Comparto totalmente el planteamiento del compañero Diosdado Cabello
Rondón, cuando expresa que: "A medida que transcurren los días de este
año 2016, es una victoria para la Revolución Bolivariana y una derrota
para la derecha enemiga, porque un día más que permanezca Nicolás
Maduro echa por tierra las expectativas de derrocar al Gobierno
Bolivariano, y eso ya de por sí es un triunfo".
Para algunos, en la actual coyuntura, y en el marco de este escenario
de Guerra No Convencional donde estamos siendo agredidos, no
estaríamos en un ambiente para la teoría. Y aquí tenemos que hacernos
profundas reflexiones, puesto que, algunos analistas creemos que pese
a las dificultades y acechanzas, estamos en el mejor momento para el
reforzamiento del factor ideológico, para la formación y la
autoformación revolucionaria.
¿Quién puede negar que a la derecha le han dado la orden de pasar a
una nueva etapa de ofensiva para derrocar a la Revolución Bolivariana
y a su líder, Nicolás Maduro? ¿Nos olvidamos lo contemplado en el Plan
"Freedom Twoo, y que los meses de junio a agosto serían los meses
críticos? ¿Nos olvidamos que por la subestimación del Plan Freedom
One, la derecha fascista y violenta logró conquistar importantes
espacios dentro de la Asamblea Nacional?
Comparto totalmente el planteamiento del Comandante William Izarra, a
quien nuevamente citó, cuando se plantea tres escenarios en el marco
de la actual coyuntura política, y que necesariamente deben
conducirnos a un desenlace:
1.- Un primer escenario, donde seguimos viviendo una etapa reformista,
es decir, un gobierno socialista pero empleando las armas melladas del
capitalismo, como lo expresaría Ernesto "Ché" Guevara.
2.- Un escenario verdaderamente de Revolución, porque se plantea
verdaderamente un cambio de estructura y ejercicios de democracia
directa, participativa y protagónica, donde se apliquen los actos
electorales como un acto verdaderamente revolucionario, y esto es,
llegar al Poder para transferirlo al pueblo.
3.- O producto de nuestras indefiniciones ideológicas y de no definir
el método a implementar nuestro modelo político, y que se cumpla la
profecía autocumplida de Ramos Allup de que " a mis 72 años,
represento el futuro, porque vamos a ser gobierno, vamos a tomar el
poder", es decir, la derecha tomando el gobierno, con todos los
elementos que ello implica.
Nadie en su sano juicio puede negar en estos momentos que hay un
calentamiento adicional en este escenario de Guerra No Convencional, y
nos permitiremos citar al Comandante Izarra nuevamente, en los
elementos que sostienen esta aseveración, más algunos que este
articulista ha detectado para el momento en que escribo estas líneas.
Entre los elementos que señala el Comandante Izarra, tenemos los siguientes:
1.- Henry Ramos Allup no acata las sentencias del Tribunal Supremo de Justicia.
2.- Las declaraciones del portavoz del Departamento de Estado, John
Kirby sobre el Revocatorio.
3.- La incorporación de dos diputados de Amazonas y la representación
indígena sur, en abierto desafío y desconociendo una sentencia del
Tribunal Supremo de Justicia y la Constitución de la Repúbica
Bolivariana de Venezuela.
4.- Las amenazas de Henrique Capriles, si el CNE no decide en el día
de hoy, sobre la solicitud del Referendo Revocatorio, de "manifestar
en contra del Poder Electoral" (abiertos llamados a la violencia).
Pero a estos elementos aportados por Izarra, tendríamos que agregar
otros adicionales que desde mi punto de vista, me parecen
extremadamente peligrosos y están siendo subestimados en estos
momentos: La resurrección del caso de los sobrinos de la Primera
Combatiente Cilia Flores, no sólo para reactivar el tema de la
vinculación del narcotráfico con altos voceros gubernamentales, y en
especial con la figura presidencial, que bastante daño hizo en la
campaña de las parlamentarias del año 2015, sino la estela de dudas y
desconfianza que buscan reforzar no sólo en contra del Jefe del Estado
sino del resto de los integrantes del Alto Mando Político y Militar de
la Revolución.
Lo otro tiene que ver con la "petrocorrupción", esto a propósito del
supuesto caso de una pequeña empresa colombiana Trenaco, que "no
estaría calificada ni técnica ni económicamente para el proyecto de
perforar 600 pozos en la Faja del Orinoco a cambio de 4.500 millones
de dólares. Según estos "expertos", PDVSA no habría hecho caso,
Trenaco quebró y sería uno de los casos de corrupción que se
investigan dentro de la industria petrolera venezolana.
Por último, dos elementos que tienen que ver con el Poder Electoral:
Para el momento en que escribo estas líneas, se espera que para el día
de hoy, el CNE se pronuncie sobre si la derecha venezolana a través
del partido Mesa de la Unidad Democrática (MUD), estaría legitimada
para activar la figura del referendo revocatorio prevista en el
artículo 72 de nuestro texto constitucional. La decisión que pueda
hacerse pública en el día de hoy, o en su defecto en los próximos días
de este mes de agosto que recién inicia, puede actuar como detonante
de hechos de violencia o de nuevas modalidades de desestabilización
que no podemos subesimar ni desdeñar de buenas a primeras.
Lo otro tiene que ver con alertas que incluso me permití formular en
artículos anteriores a comienzos de este año, y tiene que ver con que
el próximo 3 de diciembre del presente año se vence el lapso de siete
(7) años a las rectoras del CNE Tania D ¨Amelio y Socorro Hernández, y
a sus suplentes, la Asamblea Nacional adeco burguesa comenzó a
estudiar la conformación del Comité de Postulaciones Electorales. Es
evidente que le quieren poner mano al Poder Electoral, y tienen hasta
un candidato para presidirlo. Ojo pelao.
Es evidente que la derecha pretenderá desde el Poder Legislativo que
controlan, pretenden crear crisis políticas sobrevenidas, a través de
la utilización de los mecanismos constitucionales y de participación
popular previstos en nuestro ordenamiento jurídico vigente.
¡A prepararse pues! ¡Se vienen nuevos y duros tiempos de combate!
¡Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!