Interpelación cumpleañera

Jab-Alí

En noviembre de 1985 el huracán “Kate” avanzaba poderosamente por el Atlántico, mientras muchos embarcábamos hacia el festival cubano de Varadero. No hubo festival y tampoco pudimos (músicos y periodistas) salir de La Habana, donde la situación era tremenda y vivíamos los vientos y aguas de Kate en directo. De todo ese fenómeno quedó el saldo de dos muertos, (imprudencia) muchos recursos de los cubanos perdidos, devastados, y se plasmaron, como siempre, la solidaridad y el coraje.

Cuando retorné a Venezuela y me reincorporé al periódico (El Diario de Caracas) llevé fotos de los desastres ocurridos.

El director me preguntó: “¿Cuántos muertos hubo?”

-Dos, le respondí.

“Ah, entonces no fue tragedia nada”. Aprendí que para algunos, tragedia es solo la muerte, y depende…

¿Por qué traigo este recuerdo?

De sismo en sismo

En enero de 2010 Haití prácticamente sucumbió ante un terremoto que, como toda tragedia, hizo emerger lo mejor y lo peor del ser humano. Se perdieron más de 300 mil vidas y en medio del dolor y la devastación a los haitianos les tocó, como siempre, sobrevivir y adecuarse, como la emblemática palmera de su escudo… su escudo, el mismo de 1807, como su nombre de país, el que le dieron sus originarios, y conservaron, como su moneda, la misma desde 1813…

En esos momentos se volcó toda suerte de ayuda sobre nuestro vecino hermano, el país protector de nuestra independencia. Las hubo interesadas, tipo show, y las del alma, como las de Nuestramérica.

El canto de Alí Primera fue el primero que voló: La noche del Jabalí emergió para hacer patente un reclamo centenario, plasmado por nuestro padre cantor en 1981, cuando Haití vivía otra tragedia, política. Otro tipo de terremoto.

Ahora, en octubre de 2013, por una decisión de rango constitucional, la justicia de la República Dominicana sacude otros cimientos. Decenas de miles de descendientes de haitianos perderán su condición de dominicanos, el país de nacimiento, pues sus padres no tenían papeles legales cuando pasaron la frontera político administrativa que separa a las dos naciones que comparten una isla. La medida será retroactiva… desde 1929. Esos descendientes de haitianos pasarán a ser apátridas, y un limbo jurídico de grandes proporciones se abrirá ante ellos.

Recuerdo la vez que una dominicana me dijo: “Por necesidad los haitianos se van a Dominicana; por necesidad los dominicanos venimos a Venezuela…”. “Entre tu pueblo y mi pueblo/ hay un punto y una raya/ la raya dice ‘no hay paso’/ y el punto, ‘vía cerrada’… caminando por el mundo/ se ven ríos y montañas/ se ven selvas y desiertos/ pero ni puntos ni rayas/ porque esas cosas no existen/ sino que fueron creadas/ para que mi hambre y la tuya estén siempre separadas”. El escrito de Aníbal Nazoa golpea, nos golpea.

A diferencia de los días del terremoto de 2010 no veo escritos acerca de este abismal tema, no veo conmoción ni vista larga. Veo a Haití peleando sola contra ese nuevo sismo de dolorosas réplicas y veo la mano solidaria de Caricom junto a la suya; leo de voces que comienzan a levantarse en el mundo, todavía no siento la de la ALBA, ni la de la Celac… y ese sismo está en pleno desarrollo. Extraño a Chávez…

Vuelvo a Alí. Vuelvo a La noche del Jabalí: “¿Qué cuántos habitantes tiene?/los que le quedan después de tanta masacre/ ¿Que si luchan?/ además de sobrevivir ¿que si luchan?”… “No permitamos que el futuro nos pregunte/ ¿Qué hicieron ustedes por Haití?/ y respondamos bajando la cabeza”


Cumple Alí

Coinciden estas duras horas con el aniversario 72 del natalicio del Padre cantor, el que siempre nos interpela, porque su canto no puede estar quedando sólo para avalar posiciones oficiales o para ser cantado entre amigos. No es el de Alí canto de circunstancias. Este falconiano sembrado en nuestras conciencias todos los días renace para, repito, interpelarnos. Ratifica lo cantado por Víctor Jara: “Canto que ha sido valiente/ siempre será canción nueva” y lo que nos dejó también en canto el inolvidable Noel Nicola “Si somos igual que tú/ y tú no puedes ser feliz/ ¿de qué nos valen todas nuestras alegrías?” Es la solidaridad, que se ejerce sin acomodamientos y sin esperar llamados u oficios. Jab-Alí.

Este jueves Paraguaná vuelve a llenarse de cantos y labores. Heberto León, Ramiro Ruiz Primera y Simón Petit nos lo hacen saber.

El próximo miércoles en los espacios del Club Bolívar habrá una muestra colectiva denominada “Alí, siempre Alí”, expo-venta, conversatorios, foro, cine y música. A las 3 de la tarde de ese día en el teatro “Armonía” de Coro habrá el acto “Vigencia, obra y legado de Alí Primera y Hugo Chávez”. Ahí estarán Héctor Navarro, Luis Bigott y la gobernadora del estado Falcón, Stella Lugo.

El jueves 31 tempranito se hará la bajada de Alí. Y es que en Caujarao (vía Coro- Churuguara) está esta localidad en cuya entrada, a ambos lados de la carretera hay dos grandes imágenes: la de Santa Ana (patrona de la ciudad) y la de Alí, a quien muchos consideramos Precursor de la Revolución Bolivariana. En Caujarao hay también un monumento en el lugar donde fueron expuestas las manos cortadas de José Leonardo Chirino, otro inmortal rescatado en canto por Alí.

Así como “se baja” a Santa Ana los 26 de julio, así los falconianos han comenzado a “bajar” a Alí los 31 de octubre, ascendiendo (y descendiendo) los 228 escalones que conducen a su colorido monumento. A las 9 de la mañana mientras tanto habrá misa en la casa museo de Alí en Punto Fijo y a las 10 de la mañana habrá sesión solemne en el Consejo Legislativo del estado. A las 5 de la tarde en las instalaciones de PDVSA La Estancia, de allá será la canción de la Paz para Alí.

La programación seguirá viernes y el fin de semana e incluye una cantata para quien tanto nos enseñó con su canto, ese canto que nunca bajó la cabeza y que supo llegar solidario a cada pueblo en el que la esperanza parecía caer: Canción para los valientes, a Chile, Piraña con dientes de oro, a Paraguay, Borincana, a Puerto Rico, Agua clara, Nicaragua, a Nicaragua, Canto Oriental, a Uruguay, El sombrero azul, a El Salvador, El cantor de Bolivia, a Bolivia, La guerra del petróleo, a Colombia, Black Power, al pueblo de EEUU, (diferente a Don Samuel, dedicada al gobierno de EEUU -Yo no le digo Tío, Don Samuel /porque hermano de mi Patria usted no es-), Cuba es un paraíso, a Cuba, y, claro, La noche del jabalí, a Haití y a quienes estamos llamados a ser efectivamente solidarios con ella.

Construyamos entre todos la mañana…Alí lo pide.


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Lil Rodríguez


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