Lo presumo un ser humano muy inteligente y culto, camarada Rodríguez. Llevó con tino y contundencia las riendas del CNE en tiempos turbulentos. Es usted médico siquiatra así que de comportamientos humanos debe saber bastante. La primera pregunta que me genera la roncha del Festival es esta:
¿Quiénes deben ser tolerantes, nosotros los revolucionarios o ellos los guarimberos?
La oposición tiene cotos naturales en los que interactúan libremente sin que nadie los perturbe, pero basta con oler a un chavista o ver un trapo rojo para verlos convertirse de “civilizados” ciudadanos a enardecidos trogloditas dispuestos a colgar en cualquier árbol al osado infeliz. Al contrario, usted nunca ha escuchado que a un opositor hayan intentado lincharlo por andar en “territorio” chavista. Dicen que en la época de la conquista y “pacificación” de estas tierras los españoles asesinaban indios de todas las formas posibles porque según ellos eran menos que animales y no tenían alma. Los comportamientos colectivos heredados se transforman muy lentamente o peor aun, se refinan. No le muestre tolerancia al que genéticamente es intolerante, eso es síntoma de debilidad, es más, no tenemos que mostrarles nada, que cambien ellos, nosotros así como estamos, estamos bien.
Después de tanta tinta en la prensa y tantos megas de bits yendo y viniendo por Internet con Chino y Nacho en la cresta de la ola, uno pudiera pensar que los muchachos se van a poner serios y van a exponer su punto de vista sobre el asunto. Pero no. Es obvio que no lo van a hacer. Ellos van a hacer lo que les mande a decir su patroncito mayamero a través de sus representantes. Y sospecho que el trasfondo de todo este asunto es nada más nada menos que dinero, y en dólares para más dolor. Cualquier funcionario público en su sano juicio desde hace rato hubiese echado para atrás la presentación de los susodichos cantantes. En este caso estamos hablando del alcalde del municipio Libertador y de paso siquiatra. Por eso me surge otra pregunta,
¿Por qué no lo hace?
Elucubremos. Si estos artistas guarimberos fueron contratados a través de sus representantes por el comité organizador del Festival, es muy probable que medie la figura jurídica de un contrato, de ser así, si cantan, cobran sus reales, sino cantan por “causas ajenas a su voluntad” igual van a cobrar sus reales. Rescindir ese contrato debe ser el mayor dolor de cabeza de unos cuantos en este momento. Y todo por tratar de ser dizque tolerante. Camarada Jorge Rodríguez, hágale caso a Nacho, el dice que hay que oír al pueblo, eso no se lo dice a la oposición, se lo dice a los organizadores del evento, ese par está muy claro en cuanto a su parecer político, cantar en el evento es una cuestión de negocios y resulta aberrante que el dinero que se les va a pagar, que es de todos los venezolanos, ni siquiera tengan la intención de invertirlo en este país, porque este régimen dictatorial no da libertades para tanto... según ellos. Si hay que pagarles para que NO CANTEN junto a Daniela Cabello yo soy el primero que doy mi aporte, en bolívares fuertes por supuesto.
Para concluir, no está demás aclararle camarada Rodríguez, que el pueblo ya no se chupa el dedo ni se deja meter gato por liebre, si quiere que el evento concluya en felices términos, haga lo que tenga que hacer para que NO CANTEN en el Festival este par de joyitas guarimberas. Que vayan a cantar en la Plaza Altamira, allá hasta gratis lo pueden hacer. Cámbielos por Maluma, para que nos venga a pedir disculpas personalmente y en vivo. Saludos.
La cultura popular tiene amigos a montón
pero en ella se colean
los zorros y camaleones...
Así dice la canción...
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