Cinco años después de la primera reunión celebrada en la ciudad de Porto Alegre, al sur de Brasil, el Foro Social Mundial (FSM) 2006 se perfila como un proceso internacional permanente de búsqueda y construcción de alternativas a las políticas neoliberales, tal y como reza la Carta de Principios de dicho espacio de encuentro, gracias al auge acelerado y sostenido que ha obtenido en tan poco tiempo.

Una actividad que se inició con la participación de cerca de 20 mil personas, es en la actualidad un evento que prevé aglutinar, en la edición programada en Caracas, alrededor de 150 mil ciudadanos venidos de diferentes partes del orbe.

El incremento numérico en las diferentes ediciones evidencia la capacidad de movilización que tiene la sociedad organizada.

Además, el grado de compromiso adquirido por quienes asisten a estas citas es lo que permite la realización anual del FSM, en contraposición al Foro Económico de Davos, además de la organización de diversos foros sociales, regionales y temáticos.

¿Con qué objetivo nació el Foro Social Mundial? De acuerdo con el sitio web www.forumsocialmundial.org.br esta zona de debate, de reflexión y de formulación de propuestas debe facilitar la articulación de movimientos sociales, de forma descentralizada y en red, a fin de contribuir en la construcción de un nuevo mundo.

No funciona como una entidad o como una organización. Tampoco pretende ser una instancia representativa de la sociedad civil.

Lugar y fecha de nacimiento

Entre el 25 y 30 de enero de 2001, la ciudad de Porto Alegre recibió a 4.702 delegados provenientes de 117 países. Se registraron dos mil participantes en el Campamento de la Juventud y otros 700 en el Campamento de las Naciones Indígenas.

Se dictaron 194 conferencias centradas en cuatro ejes temáticos, a saber: La producción de riquezas y la reproducción social, El acceso a las riquezas y a la sostenibilidad, La afirmación de la sociedad civil y de los espacios públicos, así como el Poder político y ética en la nueva sociedad.

Los logros obtenidos en este primer Foro Social Mundial facilitaron la conformación de un Consejo Internacional, instancia política y operacional que define los rumbos estratégicos del FSM, además de fortalecer el hecho de que sea un espacio de encuentro democrático y de diálogo entre las organizaciones.

Cinco años de crecimiento

En 2002, el FSM se llevó a cabo nuevamente en Porto Alegre. Esta vez, la convocatoria se efectuó entre el 31 de enero y el 5 de febrero, cuando 12.274 delegados se hicieron presentes en la mencionada región del sur de Brasil para representar a 123 países.

En total, participaron 4.909 organizaciones de 89 naciones. De hecho, el número estimado de participantes superó todas las expectativas y previsiones de los organizadores, colaboradores y participantes, debido a que asistieron 50 mil personas y se afianzó la pluralidad de las discusiones.

Se dictaron 27 conferencias, 96 seminarios y 622 talleres relacionados con los mismos ejes temáticos utilizados en 2001.

Paralelo al Foro se efectuaron actividades con las autoridades locales, jueces, el campamento intercontinental de la juventud y el llamado forito social mundial. Asimismo, se realizó el Foro social africano, en Bamako, Mali.

Al año siguiente, en 2003, la cita se repite por tercera vez consecutiva en Porto Alegre. En esta ocasión para tratar los aspectos referidos al desarrollo democrático y sostenible; a los principios y valores, derechos humanos, diversidad e igualdad; a los medios, la cultura y contra-hegemonía; al poder político, sociedad civil y democracia; y al orden mundial democrático, lucha contra la guerra y por la paz.

Para 2004, el Foro Social Mundial se muda a Mumbaí, en India, como parte de la propuesta de internacionalizar este espacio de debate.

Los asistentes discutieron entre el 16 y el 21 de enero sobre democracia, seguridad ecológica y económica; discriminación, dignidad y derechos; medios, información y conocimiento; militarismo, guerra y paz; globalización imperialista; patriarcado; régimen de castas, racismo y exclusiones sociales; sectarismo religioso, políticas de identidad y fundamentalismo; militarismo y paz.

