La carta de Jorge Giordani ha traído un vendaval de opiniones que van desde la descalificación, el señalamiento de traidor, pasan por posiciones “racionales” o reflexivas hasta quienes directamente se solidarizan con “el monje”. Las distintas posiciones indican clara y meridianamente las contradicciones políticas e ideológicas que lógicamente se desarrollan en cualquier proceso político que pretenda o aspire cambiar una sociedad y mucho más si la aspiración es construir el socialismo. Algunos dirigentes de la revolución que se consideran “únicos, absolutos, indiscutibles y predestinados guías” del proceso bolivariano, lejos de convocar a la discusión sincera y fraternal, lo que han es contribuido a atizar la descalificación con el claro objetivo de banalizarla y bajo el manto de la discrecionalidad excluir del partido y hasta de la revolución a quienes se atrevan a disentir o diferir de ellos.
No reconocer algunas fallas de funcionamiento que cotidianamente ocurren a lo interno del psuv y del gobierno que lejos de corregirse se viene acentuando, evidencian una clara conducta en convertir al psuv en un partido/ iglesia que consideran a sus militantes como simples correas de transmisión, como simples “borregos” y por tanto ven al pueblo como un objeto y no como sujeto de su propia liberacion. Esta práctica indudablemente viene debilitando la base social de apoyo a la revolución. A nivel estadal, municipal y parroquial esta conducta perversa es reproducida por “dirigentes” del partido quienes se abrogan el derecho de imponer los candidatos y candidatas a delegados al congreso psuvista, para ello han cerrado la participación en las ubch a aquellos militantes considerados como “problemáticos”, son los mismos “dirigentes” que en el pasado hicieron las llamadas patrullas planas, son los mismos que han y continúan obstaculizando la poca formación política e ideológica que se da o se intenta dar en el psuv en las regiones.
Lo otro que llama la atención en esta batalla de ideas y no de traidores pequeñoburgueses ni de izquierdistas trasnochados o ministros fracasados, es que las autodenominadas corrientes internas del psuv que hacen gala de “su capacidad de movilización y propaganda” han hecho un silencio más que cómplice, oportunista seguramente guiados por el temor de ser excluidos no de la dirección sino de las prebendas que les obsequian algunos “predestinados”.
La discusión la puede cerrar administrativamente la dirección política-militar de la revolución, pero el hervidero seguirá en los distintos sectores que día a día se bate en la calle en la defensa del proceso popular bolivariano y que más temprano que tarde disputaran en la calle y con el pueblo la direccionalidad del proceso revolucionario que hoy con sus caras nuevas y viejas mañas los “casa león” pretenden pactar con los enemigos históricos del pueblo.
Lo que le falta a la autonombrada dirección política-militar es convocar a fusilar a los que a ellos se les antoje tildar de traidores, mientras que vacilan frente a los corruptos, a los que niegan el control obrero, a los que pretenden “devolverle” las tierras a los latifundistas y aquellos que se rascan las vestiduras jurando lealtad absoluta a la revolución y al comandante Chávez, mientras que en el ejercicio de funciones como ministros fueron actores principales del engaño al pueblo venezolano en cosas como por ejemplo: fabrica de helados, producción de arroz en las “unidades de producción socialistas” santa rita y marisela en el estado Apure, permitieron la estafa en el fondo chino, en fondem, en cadivi, entregan créditos a “campesinos sin tierra y sin vocación para el trabajo agrícola y pecuario y de ñapa acusan a los indígenas del zulia y a los compas de Homo et Natura de golpistas.
Quizás haciendo un análisis crítico y autocritico de las posturas de algunos dirigentes nacionales y regionales del psuv, encontraremos realmente donde está el vacilante, el arrogante y engreído con valores propios del capitalismo y así podamos no cometer el error de fusilar al acusado de traidor, tal como le sucedió al poeta salvadoreño Roque Dalton.
Encontremos, identifiquemos sin ambigüedades las características del verdadero traidor para evitar enjuiciar equivocadamente a quienes por una u otra razón tienen críticas de fondo y de forma como se conduce actualmente el proceso bolivariano.
Con Bolívar, Chávez y el Pueblo LUCHAR HASTA VENCER!