Cuando Hitler decidió atacar a la Unión Soviética en 1941 iniciando la llamada Operación Barbaroja estaba convencido que sería victorioso por tres razones entre otras: El factor sorpresa de su ataque, la supuesta superioridad de los alemanes y la supuesta inferioridad de los pueblos eslavos a los que llamaba "pueblos coloniales". La agresión nazi-fascista fue aplastada y derrotada por la Gran Guerra Patria emprendida por el pueblo soviético y su Ejército Rojo, revelando un ejemplo histórico de cómo una ideología basada en el racismo y el odio puede transformar a cualquier conjunto de seres pensantes en una masa ciega, bruta e incapaz de interpretar lo que sucede en la realidad.
En una movilización de motorizados chavistas en Caracas se pudo captar a partir de las imágenes tomadas desde un celular como personas de la oposición les gritaron frases irracionales cargadas de odio y racismo como si no se trataran de personas iguales a ellos y que habitan en el mismo país. Esas imágenes y otras similares tuvieron el merito de revelar la mentalidad que impulsa a muchos sectores de la base opositora a la hora de reaccionar ante la presencia de los venezolanos como ellos que defienden al chavismo. En su espontaneidad esas agresiones verbales muestran lo que es ocultado calculadamente por la dirigencia opositora que si bien "piensa", comparte la misma premisa que los enceguece a ambos: EL odio y el racismo que los hace ver a los chavistas como personas inferiores social e intelectualmente.
La ceguera producto del odio explica que la base opositora no haya percibido que fueron engañados con respecto al Revocatorio. Para empezar tendrían que haber reclamado porque se cometieron tantas y groseras irregularidades y de porque sus dirigentes fueron tan incapaces para recoger de manera efectiva las casi 200 mil firmas que eran necesarias. ¿Por qué presentaron más de dos millones de firmas si con el 10% de esa cantidad era suficiente? Si no estuviesen imbecilizados por el odio tendrían que haber empezado a sospechar que algo extraño estaba sucediendo al enterarse que más del 60% de sus diputados no firmó. ¿Qué es eso? Que algunos pocos diputados no hubiesen firmado por motivos de salud u otros de causa mayor sería humanamente comprensible, pero ¿Cómo es que no firman más del 60% de los diputados que se supone volvieron a sus estados a movilizar a sus bases para lograr de manera efectiva y exitosa la principal acción política que supuestamente les permitiría sacar legalmente al presidente Nicolás Maduro de Miraflores?
La base opositora acusa al pueblo chavista de tener este un bozal de arepa cuando ellos se comportan como si tuvieran harina en la cabeza. Triste y lamentable
En lo que se refiere a la dirigencia opositora ese mismo odio la ha llevado también a imbecilizarse pero en un plano digamos "superior". Son capaces de llevar adelante los planes y las líneas discursivas que reciben de los tanques pensantes gringos, pero el odio y el sentimiento de superioridad frente al pueblo chavista los hace incapaces de procesar el significado profundo de la Revolución Bolivariana. Por eso copian y pegan los planes norteamericanos sin siquiera intentar adecuarlos a la realidad nacional. Los gringos parecen darse cuenta que sus traductores son unos incapaces y por eso una y otra vez con su habitual intervencionismo actúan directamente esperando compensar con su apoyo logístico la incapacidad congénita de una oligarquía reaccionaria, clasista y racista.
Mientras nosotros los bolivarianos hemos empezado a dar pasos firmes para superar los efectos negativos del rentismo petrolero, ellos que se acostumbraron a manejar el poder durante la "Venezuela saudita" de la Cuarta República siguen creyendo que basta con copiar, pegar, enviar y ejecutar las órdenes que ahora les tienen que llegar ya traducidas.
Si se hubiesen puesto a analizar los videos del brindis-borrachera del carmonazo no hubiesen vuelto a repetirlo como vienen haciendo en la Asamblea Nacional desde el 6 de diciembre ni hubiesen abierto las botellas de Champan este miércoles 23 de octubre al aprobar como verdaderos lunáticos una resolución-acuerdo que repite ideas del acuerdo parlamentario que fue aprobado en Chile en 1973 previo al golpe de Pinochet. Quieren, una vez más, desconocer el poder del pueblo representado en el presidente Maduro. Nada nuevo, ya lo sabíamos. Están descubiertos fascistas enemigos de la Patria, pero no de ahora. Hace rato que la sabiduría bolivariana sabe lo que ustedes saben. Pero entiendan de una vez por todas, que esa misma sabiduría que ustedes desprecian por racismo y odio como Hitler, nos permite saber también lo que ustedes no saben. Recuperar las raíces de un pueblo desde la Resistencia Indígena, pasando por el fin de los trescientos años de calma de Bolívar que nos dieron nuestra primera independencia hasta llegar al fin de los otros 200 años calmados que Hugo Chávez nos enseñó a nunca más aceptar para dar inicio así a nuestra segunda y definitiva independencia.
Por eso de nada les valdrá este nuevo intento de poner en zozobra la paz de nuestra querida Venezuela. EL pueblo les hizo una visita de cortesía en la Asamblea Nacional el otro día apenas para recordarles que si intentan un nuevo 11, nos presentaremos el mismo 11 para impedirlo. Y si tampoco entendieron ese mensaje les conviene leer el comunicado de la FANB de este 25 de octubre donde está escrito bien claro "QUE QUIENES BAJO CUALQUIER PRETEXTO PRETENDAN INTERVENIR EN EL SUELO SAGRADO DE LA PATRIA, SE TOPARÁN CON LA FÉRREA RESISTENCIA DE LOS HIJOS E HIJAS DE BOLÍVAR Y DE CHÁVEZ, EN SU IRREDUCTIBLE DISPOSICIÓN A DEFENDER CON LA VIDA CADA ESPACIO DE LA GEOGRAFÍA NACIONAL Y CADA CONQUISTA SOCIAL ALCANZADA."
Con el presidente Nicolás Maduro al frente de un ejército en batalla, conformado por la indestructible unidad cívico-militar entre el pueblo venezolano y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, venceremos también a los fascistas del siglo XXI en esta nueva Guerra Patria que estamos trabando no solo en Venezuela sino en todo nuestro continente.
Vencerá el Coraje, Vencerá el Amor, Vencerá la Sabiduría