Más de 800 voluntarios de 20 países participaron en el FSM 2004, además de que se contó con el aporte de 180 intérpretes de Argentina, Brasil, India, Estados Unidos, Francia, España, Reino Unido, Bélgica, Suiza, Sri Lanka, Tailandia, Indonesia, Japón, Corea y Palestina.

Las 74.126 personas que representaron a 1.653 organizaciones de 117 naciones se comunicaron en 13 lenguas: hindi, marathi, tamil, telegu, bengali, malayalam, español, inglés, francés, coreano, bahasa indonesia, tailandés y japonés.

Alrededor de 2.723 personas participaron en el campamento intercontinental de la juventud.

La programación del FSM 2004 incluyó, además de las conferencias, paneles, mesas redondas y reuniones públicas, lo cual fue toda una novedad en la metodología del proceso del foro. La acogida por parte del público fue tal que se contabilizaron más de 1.200 eventos.

Al mismo tiempo, se dieron cita en el Foro Social Mundial celebrado en India más de 1.500 artistas, poetas, dramaturgos, escritores y cineastas. Se presentaron 150 piezas de teatro de calle y un festival de películas con más de 85 títulos sobre los principales temas del FSM.

El éxito obtenido en 2004 en cierto modo abonó el terreno para que el año siguiente el FSM congregara a 155 mil personas en Porto Alegre entre el 26 y 31 de enero.

La marcha que dio inicio al evento contó con la participación de más de 200 mil personas.

Cerca de 6.872 organizaciones de 151 países apuntalaron las 2.500 actividades que se programaron. Brasil, Argentina, Estados Unidos, Uruguay y Francia se constituyeron en las delegaciones más numerosas.

Un dato interesante dentro del FSM se produjo entre el 29 y 30 de enero, cuando 500 mil personas transitaron en el territorio social mundial.

Además, 3.100 voluntarios colaboraron en la realización del encuentro en áreas como traducción, cultura, comunicación, logística y servicios, manutención de redes y construcciones.

Se discutieron temas centrados en las artes; la comunicación; la defensa de las diversidades; los derechos humanos; las economías soberanas por y para los pueblos; ética, cosmovisiones y espiritualidades; luchas sociales y alternativas democráticas; paz, desmilitarización y lucha contra la guerra; el libre comercio y la deuda; pensamiento autónomo; emancipación social y lucha contra el capitalismo patriarcal, entre otros.

La mayor edición del Foro Social Mundial realizada hasta el momento dejó un panorama alentador para la ejecución de las venideras actividades, por lo que se estima que la reunión prevista para Caracas entre el 24 y 29 de enero favorezca la reflexión de todos aquellos que se oponen a la globalización y que construyen un conjunto de alternativas para favorecer el desarrollo humano, de acuerdo con la Carta de Principios del FSM.

La capital venezolana está lista para recibir a las delegaciones, aun cuando se hayan presentando algunas dificultades en el aspecto de la movilización a raíz del cierre del viaducto 1 de la autopista Caracas-La Guaira.

Uno de los integrantes del comité organizador, Julio Fermín, aseguró a Prensa Latina que tomaron las medidas necesarias para garantizar el arribo de 80 mil a 100 mil personas de los movimientos populares y sociales de todo el continente.

Está descartado el traslado de las actividades, previstas en diferentes escenarios de Caracas, a otras ciudades cercanas.

En el Foro Social Mundial policéntrico de Caracas 2006 se debatirá acerca del poder, política y luchas por la emancipación social; estrategias imperiales y resistencias de los pueblos; recursos y derechos para la vida: alternativas al modelo civilizatorio depredador; diversidades, identidades y cosmovisiones en movimiento; trabajo, explotación y reproducción de la vida; comunicación, cultura y educación.

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