La oposición venezolana tiene características muy particulares que la convierten en enemiga no sólo del gobierno, sino del país en general, incluyendo a sus seguidores. Ellos no hacen oposición al chavismo… hacen oposición a Venezuela.

Durante los últimos 15 años no han encontrado un solo plan o acción del gobierno al que darle respaldo porque sea útil para los venezolanos. A todos, absolutamente a todos, se han opuesto y a todos han intentado sabotearlos.

La misión de alfabetizar a más de un millón de venezolanos les pareció inútil, un gasto innecesario y una forma del gobierno de hacerse propaganda; la misión de llevar médicos y medicinas a los barrios más pobres del país, les pareció una forma de despreciar a los médicos venezolanos, una vía para espiar a los ciudadanos y una entrega del país a los cubanos. La misión vivienda han tratado por todos los medios de minimizarla, al mismo tiempo que la definen como populismo.

Podríamos citar mil ejemplos más, pero creemos que cualquier latinoamericano que tenga dos dedos de frente y una pizca de consciencia patria sabe ya, lo poco que le importa a esa oposición enferma el país, los venezolanos y los humildes.

Ahora, si se quedaran en el desprecio, en la mentira y en el sabotaje permanente, el país tendría dificultades pero avanzaría. El problema es que el fascismo que los desborda y la cobardía que les pareciera congénita hacen cada día más difícil la tarea de avanzar en la solución de los grandes problemas del país. Siempre reman en la dirección contraria.

No afirmamos que son cobardes y fascistas simplemente por el afán de insultar. Allí está la historia reciente para corroborar nuestras palabras. La mayor demostración de fascismo que este escribidor haya visto en Venezuela, fue protagonizada por esa gentuza en aquellos tristes días de abril de 2002, cuando montaron un plan para desviar una marcha, asesinar a inocentes venezolanos, incluyendo a su propia militancia, y dar un golpe de Estado justificado con las muertos que ellos mismos habían causado.

Su cobardía quedó evidenciada cuando, una vez fracasado el golpe, dejaron solo al dictadorzuelo que hasta ese momento era su ídolo y jefe. Yo no fui, yo pasaba por casualidad y firmé el acta, yo fui a palacio a reclamarle, fueron algunas de los argumentos conque cobardemente cada uno intentó evadir su responsabilidad.

Todos firmaron una ¨lista de asistencia¨, nadie era parte de aquel esperpento de decreto que de un sólo tajo eliminaba la democracia venezolana, violaba descaradamente la constitución e instauraba una dictadura que de inmediato inició una persecución de sus adversarios.

Nada ha cambiado en ellos, se distanciaron en aquella oportunidad de Carmona porque su cobardía no les dejará nunca asumir la responsabilidad de sus actos, pero siguen en lo mismo: tratando de imponer una dictadura para masacrar a quienes osaron desplazarlos democráticamente y volver a convertir el país en parte del patio trasero de los gringos.

La mejor demostración de lo que afirmamos la dieron, recientemente, esos líderes de pacotilla con la publicación de un remitido (que era la señal para activar un golpe de Estado) en el cual dejaron muy en claro que cada uno de ellos lleva por dentro un Carmona Estanga.

Veamos, con citas textuales, tanto de ese remitido como del funesto decreto aquel de Carmona, que tanto hay de cierto en lo que decimos.

· Comencemos por la definición del gobierno que, aquel dictadorzuelo de 2002 y sus pichones de hoy, hicieron en sus

respectivos anuncios públicos. Carmona decretó la constitución de ¨un Gobierno de transición democrática y unidad nacional¨. Los fascistas que ahora están dirigiendo a lo que queda de oposición llamaron a ¨un acuerdo nacional para la transición¨.

¡Cuánto parecido!

Carmona dejó muy en claro lo que significaba para ellos la transición; éstos no tuvieron tiempo, pero en todo caso, si el Presidente no ha renunciado ni piensa renunciar, la única forma de que haya eso que ellos llaman transición es que repitieran lo que hicieron en 2002. ¿O alguien sabe de otra forma para que se genere la fulana transición?

