Me he estado planteando escribir del Parlamento Comunal, ante toda la alharaca que se está armando por parte de la derecha ante la instalación del Parlamento Comunal. No se preocupen señores y señoras, la Asamblea Nacional seguirá existiendo y sus curules están garantizadas. Sólo que no olviden que por encima de ustedes está la Constitución, y por encima de la Constitución está el Poder Constituyente originario, el Poder Popular.

Pero, ante el escenario de peligros, acechanzas, amenazas a nuestro proceso revolucionario. Ante la difícil coyuntura por la que comenzaremos atravesar dentro de dieciocho (18) días, desde el 5 de enero de 2016, cuando se instale la Asamblea Nacional de mayoría calificada de derecha, y ante los dos últimos anuncios formulados por el Presidente Maduro en el marco de los 185 años de la partida a la inmortalidad del Padre de la Patria Grande, Simón Bolívar, o por lo menos así lo recoge la historiografía oficial, necesariamente debo hacer algunas consideraciones.

En lo personal, y aún cuando he decidido tomar unas vacaciones en la institución del Estado donde laboro, para el necesario compartir con amigos que tengo tiempo que no veo, de familiares, de comerme algunas hallaquitas, pernil, ensalada de gallina, pan de jamón; sin embargo, desde las trincheras del aporte y del debate de las ideas, no me voy a desactivar. Vienen tiempos de ofensiva política y de defensa de logros y conquistas revolucionarias, así que por ese lado, no me voy de vacaciones, sino que seguiré desplegado y en batalla.

Pero, volviendo al contexto de la opinión y reflexiones que quiero hacer a través de las siguientes líneas, mencionemos las denuncias formuladas por el Primer Mandatario Nacional en el día de ayer, y que desde mi modesto punto de vista, me parecen muy graves.

En primer lugar, el Presidente Maduro dio a conocer la información muy poco conocida en nuestro país de la decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos (para los que no lo saben, esta institución financiera hace las veces de Banco Central de EEUU), mejor conocida como FED, de modificar, específicamente aumentar, en un 0,25% su tasa de interés, enmarcada en su estrategia de destruir a la Revolución Bolivariana.

Así lo manifestó el Mandatario: "Ayer la reserva Federal de los Estados Unidos tomó una decisión que tenemos que explicarle al pueblo". Nosotros fuimos el único país que alertó que esto iba a suceder. (EEUU lo hizo) Con un objetivo: ir por Rusia y con otro objetivo: destruir la Revolución Bolivariana y destruir a la Opep".

Y continuó explicando que "ayer la Reserva Federal modificó en 0,25% la tasa de interés que cobra (...) Esta decisión implicó el inicio de otro proceso grave de afectación de los precios petroleros".

El ejecutivo explicó que, debido a esta situación, en un día bajó 1,40 centavos el barril petrolero, "golpeando ahí un elemento vital de nuestro país y de países que forman parte de motores importante de nuestras regiones, países Opep y no Opep".

Sin duda, un duro golpe en lo económico, y que si a esto lo enmarcamos como lo expresé en mi último artículo, y en las informaciones que hice públicas de un trabajo confidencial que conocía a once (11) días de la celebración de los comicios parlamentarios, el muy complejo escenario económico que se nos avecina.

Esto agregado a la "mega escasez de los tres primeros meses del año" ya pronosticada por la Presidenta de Consecomercio, Cipriana Ramos, la misma que en el programa "Enfoques" del diputado reelecto a la Asamblea Nacional por el estado Lara, Germán Ferrer, expresó que "la Ley Orgánica del Trabajo no es para defender al trabajador".

El segundo anuncio dado por el Presidente Maduro tiene que ver con su más contundente y enérgico rechazo por lo manifestado por el Primer Ministro de Francia, Manuel Valls, tras felicitar a la oposición venezolana por los comicios parlamentarios y solicitar la liberación del dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López.

"Repudio las declaraciones injerencistas del primer ministro de Francia contra nuestro país", dijo el mandatario.

