el papá de Margot puso por casualidad el canal ocho, y vio un gentío en una bailoterapia en Vargas y dijo: “Se nota que esos chavistas están sufriendo por la devaluación”. Apagó el televisor y se fue al cuarto y le dio un coñazo a la puerta tan duro , que los vecinos gritaron a coro: “Ya basta, no joda”.
-Tú lo que quieres es que me coma el tigre.- me canta Margot