· En el golpe del 2002 Carmona decretó: ¨Se reestablece el nombre de República de Venezuela, con el cual continuará identificándose nuestra patria desde este mismo instante¨. Ledezma, María Corina, Leopolvo y los que después suscribieron el documento antes mencionado dijeron: ¨Asegurar la lealtad y el apego de la Fuerza Armada Nacional a la constitución…¨¨.

¿No es el mismo espíritu? Así como ayer cambiaron el nombre de la patria, eliminando el nombre de Bolívar y por supuesto cualquier alusión a Libertador, hoy dan las mismas demostraciones de desprecio a nuestro máximo héroe, eliminando su nombre de lo que es y seguirá siendo la Fuerza Armada Bolivariana de Venezuela.

· ¿Recuerdan aquel pendejo que con emoción leía el 12 de abril el decreto que establecía la dictadura? ¨Se suspende de sus cargos a los diputados principales y suplentes a la Asamblea Nacional… ¨Se decreta la reorganización de los poderes públicos a los efectos de recuperar su autonomía e independencia y asegurar una transición pacífica y democrática, a cuyo efecto se destituyen de sus cargos ilegítimamente ocupados al presidente y demás magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, así como al Fiscal General de la República, al Contralor General de la República, al Defensor del Pueblo y a los miembros del Consejo Nacional Electoral.¨ ¿Qué dijeron los carmonistas ahora? ¨Preparar y realizar elecciones presidenciales libres y absolutamente transparentes¨… ¨Rescatar la autonomía de los órganos del poder público, designar a sus directivos por las vías constitucionales…¨

¡Bingo! Ahora no dijeron: Se destituyen de sus cargos… Dijeron que designarán nuevas autoridades. ¿Cuál es la diferencia? Para hacer elecciones presidenciales tienen que darle un golpe al actual presidente y para nombrar nuevas autoridades de los poderes públicos tienen que destituir a las ahora electas. ¿No es exactamente lo mismo?

· El mamotreto que refleja las intenciones actuales de la oposición dice: …¨Elevar significativamente la producción de la industria petrolera, revisar los marcos legales y los acuerdos lesivos a la misma y designar una nueva directiva de PDVSA¨

¿No hizo Chávez exactamente lo contrario y no fue eso lo que originó el golpe de Carmona?

El obligar a PDVSA a respetar las cuotas de producción acordadas en la OPEP, lo cual influyó en la recuperación de unos precios que habían llegado a la ridícula suma de 7 dólares por barril, desató la furia de los gringos y el inicio de una guerra contra el país que aún no cesa.

El nombramiento, por parte del Comandante, de una nueva junta directiva de PDVSA fue la excusa para iniciar un carmonazo cuya primera decisión fue eliminar la constitución que impedía la privatización de PDVSA y la ley de hidrocarburos que obligaba a pagar 33% de regalía en lugar de 1%.

Los de ahora intentan ser más sutiles pero queda claro que elevar significativamente la producción significa romper con la OPEP en beneficio de los grandes consumidores (léase Gringolandia). Revisar los acuerdos es otra forma de decir ¨Ni un barril más para Cuba¨ y por supuesto para el Caribe y Suramérica (todo para sus amos). Nombrar una nueva Junta Directiva de PDVSA es traer de regreso a los que sabotearon la industria petrolera y generaron pérdidas por más de 20 mil millones de dólares… Más claro no canta un gallo.

· Estos fascistas que llevan su Carmona por dentro, expusieron en su mamotreto: ¨Solicitar al sistema judicial la apertura de los procesos a que haya lugar para el castigo de delitos graves cometidos al amparo del poder gubernamental¨.

¡Claro! primero cambian las autoridades del poder judicial (como ya vimos) para luego iniciar la persecución.

¿Qué diferencia hay con la represión emprendida en el breve régimen de Carmona y que dejó más de 20 muertos? ¿Recuerdan cómo reprimieron y detuvieron a Tarek William, a Rodríguez Chacín y a tantos otros?

Díganos usted, amigo lector, si tenemos razón o no cuando afirmamos que además de cobardes y fascistas cada uno lleva su Carmona por dentro.