Asimismo, indicó que la canciller Delcy Rodríguez tiene la orden de enviar una "contundente nota de propuesta" y convocar al embajador de Francia en Venezuela, Pierre Mazzoni, a una reunión.

"Que nadie pretenda meterse en Venezuela o pretendan gobernarnos desde otras capitales. Queremos paz interna y la solución a nuestros problemas con la constitución", sentenció.

Aunque esto no tiene que ver directamente con nuestro país, debemos tomar nota de la alerta formulada por varios movimientos políticos y sociales que se han movilizado en Brasil, a raíz de los intentos de "Golpe Parlamentario" en contra de la Presidenta Dilma Rouseff. Uno de esos voceros, fue Joao Pedro Stedile, del Movimiento de los "Sin Tierra". Pudiéramos decir, sin temor a equivocarnos, que el imperio contraataca y con mucha fuerza.

Ya hemos podido observar como en menos de dos semanas, hemos recibido ya dos ataques de importantes voceros de gobiernos extranjeros en contra de nuestro país: La primera, de la canciller Malcorra de Argentina, y ahora ésta del Primer Ministro francés. Ambas declaraciones son del mismo tenor, por lo que se nos avecina un escenario complejo, no sólo con los ataques de la derecha y oposición venezolana, sino de la derecha internacional y transnacional. Así que debemos estar muy atentos.

Volviendo al tema de la primera denuncia. Luego de la revolcada que nos dieron el pasado 6 de diciembre, noto que nuestro Gobierno Bolivariano está muy lento y continúa en el error de no tener el sentido de la oportunidad en la toma de decisiones. Pareciera que "corre la arruga" lo que sin duda agravará el cuadro para el año 2016.

Creo que ya es tiempo de anunciar al país las primeras medidas económicas que debemos afrontar para sortear esta coyuntura. Sin duda la consulta, el debate, las discusiones son buenas y necesarias (aunque tenían que haberse hecho hace mucho tiempo y no esperar a que ocurriera la catástrofe del 6D para ello). Una primera medida que debería asumir el Presidente Maduro, con mucho respeto me permito sugerírsela, es el de diseñar campañas comunicacionales e informativas que contribuyan a preparar a nuestro pueblo para enfrentar las terribles dificultades económicas que afrontaremos el año que viene.

Por otro lado, creo que debemos organizar de una mejor manera las movilizaciones y direccionar políticamente el proceso de articulación y acumulación de las fuerzas políticas y sociales para afrontar de una mejor manera la coyuntura por la que comenzaremos a transitar a partir del 5 de enero de 2016, esto si queremos que nuestra contraofensiva revolucionaria sea verdaderamente fulminante, además hago esta sugerencia a los fines de evitar dispersiones y desgastes innecesarios producto de la multiplicidad y simultaneidad de actividades en varias partes de nuestra geografía nacional, y no olvidemos, como me decía alguien: "Esta es una carrera de resistencia y no de velocidad".

Pienso que aún es muy prematuro para declararnos en rebelión constitucional, puesto que el parlamento burgués aún no ha asumido sus curules ni materializado su agenda. Dejemos que asuman, y ver con que se vienen. Obviamente si debemos planificar y pensar en los posibles escenarios, para que en función de ello tengamos planes de acción, pero con la cabeza fría y los puños calientes.

Presidente Maduro, agarre el toro por los cachos, asuma la conducción económica, que fue la causa fundamental de la derrota del 6D, dé direccionalidad política y canalice la protesta que surgirá como volcán a partir del 5E de 2016, pero eso sí, y respetuosamente se lo expresó, échese una apuraíta porque no nos queda mucho tiempo, y el enemigo de clase y de nuestra Revolución no descansa, y no sea que en el momento que queramos reaccionar sea demasiado tarde.

Más que ir a una época de defensa, debemos ir a la ofensiva política. No olvidemos que el mismo Chávez nos lo dijo en infinidad de oportunidades: "La mejor defensa es el ataque".

¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!

¡Hasta la Victoria Siempre!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!