"Nosotros ponemos los muertos y ellos las victimas" con esta frase expresamos nuestro rechazo e inconformidad por esta nueva abatida de la derecha que constituye otra merma a las filas revolucionarias. Con este nuevo crimen, el del combativo periodista Ricardo Duran, ha retomado sus andanzas el extremismo criollo, que no se conforma con derrotarnos en las urnas electorales mediante triquiñuelas sino que insiste en aniquilarnos uno a uno a los chavistas.
En cierta ocasión escribimos un artículo preguntándonos ¿Quién sigue ahora? Los asesinatos selectivos han sido una constante y no hay que ser un sesudo analista para entender que a quienes eliminan son líderes en las comunidades, gente admirada y querida por las organizaciones populares con el único fin de desarmar a la revolución socialista. Danilo Anderson, Eliecer Otaiza, Robert Serra y muchos más, entre los que se cuentan dirigentes indígenas y campesinos. A nosotros no nos queda duda de que a nuestro comandante eterno también lo exterminaron inoculándole aquel cáncer a su organismo tampoco nos quedan claras las causas de la muerte de la camarada Lina Ron quien presuntamente fue envenenada.
Mientras nosotros sufrimos el duelo con estoicismo, sepultando y reverenciando a nuestros caídos, la derecha desfachatada a través de sus operadores mediáticos guarda silencio mientras prepara otra estocada: la de difamar al extinto para justificar la vileza. Lo que más enerva es que los muy depravados se la pasan armando escándalos ante organismos internacionales por sus y que "presos políticos" a quienes el gobierno les está violando sus derechos humanos cuando resulta y acontece que estos señores quienes supuestamente están presos viven a cuerpo de rey ya que hasta champaña y caviar les llevan a sus modestas celdas. Ellos que tienen las manos llenas de sangre son las victimas y el gobierno revolucionario quien ha puesto las víctimas es el victimario. "El mundo al revés" como diría Galeano.
De nuevo nos preguntamos ¿Qué sigue ahora? ¿Continuará la impunidad y la indolencia frente a todos estos crímenes? o tendremos que resignarnos a edificar un cementerio chavista donde por lo visto vamos a ir a parar todos los que asumimos la defensa de la revolución bolivariana.
