El asesinato de importantes cuadros políticos del Psuv enciende las alarmas en el chavismo. Pensar que se trata de hechos sólo vinculados al hampa sería de inocentes o de pendejos; la brutalidad y ensañamiento contra Eliecer Otaiza muy semejantes a las utilizadas por los paramilitares colombianos y el reciente asesinato del Diputado Robert Serra, nos hacen presumir una escalada de violencia política de los sectores de la ultraderecha venezolana vinculados al urivismo colombiano y a los intereses mercenarios de USA en su plan de desestabilizar y derrocar a todos los gobiernos que no sean fieles a sus designios imperiales.
Se trata de la misma derecha rancia que orquestó el golpe de Carmona, la misma que financió las guarimbas, a Lorent González Saleth, aunque como Ledezma ,después de tenerlo en nómina y ser su presentador en muchos actos, ahora diga que no lo conoce, la misma derecha que planteó la salida y ahora recoge firmas para una supuesta constituyente sin decir cuales son los cambios constitucionales que proponen, la misma derecha que se alegra en las redes sociales por estos brutales asesinatos políticos.
La actual coyuntura política es complicada, los errores en las políticas económicas no permiten resolver los problemas de escasez, de acaparamiento y de especulación que se han generalizado en toda las áreas de nuestra economía , desde alimentos, medicinas, electrodomésticos, repuestos y hasta hilo de coser, todo esto genera un malestar creciente en la población que la extrema derecha y la derecha opositora apuestan a capitalizar para provocar una salida de fuerza en su escenario principal y en el secundario una derrota electoral en las elecciones parlamentarias del 2015.
La supuesta división en la Mesa opositora solo se expresa en el método para salir del gobierno, porque al ver como guardaron silencio ante la violencia de las guarimbas y los más de 60 asesinatos ocurridos en ellas y cómo guardan silencio ante los planes paramilitares develados en los videos de Lorent desde Colombia, simplemente se devela su verdadera unidad política y de solapamiento esperando a ver que pas, jugando cuadro cerrado con la estrategia imperial para desestabilizar el gobierno del camarada Nicolás Maduro
Ahora bien, el escenario de la violencia política para generar desconcierto, temor y provocar desmoralización está en marcha y buscarán aumentar la confrontación tal como se intentó con las guarimbas, por eso hago un llamado de alerta ante la colombianización de la política venezolana, a redoblar los esfuerzos por la unidad de los revolucionarios, a desechar las prácticas sectarias y a corregir los errores para mejorar la gestión pública, solucionar los problemas económicos y sociales, derrotar la inflación y la delincuencia para garantizar la hegemonía en el seno del pueblo y preservar la mayoría si queremos avanzar en la construcción de nuestro propio modelo de Socialismo Ético, Productivo, Crítico y Bolivariano.