A Parte de cada uno de los miembros de la Dirección Nacional del PSUV, más nadie o casi nadie y ello incluye al propio Eduardo Samán, se han percatado que el PSUV no lo quiere y por no quererlo en ninguna parte, lo ubica temporalmente en una responsabilidad.
Se percibe que Eduardo Samán tiene un apoyo a nivel de eso que llamamos Poder Popular, pero que igual, esto no tiene ninguna trascendencia y no se nos permite ser informados sobre las razones de sus botadas. Estoy en la idea de creer que el PSUV ha hecho un uso abusivo de Eduardo Samán y lamentablemente creo yo, el camarada Eduardo Samán no logra entender esta situación. Es fácilmente utilizado para una cosa, para desactivarlo en otra.
Eduardo Samán fue de alguna manera el primero que se percató y precisó lo que ahora está en pleno desarrollo: La Guerra Económica. La detectó a tiempo y cuando estaba en plena faena de trabajo, fue botado sin ninguna explicación muy a pesar del apoyo que recibió antes y después de la botada de su primer cargo. En esto de la alimentación y de la guerra económica, muy difícilmente, puede ubicarse o identificarse a otro funcionario con un perfil de trabajo tan intenso y efectivo como el camarada Eduardo Samán.
Si recordamos, el camarada Eduardo Samán estuvo en los días previos a la supuesta precampaña para la selección de los candidatos a las Alcaldías. Poco después y con unos intentos de ponerle algunos obstáculos para su candidatura, nos sorprendió luego que a través de un twitter, los venezolanos y venezolanas que estamos de este lado, nos enteramos de una decisión que pudo comunicarse de esta manera: “He decidido nombrar a Eduardo Samán Presidente de Indepabis para que haga la Revolución dentro de la Revolución, para que proteja al pueblo”
Esta decisión la conocimos en junio 2013 y el proceso de selección de candidatos a las alcaldías fue un poco después y previo a eso, Eduardo Samán sonaba como precandidato. Tal vez exagero, pero como nadie allá arriba –PSUV- quiere a Eduardo Samán, pienso que fría y maquiavélicamente lo marearon unos días y lo designaron nuevamente jefe de Indepabis para dejarlo fuera de la competencia y no crear fricciones. Culminada la campaña y cada quien en su lugar se impone el no ver bien a Eduardo Samán y prácticamente se le bota sin ninguna explicación.
Aunque desde la estructuras del PSUV hay supuestamente mucho respeto y consideración por el Poder Popular, esta botada no merece ninguna tipo de explicación y justificación.
Al momento de redactar este artículo, pude leer en la página de Aporrea una información, en la cual se informa sobre los mensajes que Eduardo Samán ha puesto a circular a través de su cuenta twitter. En uno de ellos, Samán nos dice: “Me voy de Indepabis con la satisfacción de haber cumplido”. Así es, cumpliste, pero no es del todo cierto eso de “me voy”.
Si tienes el proyecto de lanzarte para las parlamentarias, cuando llegue el momento, evita tropezar por tercera vez con la misma piedra. Ya está bueno de ser increíblemente ingenuo.