En la lógica del capitalismo es una mercancia de las más preciadas y por ello es muy mercada la voracidad por sus cultores en acumular tantas como sea posible...
El gobierno Bolivariano encontró la solución a uno de los mayores problemas que ha venido confrontado el país desde tiempos remotos, como es el abismal déficit habitacional, con la construcción masiva de viviendas para reducirlo a su mínima expresión, sobre la estrategia obvia de que ese bien tiene que dejar de ser considerado como una mercancía más, porque en tanto se le admita como tal y se lo dejamos al libre mercado, lejos de resolver el problema, por el contrario, estamos agravándolo y convirtiéndolo así, en un mal sin cura posible.
La experiencia que hoy viven los pueblos de USA y de España en el tema de la vivienda, para referir sólo esos dos ejemplos, es la mayor demostración de que bajo el capitalismo la falta aguda y grave de habitación como problema macro, que lo es, jamás podría ser resuelto.
Recordemos que en esos países la voracidad especulativa comercial y financiera en el 2008, llevó a la quiebra a miles de empresas inmobiliarias, bancos, financieras y dejado sin casa a millones de sus conciudadanos y a la fecha dicha tragedia, siete años después, lejos de ser superada, cada día se hace más aguda…
En ambos latitudes el acceso a la vivienda sigue siendo un sueño. En USA 4,5 millones de hogares son tugurios y 19 millones de familias hacen de tripas corazón para poder pagar las hipotecas; en España, el asunto no es distinto. Entre el 2008/14, se ejecutaron 600 mil desahucios, lo cual llevó a que 3 millones de españoles hoy duerman en la calle o en viviendas improvisadas con materiales de desecho…
Las causas de todo ello ha sido la especulación desmedida y los "bondadosos" créditos hipotecarios engañosos, pues sus altos intereses muy bien disfrazados y las modalidades de pago prefijadas en la letra pequeña de los respectivos contratos, no sólo hacen y convierten en impagables y eternas las deudas, las que, finalmente, terminan por explotarles en la cara, tanto a los prestamistas como a los compradores que pierden la casa y aún siguen debiéndole a sus usureros los créditos, con la gran diferencia de que a estos últimos, el modelo neoliberal corre presuroso a protegerlos a través del FMI, quienes una vez "rescatados", vuelven de regreso para seguir estafando a nuevos incautos, en un ciclo perverso que jamás termina. Pero mientras tanto, a los otros, a los débiles del cuento, nadie los protege…!
En nuestro país esa política insaciable del gran capital está siendo enterrada para siempre. La GMVV tiene en proyecto construir de aquí al 2018, 3 millones de viviendas, de las cuales ha entregado ya las suyas a más de 800 mil familias a precios justos y en condiciones totalmente ajenas a las leoninas que impone el libre mercado y al concluir este año se habrán entregado un millón.
Todo ello es posible porque estamos en una Revolución Socialista y Chavista. Dentro del modelo neoliberal al que apuestan la MUD y los Mendoza y los Hausmann, ese proyecto sería impensable…
