Los partidos ultraderechistas COPEI, PJ, Voluntad Popular (cuya cantidad de miembros contando la base que los apoya caben en un wolsvagen y sobran puestos) junta a sus desgastados dinosaurios, con otros esperpentos iguales devenidos o derivados de AD, Alianza Bravo Pueblo, Causa R, en un último esfuerzo para invocar odios, consagrar las amarguras, asesinar las esperanzas, y enterrar la aspiraciones de los millones de hombres y mujeres dignas y dignos que hoy somos libre y con fuerza les enfrentamos.
Afortunadamente maldiciones de burros viejos no llega al cielo, y la conjura del aquelarre vario pinto que se agrupa en la MUD, trasnochada y dislocada, sin alma ni corazón, a cada paso da un traspaso y cuando cree avanzar hacia la reconquistas del poder, no falta quien se vire ante las malévolas tramas que derivan de sus acciones.
Reconozco, que hay venezolanos que tienen todo el derecho a ser oposición, y a ellos les respetamos y aunque no estemos de acuerdo con sus argumentos, damos la vida por su libertad plena, damos nuestro mejores esfuerzos porque sigan siendo opositores y no apátridas, adversarios y no enemigos;esperamos que sigan siendo amantes del imperio, de la egolatría y el esnobismo, pero no asesino, xenófobo ni racista.
Pobres dirigencia oposicionista, desde 1999 en lo único que han sido triunfadores es en la acumulación de odio, rencor por sus errores, frustración por sus ambiciones, su desasosiego, desesperanzas por sus macabras elucubraciones.Y no escarmientan, y siguen masticando el chicle de la derrota continuada. Son un caso patético que exhibe una condición psicótica, maniaco depresiva que le hace creerse superiores a todos los mortales, situación queles lleva por un camino tortuoso y sin norte, donde los ojos del candidato perdedor eterno (Capriles) compite con la soberbia de la señora María y se debate con los epilépticos ataques de malcriado de Ramo Verde. Pobre oposición, lo sentimos por ello.
En consecuencia, los revolucionario, conscientes del abismo que nos separa del proyecto neo liberal y fascista que en el seno de los citados opositores anida, hemos de seguir alerta y dando la lucha. En ese sentido propongo 10 tareas a ejecutar urgentemente:
- Reconocernos como hijos e hijas del debate y no quedarnos cayado ante el insulto y la provocación.
- Demostrar con nuestra actuación el compromiso con la patria que nos legó el comandante eterno explicando en cada cola, quien es el verdadero enemigo del pueblo.
- Combatir el bachaquerismo y en lo posible explicarle a nuestra gente,que el que compra por demás y vende es tan sucio como el que nos desprecia, acapara y especula.
- Demostrar que si bien estamos haciendo largas colas, las hacemos porque tenemos dinero para comprar. Y podemos comprar porque a pesar de la guerra económica, el gobierno garantiza el precio justo de cada producto. Así que cuando un compatriota acapara y vende, te está robando a ti la posibilidad adquirir las mercancías reguladas.
- Activar el partido en todos los lugares donde se aglomeren las personas a comprar, que se sienta la presencia de la marea roja, rojita del PSUV y sus aliados.
- Seguir organizando al pueblo para el justo abastecimiento a través del poder popular
- Ayudar a los órganos del poder público en el control y seguimiento de los bienes de primera necesidad sin más pretensión que garantizar que a cada quien le llegue la mano protectora de la revolución.
- Explicarle a nuestros vecinos y amigos, queel desastre de los gobiernos adecos y copeyanos fue responsabilidad de los mismos que hoy dicen representar al pueblo opositor.
- Proponer, más que criticar.
- No olvidar que estamos en una revolución y si bien tuvimos épocas de bonanza por la sabia distribución de la renta que nos heredó el comandante, hoy a pesar de los ataques del imperio y sus secuaces, seguimos construyendo viviendas, haciendo carreteras, construyendo el tren y pare usted de contar.
Como decía el comandante eterno, no es poca cosa lo que se ha logrado. Viva Nicolás Maduro, vamos a la calle a seguir conquistando hombres y mujeres justa que en su alma aniden la solidaridad, la hermandad y la paz. Sigamos juntos que en la calle codo a codo somos mucho más que dos.