Para el momento en que escribo estas líneas, se conmemora el Día de la Tierra. Y este día debe ser de profunda reflexión para todas y todos nosotros y nosotras, porque hay que revisarse el cómo ha sido nuestra relación con el ambiente, con esta "única y contaminada nave espacial", como lo expresaría el periodista Walter Martínez.
Un día como hoy, comenzó a conmemorarse desde 1970, cuando 2000 universidades salieron en Estados Unidos en contra del maltrato ambiental que estaba siendo objeto ese país y otros. En este año, el día de la tierra está dedicado a los árboles.
Creo que el maltrato y la destrucción de nuestra Pacha Mama nos está hablando y nos está reclamando fuertemente nuestro relacionamiento con ella. Nos estamos olvidando que este planeta existió durante millones de años sin la existencia de la especie humana, más nosotros si no podemos vivir sin las condiciones que este planeta nos da. Y si lo destruimos sería el equivalente como si todas y todos nosotros y nosotras nos estuviésemos suicidando.
Recuerdo cuando el candidato perdedor y majunche lechero, Henrique Capriles Radonski en aquella inolvidable y épica campaña presidencial del año 2012, la última de Hugo Chávez, bastantes burlas profirió al Comandante Inmortal, siempre invicto, respecto al quinto objetivo histórico del Plan de la Patria. Hoy, los hechos que son contundentes y hasta tercos, le dieron una vez más la razón a nuestro eterno líder.
En Venezuela desde el año 2006 contamos con una Misión Social para contribuir a frenar un tanto y desde nuestro ámbito la destrucción de nuestro planeta a través de la creación de la Misión Árbol. Hoy esa misión es dirigida por la camarada Osly Hernández, y hoy más que nunca dicha misión adquiere una importancia inusitada.
Como consecuencia de los desequilibrios ambientales y climáticos que se viven a escala planetaria, la República Bolivariana de Venezuela no escapa a dichos embates. Los últimos tres años, coincidentes con la gestión de Nicolás Maduro al frente de los destinos de la Patria de Bolívar y Chávez, han sido de muy pocas lluvias y de calores extremos que ameritan medidas importantes y conciencia antes que nada. Se impone que se cambie el sistema, para parar la destrucción del planeta, y por ende, preservar la vida de la especie humana. Así de simple.
Particularmente este año 2016 ha sido particularmente muy difícil y complejo en materia climática y ambiental. Y como un Gobierno con vocación humanista, y siguiendo la senda y la praxis chavista, Nicolás Maduro ha preferido sacrificar la gestión de la Administración Pública que la afectación en la calidad de vida de nuestro pueblo. Es por ello, que una de sus primeras medidas fue la de recortar el horario de los órgano y entes de la Administración Pública Nacional de 7:30 am a 1:00 pm, salvo aquellos servicios esenciales y empresas básicas de jornada continua, más la seguridad ciudadana y los servicios de salud.
Posteriormente se decidió otorgar la Semana Santa completa, es decir, el asueto de la Semana Mayor se dio completo. Esto para ahorrar y preservar nuestro embalse de Guri, que surte en más de un 70% de energía eléctrica a nuestro país.
Luego, obligado por las circunstancias, decidió decretarse los viernes como días no laborables, durante los meses de mayo y junio, ante el agravamiento del fenómeno de "El Niño" y de la aproximación a niveles de colapso de la presa de Guri. Como medida complementaria, decidió declararse el 18 de abril como día no laborable, para incrementar los niveles de ahorro.
Basta sobrevolar no sólo el lago de Guri, sino sobre el puente Orinoquia (expreso esto porque en lo personal ya lo hice) para quedar verdaderamente impactado y preocupado sobre los bajísimos niveles de los ríos en el estado Bolívar, además de grandes bancos de tierra y monte seco, que puede observarse desde el aire.
Y ahora, el Gobierno Bolivariano se ha visto en la imperiosa necesidad de adoptar una medida dura, compleja, muy difícil pero necesaria y que comenzará a implementarse a partir del próximo lunes 25 de abril, y anunciada en el día de ayer por el Ministro del Poder Popular para la Energía Eléctrica, Mayor General Luis Motta Domínguez, sobre el Plan Nacional de Administración de Cargas, mal llamado de racionamiento eléctrico, que ya por vías de hecho se venía implementando en algunas zonas de nuestra geografía nacional. El fenómeno de "El Niño" lo reitero, no es un juego, y estamos pasando por el momento más duro y complejo producto de que la presa del Guri llegó a su nivel crítico, y se ha visto el Gobierno y el Estado Bolivariano y Revolucionario obligado por estas duras circunstancias, a adoptar estas medidas. Ojalá que haya conciencia en nuestro pueblo para realizar un uso más eficiente de la energía eléctrica, y que esta circunstancia no sea aprovechada por sectores disociados para agravar la difícil situación por la que está afrontando nuestro pueblo, producto de las inclemencias del clima.
Y es verdaderamente lamentable el manejo mediático y asqueroso que ha hecho la derecha respecto a este problema tan difícil y complejo. En vez de hacer llamados a la calma y a la colaboración en el ahorro energético, hacen todo lo contrario. Hacen llamados a incrementar el consumo residencial, el cual es exageradamente alto en nuestro país, y contribuyen a exacerbar la histeria y disociación psicótica en nuestro pueblo, como si ya no existieran suficientes problemas como para recargar a nuestro pueblo con más elementos que roben su paz y tranquilidad.
Ante estos complejos y difíciles escenarios que se viven producto de estas inclemencias del clima, me hice una pregunta en tuiter, que me quiero permitir socializar también a través de esta vía: ¿Por qué en Colombia la ciudadanía no chilla ante las medidas de racionamiento tomada por su Gobierno, y antes bien, colaboran con éste? ¿Será que el Gobierno de Colombia de Juan Manuel Santos repentinamente se habrá vuelto de izquierda? Por dos dudas que tengo.
Creo que se impone un poco de raciocinio y sindéresis por el bien de este país en el que estamos todas y todos. No les estoy pidiendo a aquellas personas que adversan a este Gobierno Bolivariano y que tienen el legítimo y democrático derecho a hacer oposición a que se vuelvan chavistas. Se trata de que en estos momentos sean CONSCIENTES, porque al final, con actitudes irracionales de despilfarro energético, además de resentirse nuestra madre tierra, todos y todas salimos perjudicados. ¿O será que hay personas que realmente están apostando al caos?
Debemos aprovechar esta situación para comunicarnos mejor con nuestro pueblo. La falta de información y los opinadores de oficio, los que se meten a brujos sin conocer las hierbas abundan por ahí. Nuestro pueblo tiene el legítimo derecho a estar informadas e informados, y cuando hay falta de información y comunicación, y sobre todo cuando esta última no es efectiva, da paso a las desinformaciones y rumores que en nada nos benefician.
Ahí se las dejo.
¡No cambiemos el clima, cambiemos el sistema! -- Hugo Chávez.
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!