El pasado 6 de mayo, el Ministro del Ambiente Miguel Rodríguez anunció a través de una rueda de prensa el Plan Especial de Abastecimiento para el suministro de agua potable en Caracas, Miranda y Vargas; la razón de este plan especial es la prolongada sequía por la que atraviesa el país.
No bien había terminado de hablar el ministro Rodríguez, cuando ya estaba el Alcalde de Sucre, Carlos Ocaríz -a través de Globovisión- haciendo las más enrevesadas declaraciones acerca del suministro de agua potable en el municipio Sucre, pretendiendo endilgar a Hidrocapital los problemas que han enfrentado los pobladores de Petare debido al ineficiente servicio prestado por el Instituto de Agua del Municipio Sucre (IMAS).
Ocaríz comienza simulando que él ignoraba que en Caracas, Miranda y Vargas existía desde hace un año un plan de abastecimiento en prevención a la sequía, que ya había sido anunciado por las autoridades de Hidrocapital y que ese plan de abastecimiento buscaba minimizar los efectos que pudiera ocasionar la prolongación de la sequía.
El ingeniero Ocaríz, bien sabe que los sistemas que suministran agua potable a Caracas, Miranda y Vargas están interconectados, de manera que si alguno de estos presenta una falla, como es el caso del embalse Lagartijo, existen maniobras para solventar la eventualidad, lo importante es que Camatagua, Taguaza se encuentran en niveles óptimos y garantizan más de 800 días de suministro.
Tal como afirma Ocaríz, refiriéndose al estado actual del servicio: esta situación no es que pasó de la noche a la mañana, esto se sabía que iba a pasar, y efectivamente el ingeniero Ocaríz viene sabiendo de los problemas de suministro en su municipio desde al año 2009, cuando decidió aumentar el aprovechamiento de fuentes propias anunciando un proyecto para habilitar la toma de La Urbina, como una de las tomas de emergencia. Prometía entonces el ingeniero Ocaríz que la obra en cuestión iba a permitir el suministro de agua potable para 40.000 habitantes, por supuesto priorizaba a los habitantes de la urbanización Terrazas del Ávila y a las poblaciones que están al frente, refiriéndose de esa manera a los pobladores de las comunidades de Petare Norte...
En aquella ocasión Ocaríz mintió y 5 años después sigue mintiendo, porque afirmó y sigue afirmando que la inversión en el Sector Agua Potable y Saneamiento es precaria, cuando la realidad indica lo contrario; Venezuela durante el gobierno revolucionario ha invertido un promedio de 800 millones de dólares anuales desde 1998 al año 2012 y ahora con el Plan Nacional del Agua la inversión sobrepasa los 16.000 millones de bolívares.
El Alcalde Ocaríz ignora, o pretende ignorar -entre otras tantas cosas más- el Plan Nacional del Agua, que incluye la construcción de 18 Sistemas de captación, 54 Plantas de potabilización 98 Líneas de aducción, 116 Redes de distribución, 26 Tanques de almacenamiento, 61 Estaciones de bombeo; la inversión será mayor a 16.000 millones de bolívares y las obras se realizarán con la participación de las comunidades a través de las Mesas Técnicas de Agua.
En realidad los problemas que Ocaríz tiene con los habitantes de las zonas populares del Municipio Sucre, es su consuetudinario desprecio hacia las clases populares, bien sea tratándose del agua o de la basura.
En lo que respecta al servicio de agua potable, existen en Petare más de 20 Mesas Técnicas de Agua y, a esta cifra se sumarán otras Mesas Técnicas que se organizarán en un Consejo Comunitario del Agua que sí tendrá injerencia directa en el funcionamiento del acueducto, en el funcionamiento del IMAS, ejecutará obras y realizará la contraloría a la Alcaldía.
La descalificación que Ocaríz permanentemente hace a Hidrocapital, no es más que parte del lobby privatizador que por años viene haciendo la derecha. Ocultan que en los tiempos de la fenecida IV República, en Venezuela ocurrían más de 500 manifestaciones violentas, cada año a causa de total ausencia del servicio de agua potable y saneamiento en las zonas que él -como sus predecesores adecopeyanos- siempre ha ignorado.
Ya están aquí las lluvias, tal y como científicamente pronosticó el INAMEH, se rebozará Lagartijo y sin embargo el abastecimiento de agua potable en Petare seguirá siendo deficiente, como la recolección de basura, el alumbrado, etc.
Ocaríz continuará privilegiando a las urbanizaciones en desmedro de los barrios populares, porque su problema no es que haya pocas lluvias, sino su evidente sequía de ideas...