Tal como están las cosas con esta oposición que tiene el Gobierno del Presidente NICOLAS MADURO, no queda otra opción que construirle una oposición democrática.

En ese sentido los hombres y mujeres que queremos de verdad a esta Patria de Bolívar y Chávez, tendremos que construirle una oposición democrática, que al margen de la aberrante posición que tiene la derecha que domina la Asamblea Nacional, asuma un papel nacionalista, dispuesta a allanar caminos en medio de las dificultades económicas, sociales y políticas que atraviesa el país., para que el gobierno pueda emprender un proceso de rectificación a fondo en sus fracasadas políticas económicas.

Una oposición democrática con un líder a la cabeza, que tenga poder de convocatoria, que genere confianza en los millones de descontentos que ha dejado esta guerra propiciada por la derecha golpista.

Un líder que a diferencia de los líderes de la derecha, tenga la sagrada misión de ayudar al gobierno a sacar adelante nuestro pueblo de la desesperanza y la desconfianza que se observa contra los actos timoratos del gobierno para enfrentar la crisis y contra la engañosa actitud de la oposición derechista, que ahora declara sin rubor alguno, que ellos jamás dijeron que al ganar la Asamblea, se acabarían las colas, el desabastecimiento, la escases y los altos precios de los productos.

Esa oposición mentirosa, cara dura, es la que hay que sustituir, por una oposición democrática y confiable, que sea capaz de decirle al presidente, respetando su alta investidura, las más duras verdades sobre sus errores y las metidas de patas de sus ministros, por sus incoherencias y falta de voluntad política para atacar la corrupción que hay en su gobierno ,y por su falta de dureza para atacar con fuerza el tema de la conspiración que tienen los grupos empresariales y comerciales con los alimentos, demás productos y artículos de consumo masivo. Por la falta de sanciones y castigo para mucho de sus Ministros, que demostraron ser incompetentes,ineficaces e irresponsables a la hora de tomar decisiones para combatir y resolver los problemas que son de sus competencias.

Reclamos que no los puede hacer una oposición encabezada por un RAMOS ALLUP, metido hasta los teque teques en la conspiración para derrocar al Presidente NICOLAS MADURO.

RAMOS ALLUP es un adeco mañoso, corrido en 7 plazas, cuyo perfil político es bien conocido, por lo tanto, no tiene prestigio ni moral, como no lo tienen CAPRILES, LOPEZ, LEDEZMA NI LA MACHADO y toda esa caterva de asalariados del imperio ,para marcarle pautas al gobierno de Maduro.

De allí surge mi preocupación y la propuesta que hago antes de que seas demasiado tarde.

Las corrientes democráticas, nacionalistas, revolucionarias que muestran sus diferencias con las acciones del gobierno para enfrentar la crisis, pero que comulgan con el legado del Comandante Chávez, deben asumir una actitud constructiva frente al gobierno, no por el Presidente Maduro en sí, sino por la Patria amenazada por la ambición de un grupo de individuos sediciosos con un pasado bien conocido, que no tienen nada bueno que ofrecer a este país.

Todos los que conocemos sus andanzas en los gobiernos adeco-copeyanos, no debemos dejar que dichos personajes caminen solos en el campo de la oposición, porque estos tipos andan en otras cosas distintas a lo que quiere la mayoría de los venezolanos.

Todos los sondeos de opinión dicen que la gente lo que quiere, es vivir en paz, con seguridad, estabilidad laboral y con acceso a los alimentos y los bienes y servicios.

El país lo que quiere es un gobierno, que promueva con eficacia la producción nacional, que levante con imaginación de grandeza el parque industrial, con presencia mayoritaria de los pequeños y medianos, productores. Que se monte en dos grandes proyectos de producción con sello venezolano, tanto en la agricultura, ganadería y pesca, así como en la tecnología de punta, entregada a la juventud venezolana, para su desarrollo e implementación en todas las aéreas productivas del país.

Y que desarrolle una cruzada cultural para desmontar los patrones de conducta que por tantos años el capitalismo les sembró en el alma a los venezolanos.

Estas son las propuestas que una oposición democrática le debe hacer a un gobierno nacido del voto del pueblo...

Una oposición democrática, que tenga aspiraciones de ser gobierno por el voto popular, tiene necesariamente que ser diferente a la tenemos, que para alcanzar el dominio de la Asamblea Nacional, acudió a la mentira y el engaño, induciendo a una parte importante de la población a votar por ellos, con el solo propósito de utilizar ese espacio para impulsar un golpe de estado contra un gobierno democrático.

A prueba me remito, han iniciado su gestión, negando al gobierno, toda iniciativa que tiene como norte, desarrollar la producción nacional, como vía para acabar con el desabastecimiento provocado por FEDECAMARAS Y CONSECOMERCIO.

