Tantas veces que he escrito sobre este tema, pero casi nadie lo lee, al parecer, nadie le para, y creo que casi nadie tampoco hoy leerá este articulo, pero, qué va, creo que es mi deber Revolucionario. Veámonos en el espejo.
Más y más escucho a más y más personas, entre ellas supuestos chavistas, que se quejan de la economía, de la tremenda inflación, de la especulación, el acaparamiento, el desabastecimiento, el dólar paralelo, etc., echándole la culpa al gobierno, o a cualquier otra cosa, pero nunca a nosotros mismos.
La realidad, aunque no nos guste, es que la culpa es nuestra, y aquí les presento una lista de sugerencias, cosas que todos y todas podemos hacer, a diario, para combatir este flagelo, este saboteo económico, que nos azota a todos, todos los días. Si todos, juntos, de manera constante, contribuimos con nuestro granito de arena, las cosas mejorarán de manera considerable, pero hay que hacerlo, y no es tan complicado el asunto.
Si somos verdaderamente chavistas, patrióticos, si de verdad queremos ser independientes y soberanos, entonces, ¿por qué no hacerlo? Nos costará un poco de esfuerzo moral, pero al final, estaríamos ayudando a mejorar nuestra situación.
1- Parar de comprar cualquier producto que sea fabricado por empresas gringas, productos como Nestle, Kellog, Proctor & Gamble, Nike, Adidas, etc.
2- Parar de comer en cadenas gringas, como Mc Donald’s y Wendy’s.
3- Parar de comprar cosas que no sean necesarias.
4- Parar de comprar películas y juegos videos de origen gringo, productos de Hollywood o de Walt Disney.
5- Parar de comprar artículos de marca.
6- Parar de comprar whiskey importado.
7- Parar de comprar productos de tabaco importado.
8- Parar de ir al cine cuando presentan películas producidas en gringolandia.
Esencialmente, los que debemos hacer, es sabotear todo lo que sea gringo, y todos lo posible que tenga base en el dólar, como las importaciones. Al sabotear este sector de la economía estamos saboteando el mismo sector que nos está saboteando. Si alguien nos golpea con un bate de beisbol, hay que golpearlo con un bate de beisbol, no con una pluma de gallina.
Andamos como pasajeros en un barco crucero que se está hundiendo, pero no hacemos nada para salvarnos, o para ayudar al capitán, solamente nos quejamos, y le echamos toda la culpa al capitán y su tripulación mientras que tragamos agua salada y agarramos con todo fervor nuestras carteras para no perderlas en el mar.
Al parecer queremos hundirnos, y seguir dándole golpes duros al enemigo con una pluma de gallina.