La operación de entrega de la Revolución se desarrolla con precisión. Primero el imperio aplicó la máxima de que "la culebra se mata por la cabeza" y asesinaron al líder, así comenzó el proceso de entrega de la Revolución, del Socialismo. Luego falsificaron el Plan de la Patria, llamaron a diálogo a los mayores capitalistas del país, a Cisneros y a Mendoza, se reunieron en público y en secreto con los empresarios, los estimularon, les dieron dólares, participación en el lomito de la economía, en la Faja, en el Arco, regresaron las compañías golpistas y las expulsadas por el Comandante. A la masa humilde le dieron migajas, le estimularon el egoísmo, usaron la rebatiña, el subsidio grosero sin formación, se aferraron al mercenarismo, el "dakazo" fue su emblema, la privaron del ejemplo de Chávez y lo convirtieron en una imagen vacía.
La primera fase de la entrega del legado de Chávez fue discreta, se desmontó la conciencia del deber social, la economía socialista, se disolvió la organización social y política, el PSUV fue convertido en un cascarón, bueno para poco, los consejos comunales abandonados, las comunas al olvido.
Cumplida esta primera fase se abocan a la segunda, quizá la más difícil, a la entrega política, es más evidente, se necesita de una alta dosis de caradurismo, y una elevada dosis de inteligencia para justificar la unión, el maridaje con los que ayer eran adversarios. Está claro que los tanques pensantes gringos ayudan, ahora encontraron la justificación, se habla con descaro de la búsqueda de la paz ¿Quién podía estar en desacuerdo con la paz?, hasta el Papa mandó un apoyo, el Presidente, el mismo que ayer hablaba de golpe sangriento, de planes de los gringos, hoy nos confiesa que se estaban reuniendo escondidos con los sangrientos, con los vendepatria, todo en nombre de la paz, y el que critique es violento, ultraizquierdista. Claro, ahora no se pueden acusar a los que critican de agentes gringos, de infiltrados, ya gobierno y mud, aquellos y estos son iguales, son los mismo, todo en nombre de la paz.
Falta poco para que estos hipócritas reconozcan con su caradurismo y su deslealtad a toda prueba, que el 4 de febrero fue un error, que en el sabotaje y el golpe de abril faltó diálogo por la paz, que el Comandante era muy violento, que Bolívar ha debido dialogar con los españoles en lugar de hacer la guerra, que Fidel se equivocó asaltando el Moncada, que ha debido llamar a diálogo, que hasta el Papa lo hubiese apoyado.
Frente a esta entrega que a pocos engaña y a muchos desencanta, qué deben hacer los revolucionarios? La consigna debe ser "Frente al diálogo para la entrega, diálogo para la revolución, para la lealtad".
Se debe convocar un diálogo urgente entre los chavistas consecuentes, los socialistas, los chavistas verdaderos. La agenda es muy clara y trasparente, no hay nada oculto: 1) defensa del legado de Chávez, del Plan de la Patria. 2) La violencia como arma de las clases dominantes, y como respuesta de la liberación. 3) El Socialismo como conquista de la verdadera paz, la paz con justicia. Acciones, formas organizativas.
Es la hora, es la oportunidad de las direcciones del PSUV, de asumir su papel de chavistas, de socialistas, encabezar esta lucha por la defensa del legado de Chávez, es la tarea más importante de hoy. Convoquen, la historia los absolverá.
