memorias de un escuálido en decadencia
¡Yo no sé de agujas, solo sé que María cose! Desde que nos enteramos de que el precio del petróleo está bajando, nosotros estamos elevando oraciones a todos los santos para que siga bajando, para ver si al fin, salimos de esta pesadilla. Así somos, nos importa un carajo que el país se venga abajo. Una vaina, les confieso, que uno no termina de entender. Estamos deseando que nos invada el ejército de nuestro aliado de siempre, el gobierno de Estados Unidos, estamos rogando porque todo el país tenga dengue y Chicungunya, y para más remate, rezamos porque de una vez llegue el ébola ese, que por lo visto no ha podido entrar, pero hay que hacer todo lo posible porque se instale aquí en cualquiera de esos pueblos que Embajada Radonski siempre se equivoca cuando los nombra.
Ahora bien, uno se pregunta, si todo eso pasa, ¿cómo carajo vamos a gobernar nosotros un país que está invadido por el ejército de nuestro amigo Obama, que sus habitantes tienen dengue, Chicungunya, y ébola, y para más remate, el precio del petróleo está como el petróleo, es decir, en el subsuelo? A mí que me digan quién es el carajo de nosotros en la oposición que es capaz de sacar un país así adelante. Les confieso que en la oposición no está esa cabeza, antes estaba Fracaso Petkoff, pero ese se enfermó de envidia y ya no da más. Y además, con ese Nube Gris que tenemos como Secretario de la MUD, no llegamos ni siquiera donde dice no pase la raya amarilla.
Ahora la pregunta que se escucha todos los días en la oposición es ¿cómo amaneció el negro hoy?, uno cree que están preguntando por Aristóbulo pero no, están preguntando por el petróleo. Es decir, cuando alguien contesta que ya va por 70, la sonrisa de los compañeros se dispara en un feliz año pa ti, un feliz año pa mí. Y mientras tanto Embajada Radonski brilla por su ausencia en Miranda – es el único momento en que brilla- y Julio –Vendedor de verduras- Borges se va rumbo a New York a hablar de transición democrática en Venezuela. El presidente Maduro se presenta en una reunión de gobernadores y alcaldes y comienza a entregar recursos económicos, y el único que no está allí es precisamente Embajada Radonski, y lo que uno no se explica es cómo todavía queda gente por allí que lo defiende.
Mientras tanto, el papá de Margot, que está disfrutando del score, llamó y contó que el partido Primero Justicia tiene muchos problemas, porque a Juan Carlos –Sobre- Caldera lo llamaron a la fiscalía para que hablara de las contribuciones que recibió, y el hombre está arrecho porque Embajada y Borges están en New York hablando la paja que jode, y él aguantando su vaina solo.
-Apágame la vela, María.- Me canta Margot
