La cosa era toda una trácala. No estaban en campaña ni nunca lo estuvieron. ¿Cuántos anuncios se vieron por parte de la oposición? Hace tres días yo vi a William Dávila Barrios en el mercado principal de Mérida totalmente solo, parecía un despistado turista que no sabía por dónde estaba la salida. Le pregunté a un viejo adeco (pues William ya no lo es) si el ex gobernador estaba en campaña y me contestó: “No chico, vino a comerse un mondongo”. Luego caí en la cuenta de que realmente no había propaganda de la oposición por casi ningún lado, y que no les interesaba hablar con la gente ni dar discursos, ni meterse en los barrios, ni recorrer las calles. Ni un megáfono usó esta gente en Mérida.
Eso me pareció muy raro, sobre todo por parte de la gente de Primero Justicia que mueven millones de dólares, el hecho de que ni siquiera mostraran un
cartelito con esos chamos lustrosos con manteca de cochino. Me he dado cuenta de que en verdad la oposición, desde el 2002 no actúa desde un puesto de combate ideológico, desde un partido, sino como una bandada de novicios malcriados cuya única estrategia es hacer lo que les dicta Globovisión o El Nazional.Pues se jodieron por vivir viendo y escuchando el programa del enano
Leopoldo Castillo.
Ahora bien, por lo que se refiere al futuro, se han desmadrado. Quedarán sin partidos, sin representación en la AN, sólo con los micrófonos de RCTV y Globovisión para hablar pendejadas a cualquiera hora del día. Eso los anulará totalmente: se cansarán, como se cansaron Américo Martín, Enrique Mendoza, Manuel Cova, Alfredo Peña o el viejito Miquilena, y bueno a llorar al valle. A mí me parece que lo que hicieron era totalmente natural en ellos. Si iban a las elecciones, estaban muertos y si no, también. Pero la primera opción hubiese sido más digna para ellos. Pero carecían del valor y del coraje para asumir la derrota.
Ellos siempre quieren ganar como en las películas gringas donde actúa Rambo Nunca han asumido nada, y cogieron las de villa Diego. Pues está bueno. Estaban muertos ya, y se lanzaron como unos lemures por el abismo. Lo único que me pareció extraño fue que Primero Justicia optara por esa manera de desaparecer, pero es que realmente estos tipos, desde el Julio Borges o el Gerardo Blyde hasta el más recién enjabonado de sus muchachos malcriados no pasan de ser realmente unos palurdos que no tienen la menor idea de patria, de país ni conocen en absoluto la historia de Venezuela, la razón de ser esta Nación y a lo que debe dedicarse un político.
¿Quién en el mundo se va a comer el cuento de que se retiraron de la contienda porque les iban hacer trampa, cuando esa fue la cantaleta que esgrimieron durante el referendo, siendo que en aquella ocasión el Centro Carter y la OEA aprobaron los resultados del CNE?
Se retiraron y se jodieron. Yo recibí una información de que en Caracas muchos escuálidos estaban realmente indignados, llorando como magdalenas por esta desmoralizante pifiada comandada por ese par de energúmenos del Allup y Vivas. Bueno, esa era la estocada que le faltaba a una oposición cuyas banderas están en la Casa Blanca, cuyos valores éticos se tasan en dólares, y que en verdad jamás han tenido condiciones para dedicarse a la labor de dirigir el pueblo, de orientar sus luchas, de atender sus necesidades, de conocer su destino.
Una oposición dedicada al deporte del brindis, de los aplausos de los ricos y poderosos, de la pantalla, del chisme, de la desvergüenza y del escándalo, del crimen y de la perfidia.
En buena hora se han ido, yo me congratulo de tan singular y repentina
muerte. Ahora si es verdad que no volverán, a menos que sean como los
propios fantasmas que sacudían los novicios rebeldes del Primero Justicia.
RIP.