Después de la detención de Antonio Ledezma, el país inicia un delicado camino en un momento complicado, de mucha tensión interna y de mucha campaña internacional de descredito y de descalificaciones en ese entramado imperial de construir un escenario que nos haga aparecer como un país sin libertades democráticas, destruido económicamente y al borde de una guerra civil, para justificar su libreto de intervenciones, y golpes de estado.
El remitido titulado: Acuerdo nacional para la Transición, constituye una nueva pieza del libreto de golpe suave desarrollado en otros países, es sin duda un programa de gobierno de facto, que expone claramente la intencionalidad golpista de sus firmantes, que además son los mismos firmantes del decreto del fugas Carmona Estanga cuando disolvió los poderes y se auto proclamo Presidentes después del golpe de estado contra Hugo Chávez en el 2002.
La transición es la continuación del mismo plan de la "salida", ambas conllevan a una realidad que esta fuera del marco de nuestra Constitución, la salida devenida ahora en transición necesariamente imponen una culminación del gobierno del camarada Presidente Nicolás Maduro por la vía de la fuerza, ya que nuestra carta magna solo contempla el mecanismo del referéndum revocatorio para suspender mediante elecciones libres y democráticas el mandato presidencial, en otras palabras un nuevo carmonaso para un gobierno de facto.
La Fiscalía General de la Republica deberá investigar profunda y exhaustivamente las reales implicaciones de Ledezma, María Machado y Julio Borges en esta nueva escalada golpista de quienes ayer aplaudieron y firmaron con Carmona, apoyaron y financiaron el golpe petrolero y mas recientemente las guarimbas, la salida y ahora la transición, porque de comprobarse su coautoría y complicidad en una nueva intentona golpista, sin importar lo que diga el imperio, la justicia impondrá la pena.
Las implicaciones son muchas, los militares de la aviación implicados en el abortado golpe de estado han denunciado a Borges, Machado y a Ledezma como parte de esa intentona que esta claramente tipificada en nuestro ordenamiento jurídico como actos de rebelión, por cierto nuestra jurisprudencia sobre estos casos, respaldada por Ledezma durante los gobiernos adecos, indica que dicho delito es competencia de los Tribunales Militares, para los nuevos demócratas sin memoria, los 13 estudiantes liberados durante la huelga de hambre nacional que lideramos contra el gobierno de Jaime Lusinchi estaban siendo juzgados en tribunales militares por ese mismo delito.