Venezuela tiene la particularidad de ser de los pocos países del mundo que tiene conflictos limítrofes y políticos con sus vecinos y los celebra con tratados comerciales y negociaciones económicas ventajosas para ellos básicamente. Y es que no se termina de cerrar un capítulo de confrontación con uno cuando ya le están abriendo otro sin tregua y sin descanso. Cuando no es EEUU es Colombia, cuando no es Colombia es España, cuando no es España es Guyana y así sucesivamente en un círculo vicioso de desgaste permanente. Obviamente esto mantiene en estado de alerta y a la defensiva a un gobierno que debería enfocarse en gobernar para más de 30 millones de venezolanos. Pero en eso tenemos 16 años minuto a minuto.
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Tenemos un gravísimo problema con nuestro vecino del cercano oeste, porque es público y notorio que es desde su territorio que se dirige la parte medular de la guerra económica contra nuestro país y no en balde le llaman "dólar Cúcuta" al dólar paralelo. Hasta ahora no hemos visto que nuestro gobierno haya planteado crear una comisión bilateral que se avoque a generar soluciones estructurales para resolver el contrabando de combustible, alimentos, medicinas, e incluso papel moneda venezolano porque llamarlo dinero es como mucho decir. Si a esto le sumamos la penetración del paramilitarismo y el sicariato propio de aquellas tierras y que ha comenzado a operar de forma sistémica en nuestro territorio, no es para sentarse a llorar frente a un micrófono sino para actuar con contundencia dentro del marco de las leyes y la Constitución.
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Hace pocas semanas atrás nuestra retrograda oposición intentó montar una olla con la "visita" de unos senadores brasileros que a la vista de todos y violentando todos los protocolos de la política internacional pretendió burlarse de las autoridades venezolanas y generar un "conflicto internacional" con nuestro vecino del sur, Brasil. Que sepamos NADIE a sido siquiera sancionado por tal bellaquería; seguro estamos que esos senadores no vinieron por cuenta propia, tuvieron sus "patrocinantes" vernáculos los cuales son bien conocidos y a mandíbula partida se deben estar desternillando de la risa porque NINGÚN organismo del Estado los ha llamado para decirles "niños malos no hagan eso".
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El Esequibo. Cito lo que dice wikipedia de este territorio:
"La Guayana Esequiba, también conocida como Territorio del Esequibo, es el nombre de una parte del llamado escudo guayanés comprendida entre el oeste del río Esequibo hasta el hito en la cima del monte Roraima. Tiene una extensión de 159 542 km² que la República Cooperativa de Guyana administra como propio pero cuya soberanía es reclamada por Venezuela basándose en el Acuerdo de Ginebra del 17 de febrero de 1966."
A pocas palabras buen entendedor. SON 159.542 Km2 QUE HISTÓRICAMENTE ES TERRITORIO VENEZOLANO Y QUE GUYANA ADMINISTRA COMO PROPIO. Guyana se pasa por el forro leyes, tratados y acuerdos de forma soberana y soberbia. Si usted le pregunta a un reservista venezolano que haya prestado Servicio Militar Obligatorio en la Isla fluvial Anacoco del río Cuyuní, ¿dónde queda Guyana?, le dirá: al otro lado del río... La inmensa mayoría de los venezolanos y todos los gobiernos que ha tenido Venezuela sólo le prestan atención a este problema cada vez que aparecen en la palestra sujetos como el actual presidente de Guyana. David Exxon Dranger Mobil ha resultado respondón aparte de creerse guapo y apoyao. La razón de su alzadera es evidente, los venezolanos NUNCA hemos ejercido soberanía sobre ese territorio, ellos sí. En aras de la Paz y la Armonía (que obviamente también se pasa por el forro Mr. Dranger) Guyana nos ha aplicado la misma filosofía que los sionistas israelíes le aplican a los palestinos pero sin balas. Claro, mientras nos mantengamos en la Isla de Anacoco y no incursionemos en la rivera oriental del Cuyuní. El gobierno venezolano no debió suspender el intercambio de petróleo por arroz, ¿ahora que vamos a comer? ¿Será que si sembramos ese poquito de petróleo en nuestro suelo podremos obtener un poco de arroz made in Venezuela? A David Exxon Dranger Mobil no hay que responderle en su tono y estilo, que patalee y vaya a lloriquear a los pies de su ex reina de Inglaterra (por eso su guapeza) o que le rinda cuentas chimbas a su patrón transnacional Exxon Mobil (por eso se cree apoyao) al míster hay que responderle llevando la Gran Misión Vivienda Venezuela entre el río Cuyuní y el río Esequibo, bastante mano de obra hay tras los barrotes de las cárceles venezolanas, gente dispuesta a regenerarse y resarcir el daño que le han causado a la sociedad, gente dispuesta a hacer patria y ser reconocidos como ciudadanos ejemplares, denles la oportunidad carajo! que siembren bastante arroz y maíz en suelo esequibo para no tener que hacer negocios con nuestros enemigos, Mr. Dranger o Lorenzo Mendoza.
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Dejemos que los perros sigan ladrando, así sabremos que vamos por buen camino. Resolvamos de una buena vez nuestro principal problema: DÓLAR TODAY. Tres lacras sociales no pueden determinar el destino de 30 millones de venezolanos, vamos a matar la culebra por la cabeza, a Federico Ravell, Orlando Urdaneta y Eligio Cedeño se les debe poner ante la justicia, se le debe exigir al gobierno norteamericano, tan amante del estado de derecho, que nos permita ver tras las rejas a este trío de infames, si en verdad quiere restablecer relaciones diplomáticas con nuestro país con buenas intenciones, seguro estamos que cuando estos tres degenerados sean neutralizados en su perverso y criminal accionar, nuestra economía volverá a la normalidad, la guerra económica cesará y el bachaqueo quedará como un mal recuerdo que todos querrán olvidar.
@macfidelio2010