De tal manera que no hay otra que proceder a construir una oposición democrática al Presidente NICOLAS MADURO, que encause el descontento y le dé respuesta a la incertidumbre que genera el comportamiento irresponsable de los voceros de la derecha, que no hacen otra cosa que sembrar terror y angustia en la población, mandando mensajes desalentadores.

El escenario está servido para que aparezca de entre las filas de los venezolanos que apostamos por el bienestar y tranquilidad de la Venezuela patriótica una figura del pueblo que encabece un movimiento de oposición democrática, diametralmente opuesto a la conducta de los voceros de la oposición golpista.

Soy del criterio que para hacer oposición a un gobierno de elección popular , no hace falta acudir a los métodos desestabilizadores, como la guaribas, la salida y guerra económica, que lejos de dañar al gobierno, le han hecho un gran daño a la población y al país , obligando a su gente a sufrir las terribles e interminables colas, que desvergonzadamente esa clase política ha utilizado con fines políticos, engañando al pueblo con falsas promesas, que ahora con su cara muy limpia, le dicen que no eran promesas sino cuñas publicitarias, tal como están haciendo con su fulana y fraudulenta Ley de propietarios. Estos mentirosos por naturaleza, no se han dado cuenta que al perro macho lo capan una sola vez y que no le será tan fácil en esta ocasión volver a meterle gatos por liebre a los venezolanos que confundidos y descontentos votaron por ellos el 6D. En este caso y particularmente al millón y tanto de familias que hoy son adjudicatarios de una vivienda digna, gracias a la Gran Misión Vivienda Venezuela.

En consecuencia el pueblo venezolano, se merece otro tipo de oposición, que sirva de contrapeso a las deficiencias del gobierno de turno, que haga seguimiento a la gestión de sus Ministros, que promueva la contraloría social conjuntamente con los movimientos populares, que sea puente entre el gobierno y las propuestas del pueblo, dirigidas a dar solución a los problemas que les afectan y que por lo general no aparecen relacionados en los grandes planes que se elaboran en las oficinas de planificación del gobierno.

La oposición que propongo debe tener calor de pueblo y que sus iniciativas tengan sentido patrio. Que no actué con mezquindad frente al gobierno de Maduro, en particular en aquellos eventos, donde el presidente, como lo hizo con su presentación a la Asamblea Nacional del decreto de emergencia económica, para hacer frente a la guerra económica, el cual fue negado por la bancada de la derecha golpista, con lo que se puso de manifiesto la calaña de oposición que tiene este gobierno.

Así mismo hace falta una oposición democrática que coloque los intereses de la patria por encima de los intereses y cálculos políticos, que responsablemente ayude a destrancar los nudos que impiden el avance del progreso de la nación, apoyando pasos importantes para estabilizar la economía del país, tales como el AUMENTO DEL PRECIO DE LA GASOLINA, LA NACIONALIZACION DE LA BANCA, LA FIJACION DE LA TASA CAMBIARIA PARA DERROTAR AL DÓLAR CONSPIRADOR (TODAY). Que apoye honestamente medidas drásticas a las que pudiera llegar el gobierno si se acentúa la crisis petrolera, tales como una reducción violenta de los precios de los alimentos, medicinas, respuestos, insumos para la agricultura y el parque industrial, un incremento agresivo del impuesto al consumo de licores y cigarrillos, también pudiéramos estar hablando de una reducción de sueldos y salarios por etapas hasta superar la crisis económica.

Una oposición que apoye y promueva un plan de financiamiento justo, oportuno, seguro y controlado para los grandes, medianos y pequeños productores e industriales, que hayan dado demostración de no incurrir en el defalco cometido por las empresas de maletín que se robaron los 20.000 millones de dólares de cadivi y que en caso como este, no tenga contemplación para denunciar y llevar a la cárcel a los responsables de los robos al erario público, sean amigos, familiares o partidarios del gobierno o de la oposición.

Finalmente los venezolanos necesitamos una oposición democrática que se sume a los grandes propósitos de la nación.

Por lo tanto esta propuesta está llena del más profundo sentimiento nacionalista, destinado a cubrir el espacio democrático, que fue abandonado por la actual oposición de la derecha, quien renuncio al rol que le corresponde en un sistema democrático, para dedicarse a conspirar contra un gobierno elegido por el voto popular.

En consecuencia, de continuar esos grupos de la derecha, actuando fuera del marco de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela, el gobierno del Presidente NICOLAS MADURO debe proceder como lo aconsejaba el Libertador Simón Bolívar, cuando los individuos se tornan peligrosos y calamitosos y sus actos atentan contra la tranquilidad y paz de los ciudadanos y el estado de derecho, debe proceder a someterlos hasta que se recobre la tranquilidad y la paz de la nación. SI NO LO HICIEREIS QUE LA PATRIA SE LO COBREIS.