Nuestra historia, la historia Patria está signada por cruentas batallas. Venezuela fue atrapada en el 3er viaje de Cristóbal Colón, el 2 de Agosto de 1498, cuando llegó a la desembocadura del río Orinoco, después de haber pasado frente a la isla de Trinidad. ¡Era la primera vez que los españoles tocaban el continente Americano! En efecto, en el primer viaje habían llegado a la isla de Santo Domingo y en el segundo, a la de Puerto Rico; luego con el complemento del develamiento del Nuevo Mundo se da inicio a las guerras intestinales que nos han perseguido a lo largo de la historia de Nuestraamérica. La historia fija que hace más de 12 mil años, antes del exterminio, estaban ya las primeras tribus indígenas en Venezuela viviendo holgadamente con sus usos y costumbres, ceñidos por su autodeterminación como familias.
Pero un día, como de un plumazo todo aquello cambio y ni siquiera para bien, pues nuestros primeros pobladores fueron virtualmente exterminados. América había sido sometida por los depredadores europeos. Las generaciones durante varios años se sucedieron prácticamente mudas. Aquellos pobladores vivían sin memorias, sin otro antecedente que el ultraje hecho a la libertad del Nuevo Mundo, y las huellas de unos conquistadores (que no eran tales) estampadas en la cerviz de un pueblo. Nuestra historia apenas si era un libro blanco. Sin embargo, no muy tarde en esto acontecimientos de dominio y desprecio, surgieron las páginas de la historia de este pueblo en el que se ofrecería el balance y el sacrificio de la epopeya indigenista y la de nuestro próceres (hombres y mujeres) independentistas.
La población de los valerosos caciques comienza a ser diezmada. En el año 1607, la población blanca de Venezuela está por el orden de 740 vecinos y los indígenas encomendados en 16.000.
A la luz de sangrientos y bárbaros acontecimientos cobraron fuerza los naturales y este pueblo, entonces, incipiente, tímido, medroso, nutrido con el funesto pan de la ignominia, sin ideal soñado, sin ejemplos, esclavo de la ignorancia, sometido cual si fuera un rebaño, con cuerpo pero sin alma, víctima de los conquistadores y luego sometido al fuego del despotismo colonial, sucedió que aquel pueblo de arrinconados, transformándose pasó a convertirse en un pueblo de héroes. Una idea lo inflamó para siempre: la emancipación; y así también lo embriago el anhelo de convertirse en gigante por una sola aspiración: la libertad. Sobre 200 mil cadáveres Venezuela levantó su bandera victoriosa y la República esclarecida en el martirio se irguió bautizada con sangre.
En fecha, 19 de abril de 1810, el pueblo venezolano se reveló contra el opresor y asume cuantos derechos se le hubieren negado en el transcurso de tres siglos. Aunque siempre firmes, los patriotas por inexperiencia en los primeros pasos de la revolución, apresuraron su primera caída. Y así entre tumultos y guerras sangrientas, finalmente estamos en el siglo XXI conviviendo en la V República Socialista y Bolivariana.
Lo que se pretende es tener en claro que nuestra Patria o lo que somos hasta ahora, no obedece a momentos de la historia descontextualizados, lo que hoy es el pueblo de Venezuela obedece al sacrificio y muerte de innumerables hombres y mujeres que ofrendaron sus vidas por Nuestraamérica.
Este glorioso pueblo en la lucha por la libertad y sus necesidades, en el desenvolvimiento de sus ideas revolucionarias, en la continua lucha de sus pasiones, ya conculcado privilegios, ya defendiendo derechos, ante la fuerza que reprime y las ideas que liberan, ha sellado con sangre todas y cada una de sus transformaciones.
En suma, nuestra región América Latina de manera cruda han vivido la profunda crisis del mundo capitalista, que ha traído el aumento del empobrecimiento de los pueblos, el creciente avance de la corrupción en las más altas esferas del sistema administrativo burgués, el incremento de la desocupación, la inseguridad y todas las lacras de la descomposición inmoral de un sistema decadente; el creciente endeudamiento externo, las privatizaciones de las empresas públicas y de los sistemas de seguridad social, y ante esta debacle los pueblos no se han cruzado de brazos, han respondido con la acción combativa de las masas que han desarrollado levantamientos populares, huelgas, paros, en algunos se han producido luchas armadas, se han sacado gobiernos; estas expresiones de lucha han convertido a estos países para las oligarquías en ingobernables e inestables, este proceso se ha expresado con mayor nitidez en Ecuador, Bolivia y Venezuela por lo que esta región se ha constituido en uno de los eslabones débiles de la cadena de la dominación del imperialismo norteamericano en esta parte del mundo.
En los pueblos de América Latina hay un creciente desarrollo de la conciencia sobre la necesidad de un cambio, de levantarse contra la opresión nacional del imperialismo norteamericano, de rebelarse contra las políticas económicas del Fondo Monetario Internacional, de defender la soberanía y la autodeterminación de los pueblos. Existe un proceso de desarrollo de la unidad de las organizaciones populares y partidos de izquierda, que van sintiendo como una necesidad urgente desarrollar la más amplia unidad para enfrentar a sus enemigos comunes, importantes sectores de los pueblos ven con simpatía y como una alternativa a las organizaciones de izquierda, para organizarse y lograr los cambios que anhelan.
El pensador alemán Emmanuel Kant acuñó una frase que es válida para el politiquero, es decir, para estos ambiciosos de la política mercantilista, populista y demagógica, que avalan la corrupción, impregnados de un egoísmo, individualistas y acostumbrados al fomento de las intrigas: "Obra de tal manera que la humanidad en ti y en los demás no sea nunca un medio sino siempre el fin más elevado".
Vale decir, la palabra "democracia" que proviene de los vocablos griegos Demos, pueblo, Kratos, autoridad o gobierno, se contrapone al "poder divino" que decían encarnar y ejercer los monarcas de tiempos pasados, o a la "predestinación" que algunos invocaban a favor de las "minorías selectas", pues, ella, la democracia, propugna el concepto de "soberanía popular", esto es, el derecho del pueblo ¡todo! a gobernarse por sí mismo. Bolívar dijo que: "Si un hombre fuera necesario para sostener el Estado, este Estado no debería existir". Asimismo, advirtió que: "Sólo la democracia es susceptible de una absoluta libertad".
Nadie puede arrogarse las titularidades de la luz del día, ni la oscuridad de la noche, ni del aire que respiramos, ni de la fe ni de las esperanzas ni de las ilusiones ni las ideas, ni los sueños, ni mucho menos del amor. Luchamos por las libertades plenas y una Venezuela nueva. Esta hermosa Venezuela es un pueblo que se respeta. ¡¡¡Viviremos y Venceremos!!!
albertovargas30@hotmail.com