Roger Capella Mateo
Cuando en alguna de esas columnas como Corín Tellado o algunos fabricantes de libros de la izquierda (y de la derecha también), reciclan siempre el mismo discurso para vendérselo a su clientela, aparecía la enfermedad infantil del comunismo, o el oportunismo de derecha o de izquierda, o el blanquísimo o los "teresianos" (en lo político) de Calcuta, o los pasados de vivos, o los burócratas o los corruptos o los que ignoraban la geopolítica al opinar, no había tiempo de pensar en una respuesta, porque nuestro comandante y líder eterno de esta Revolución, en un Aló Presidente, o en cualquier acto, proporcionaba una opinión que le salía al paso a cualquier distorsión del eje estratégico de este proceso. Nos acostumbramos a la respuesta oportuna y contundente de Hugo Chávez. Es probable que su humildad, la manera coloquial de expresar las ideas, no permitiera tampoco comprender la inmensa densidad de su pensamiento ideológico. La Revolución y la esperanza que había producido en los pueblos del mundo, y produce, en el campo de la fosilizada izquierda del planeta. Un Maneirista audaz. Nos golpea demasiado su ausencia.
Cuando la oposición es derrotada, y su facción fascista, encabezada por el mocho Capriles hace un llamado a descargar su arrechera a un importante grupo de "blusson noire", que deja un lamentable saldo fatal, once compatriotas asesinados, 25 centros hospitalarios violentamente agredidos, sedes del CNE regionales, locales comerciales, asediados y violentados y que solo -hasta hoy- se han producido amenazas de ejercer la justicia contra el delincuente mayor, el mocho Capriles, pero también a su banda, uno se pregunta ¿dónde están los revolucionarios, Chavistas, movilizándose y exigiendo justicia para que los familiares de los once mártires del 15 de Abril y todo nuestro pueblo, Patriota, tenga que tragar cada día la amarga saliva de la impunidad, mientras los delincuentes recorren el País y viajan a otros Países, para seguir conspirando. Izquierda, ¿dónde están?
Cuando nuestro Presidente electo el 14 de Abril, Nicolás Maduro, en solo dos meses, ha recorrido nuestra geografía, en una suerte de democracia directa, ejerciendo el gobierno de calle, oyendo, recogiendo propuestas y firmando su ejecución. Recibe el apoyo de todos los gobiernos del mundo (o su reconocimiento) garantizando la legalidad y la legitimidad en el orden internacional. Realiza breves salidas para consolidar nuestros aliados de la América del Sur y neutralizar opiniones en el viejo continente. Ha demostrado que su pasado sindical le ha permitido, al lado de la formación que supone ser el canciller de Hugo Chávez, ser un eficiente negociador en lo que algunos han calificado de guerra económica Nacional y de todas las amenazas de construir una crisis política de pronóstico reservado. Sin embargo una parte de la izquierda le increpa su reunión con el dueño del holding agro-alimentario más poderoso de Venezuela, donde logra un acuerdo positivo. Algunos casi gritan: ¡todo el poder a los soviets!
Cuando nuestro gobierno revolucionario desarrollando un gigantesco y audaz plan para garantizar la seguridad de nuestro pueblo y que no solamente incorpora a los diferentes cuerpos de seguridad del estado, que estratégicamente han tomado el País, sino que también se acompaña de un hermoso proyecto de la paz y la convivencia, dirigido a recuperar a nuestra juventud envenenada por la "universidad capitalista" del delito, para incorporarlos a diversos planes que los revaloriza y les brinda oportunidades de insertarse en nuestra sociedad. Y que en pocas semanas ha logrado un éxito inocultable, que oscila en una reducción de los hechos delictivos, del 30 al 70 por ciento. Los medios de la derecha lo invisibilizan, pero ¿dónde está nuestra izquierda para hacerlo conocer a gritos?
Cuando la derecha construye una matriz de opinión que no solo alcanza al ciudadano capturado por la disociación psicótica, sino muchos compatriotas caen en la trampa, de desabastecimiento, y vamos a los supermercados y están llenos de gente, lleno de miles de productos, menos una media docena, hábilmente seleccionados por su utilidad cotidiana, pero también vemos que esos mismos productos los ves vendiendo en la playas de los mercados o en puntos estratégicos de la ciudad, claro, más caros. Y esta matriz del desabastecimiento la asocian con la especulación, enfermedad más arrecha que el cáncer que devora a todo comerciante, grande o chiquito, Produciendo compras desesperadas y absurdas y pago de productos con precios inexplicables, donde el que más se perjudica es nuestro pueblo trabajador. Donde está la izquierda que ejerza la inteligencia social para descubrir los acaparadores, los especuladores. que le expliquen y concienticen a nuestro pueblo que evite las compras nerviosas e irracionales.
