Qué vergüenza! Qué dolor! Qué lamentable! Esta semana que debería elevarse el espíritu de la juventud, de la amistad y del amor, nuevamente, la oposición irracional aviva las llamas de la violencia con la finalidad de encender el país y conseguir un escenario que desate la anarquía y la desestabilización. Otra vez, como años anteriores los sesudos opositores se trasnochan escribiendo las páginas oscuras de unos cuentos macabros estimulando a pequeños grupos de estudiantes a arreciar unas manifestaciones violentas con los objetivos claros de sabotear y tratar de salir, por estas vías inconstitucionales, del gobierno legítimo de nuestro presidente Nicolás Maduro y, por consiguiente, salir de las fuerzas revolucionarias Bolivarianas y Chavistas.
Por lo visto, la oposición se dividió y al parecer le dieron golpe de estado a Henrique Capriles Radonski, por pasivo y por no estar de acuerdo con estas andanzas oscuras, donde ha salido muy mal parado. Espacio que recupera el siempre vago y delincuente Leopoldo López, azuzador, violento, con un amplio palmarés de acciones virulentas, antidemocráticas, irreverentes, gavilleras, corruptas y viles. Leopoldo López es ahora la nueva baraja del imperio para protagonizar una serie de acciones tóxicas para la sociedad venezolana. Es el títere de los medios opositores, de grupúsculos de familias adineradas y de una oligarquía que se niega a considerar las voces de las mayorías, la voz del pueblo, que en 15 años, 19 veces ha aprobado este proceso de transformación sociopolítica, que no ha avanzado con mayor eficacia por los múltiples obstáculos que han colocado esta oposición recalcitrante, reaccionaria, violenta y guerrerista.
Mientras nuestros jóvenes, que somos la mayoría, puesto que en este país se abrieron las oportunidades de estudios haciendo una vida juvenil de mayor inclusión e igualdad social, estamos al lado de las propuestas del presidente Maduro de construir la paz, de edificar un país donde podamos albergar los beneficios y disfrute de la normal convivencia en tolerancia y paz; tenemos que detener nuevamente los grandes propósitos libertarios para adversar con las malcriadeces y tozudez de unos disociados violentos que no les interesa el país y su desarrollo sino, por el contrario, magnificar la destrucción, el terror, la muerte a fin de servir de piezas de los grandes empeños personales de vándalos que utilizan la política como un negocio como es el caso de Leopoldo López y María Corina Machado, quienes desean ver la patria arder, para correr a Estados Unidos a llevar con regocijo un parte de luto y pesar.
Convencido estamos que las fuerzas de avanzadas, revolucionarias y chavistas, volveremos a salir airosos frente a estos cuentos macabros que Leopoldito y sus disociados pretenden escribir en el país. Da cosa ver el antagonismo de como la juventud revolucionaria está desplegada colaborando y ayudando al Gobierno y a la patria a destruir la especulación y el acaparamiento, a bajar los índices de la delincuencia; nuestros jóvenes revolucionarios estamos luchando por una Venezuela libre de las mafias del terror económico, de los criminales, sumando todas las voluntades por la consolidación de la paz nacional, del amor y de todos los sentimientos nobles que nos unen como pueblo; y por otro lado, un microscópico grupo de jóvenes delincuentes, que envejecieron su alma y su espíritu, los llenaron de maldad y violencia, incendiaron sus propias vidas expulsando un odio inoculado por sus pseudos dirigentes fascistas como Capriles, Machado y Leopoldo López.
Los hijos de Chávez estamos resteados con Nicolás Maduro, con esta revolución, con el pueblo, con la soberanía y con la patria. Nuestra juventud y nuestro gobierno no permitirán que un grupito de burgueses embochinchen el país. Apagaremos los focos de violencia con la autoridad de la ley y la Constitución, porque la trama de este episodio macabro es la muerte para avivar los ánimos de la irracionalidad opositora que no quiso, no quiere y nunca estará de acuerdo con los intereses del pueblo; porque lo lamentable de todo, es que esa oposición no tiene nada que festejar esta semana porque no tienen juventud y no poseen amor en sus corazones.
Nosotros a seguir luchando, a seguir avanzando, a seguir consolidando el legado de nuestro comandante Eterno Hugo Chávez Frías de construir un país de paz y de amor, y recordar esa máxima chavista que “nuestra capacidad de amar es infinita”. Feliz día de la amistad y el amor!.