Qué difícil es escribir en un día como hoy, y cuán rápido pasa el tiempo. Aunque algunos nos digan que no moriste, y ciertamente es así, físicamente nos hace falta tu guía, tu acompañamiento, tu voz de trueno que retumbo en este continente, tus regaños, tu empuje, tu abrazo solidario, tu alegría, tus ocurrencias, tu temple de acero.
Cada vez nos convencemos más de tu grandeza, nos iremos dando cuenta cada vez más como crecen las sombras cuando el sol declina. Y por honor a tu legado y a tus sabias enseñanzas, no dejaremos que tu legado y la Patria que nos dejaste se pierdan. Primero muertos antes que traicionarte.
Como lo señale en mi artículo anterior, iba a escribir sobre algunas denuncias y los "mata votos" que hay de a pillote en el Banco de Venezuela, pero como hoy es 5 de octubre, conmemorativo de los 31 meses de tu partida física a la eternidad, y como hace una semana ocurrió el fallecimiento del doctor José Rafael Marquina, desde hace días tenía algunas consideraciones sobre esa muerte ocurrida para mí, en muy extrañas circunstancias, y que creo ameritan algunas líneas al respecto. Por eso, el artículo del Banco de Venezuela lo dejamos para una próxima entrega.
En primer lugar, para aquellos que creen en supersticiones, se confirma una vez más que quien se mete de manera ruin y despiadada con la Revolución Bolivariana, se seca. Este doctor necrófilo, que con poca ética profesional, casi que daba el diagnóstico de la evolución de la enfermedad y padecimientos del Comandante Eterno, violando los más elementales Códigos de Deontología Médica, y casi salivaba cuando daba estos partes. Se comportó de una forma verdaderamente despreciable y condenable.
Sin embargo, como los revolucionarios y las revolucionarias nos mueven verdaderos sentimientos de amor, no nos complace su muerte. Respetamos el dolor de su esposa, Candice de Marquina, de sus hijos. Pero como con la verdad ni ofendo ni temo, este señor no respeto el dolor de la familia Chávez, y antes bien, siguió inventándose fábulas sobre algunos dirigentes de nuestra Revolución Bolivariana.
Esto lo señalo porque este galeno poco ético, no poco conforme en su placer necrófilo que sintió revelando informaciones sobre los padecimientos del cáncer del Comandante Chávez, en tuits del 5 de septiembre de este año 2015, empezó a comentar respecto del cáncer que padeció nuestro actual Ministro del Poder Popular para la Defensa, General en Jefe, Vladimir Padrino López. A menos que su esposa Candice borre los tuits, allí están los mensajes y comentarios sobre lo que escribió este señor sobre la enfermedad de Padrino López, irrespetando totalmente la privacidad que tiene todo enfermo que es tratado de algún padecimiento. Pensé por un instante en escribir
¿Y cuál es el problema que Chávez o Padrino López como pacientes oncológicos hayan decidido tratarse en Cuba? ¿No es acaso la medicina cubana una de las mejores del planeta? ¿Con mayores avances en investigación y en descubrimientos sobre el cáncer? Una cosa es ser oposición, y otra ser miserable y regodearse con los padecimientos físicos y morales de los adversarios políticos.
Pero volviendo al tema que nos ocupa, me parece muy "casual" la muerte por "infarto" de José Rafael Marquina. Al igual que con el tema de Leamsy Salazar, uno de los integrantes del primer anillo de seguridad del Comandante Eterno, quien me parece una de las fichas fundamentales para esclarecer elementos sobre la muerte del Comandante Chávez; José Rafael Marquina también era una ficha clave de aportar luces sobre elementos poco claros de la ocurrencia de la muerte del Gigante. Al igual que con el caso de Bolívar, el cual fue asesinado, asesinaron también a Perú De la Croix, cuñado de Francisco de Paula Santander y participe de esta conspiración contra nuestro Padre de la Patria, que hicieron pasar por un "suicidio".
Particularmente, y con hechos como éste, me convenzo cada vez más que Hugo Chávez fue asesinado. Que su muerte es parte de una gran conspiración de los poderes mundiales para "extirpar el mal ejemplo de la Revolución Bolivariana". No tengo los elementos de prueba suficientes para señalarlo categóricamente, pero si los indicios, las pistas que pudieran hacer suponer que pese al papel preponderante que tuvo José Rafael Marquina en la conspiración y para asesinar moralmente no sólo a Hugo Chávez sino al chavismo como comunidad político- espiritual, para evitar que se le "fuera la lengua", decidieron matarlo. De eso hemos escrito de las formas como los gringos te pueden inocular enfermedades, o como a través de venenos muy especiales, te pueden ocasionar un infarto.
Jorge Mier Hoffman, historiador y amigo de quien tuve el honor de leer sus dos libros de "La Carta" muy esclarecedoras de la verdadera forma de cómo murió nuestro Libertador Simón Bolívar, y asesinado por tocar intereses, me dio claves y pistas sobre la muerte del Comandante Eterno. De hecho, en su tercera parte de "La Carta" que esperamos más temprano que tarde salga publicada para honrar su memoria y hacer justicia a su asesinato, no sólo dará más claves sobre el magnicidio de Simón Bolívar, sino también sobre el magnicidio de Hugo Chávez, elementos clave y muy importantes, casi que destacando que los mismos actores históricos que asesinaron a Simón Bolívar, mataron a Hugo Chávez, pero eso será confirmado con el tiempo.
Yo pudiera señalar en estas líneas, al igual que Antonio Aponte y Toby Valderrama ¿Qué pasó con la Comisión que crearía el Presidente Nicolás Maduro para investigar la muerte y la posible inoculación de la enfermedad del Comandante? ¿Qué pasó con la recolección de firmas que impulsaba la diputada por el estado Aragua, María León, para solicitar al Ministerio Público la investigación de la muerte de Hugo Chávez? Pero, luego del fallecimiento de Hugo Chávez, se han iniciado algunas investigaciones no muy públicas, algunas informaciones manejo, pero que todavía por lo incipiente de sus resultados no es prudente ni conveniente revelar. Esto tomará su tiempo y hay que ser un poco pacientes.
Pero lo que sí no podemos obviar es que el acto de asesinato de Hugo Chávez constituye un acto de guerra y es producto de una conspiración contra la Revolución Bolivariana cuyas consecuencias aún estamos pagando. Y ojalá los autores de este horrendo crimen, no sean todos eliminados por la mano imperial, para tratar de ocultar una verdad inobjetable.
Pero como está escrito en el libro del Eclesiastés: "Todo lo que va a ocurrir debajo del sol, tiene su hora". Y escrito en el Evangelio de Juan, capítulo 8, versículo 48 si la memoria no me falla: "Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres".
¡Que lo sepa la burguesía, son los asesinos de Hugo Chávez Frías!
¡Justicia por el asesinato de nuestro Comandante!
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!