Cuando la derecha comete una multiplicidad de hechos violatorios de casi toda la constitución, observamos cómo sus culpables o no los investigan o lo hacen con una sedosidad y con unos medios de comunicación que hacen del delincuente un héroe perseguido político del "régimen". En cambio cuando a Mario Silva le difunden un montaje de una extraña conversación, sale del programa "la Hojilla" y ya ido dos veces a declarar a fiscalía. Y una parte de nuestra izquierda se dedica a preguntarse si lo que se dijo en ese montaje es verdad o es mentira, algunos con una pureza angelical. Donde está la izquierda que exija a la fiscalía la misma conducta con el fascismo conspirador y anticonstitucional y antipatías?
Cuando la derecha que ha crecidos durante nuestro proceso Revolucionario en el campo de la medicina privada sin precedentes en la vida Nacional (no olvidemos que las grandes clínicas privadas del País, estaban quebradas o casi, en 1998, hoy son unos emporios de riqueza. Por cierto financiado fundamentalmente por el estado venezolano con los fulanos hace. Es decir que el gobierno revolucionario financia la medicina privada donde tenemos los peores enemigos en los profesionales y no profesionales también. Que hace la izquierda? No se le ocurre otra cosa que crear un seguro para pobres y "matizar" los honorarios de dichas clínicas- En vez de liquidar todos los HCM que paga el estado venezolano e invertirlo en el fortalecimiento del sistema público de salud. Que no es posible? y porque el cardiológico infantil si funciona? Será que la izquierda cree en la medicina socializada o no?
Leí por ahí un artículo de un culto izquierdista, haciendo comentarios sobre los concejos comunales. Que si eran una propuesta del nuevo poder popular, etc. Por qué no decir que los concejos comunales están destinados a ser el nuevo estado, que lo que lo que queda del viejo estado, las alcaldías y gobernaciones, deben desaparecer. Debe nacer la comuna. Los camaradas, que son verdaderamente de izquierda, alcaldes o gobernadores deben enterrar el viejo estado. No se puede estar con Dios y con el diablo simultáneamente.
Hoy cuando la derecha está más dividida. Los profundos conflictos que producto de las ambiciones personales ha surgido para la escogencia de los candidatos de alcaldes es una guerra a cuchillo. Cuando entre los altos mandos de la mud se debate entre la entrega, en pelota, del País a los gringos y/o a la OTAN para que se lleven el petróleo que nos queda y la posibilidad de una salida constitucional y los que están con una pata en las dos posiciones, cuando es el momento de aplastar políticamente a esta derecha mediocre, la izquierda está debatiendo, como en épocas pasadas el antropocentrismo.
Se está discutiendo sobre la constitución de escuelas de cuadros políticos, o desarrollar las que existen. Muchas de estas escuelas de cuadros parecen conventos. Solo les falta que les entreguen a los compañeros una biblia a ser memorizado. UN cuadro político se forma en la lucha diaria, en el debate cuotidiano, en la confrontación. No existe cuadro que no luche ni tampoco que no estudie. No se puede formar a los cuadros como una organización revolucionaria en la oposición a cómo deben formarse los cuadros cuando se tiene el poder. No se puede ser un cuadro revolucionario Venezolano si no se conoce a fondo el pensamiento del comandante eterno Hugo Chávez. Se puede aprender mucho de la experiencia de nuestro continente en primer lugar. Se deben examinar otras experiencia. Sin lugar a dudas, Hugo Chávez fue un gran formador de cuadros. Logró que todo ciudadano que se confiesa Chavista sea un cuadro; en cualquier grado, de esta Revolución. La formación de todo ciudadano en los tres niveles de estudio, y mucho más allá debe responder al nuevo bloque cultural que debe regir la Nación Venezolana, la que corresponde al mundo del trabajo.
Antes del año 1998, resultó difícil o casi imposible unir la izquierda Venezolana. Hugo Chávez lo logró. y mucho más allá de la izquierda tradicional. La muerte física del Comandante eterno ha permitido que resuciten algunos fantasmas. Porque, por favor, no resucita el Comandante Hugo Chávez Frías.
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