Desde el año 2013 por decisión de la ONU se celebra el día 20 de marzo como el día Internacional de la Felicidad, una propuesta que surgió por iniciativa del Reino de Bután, país que defiende la interesante idea de que se debe considerar a la Felicidad Nacional Bruta como más importante que el Producto Interno Bruto. Es decir que se debe valorar la relevancia que tiene la felicidad y el bienestar humano en cuanto aspiraciones universales que deben ser incluidas en las políticas de los gobiernos.
Si la felicidad es un estado existencial, o si son solo pequeños momentos de la vida es un debate que no ha concluido. Lo cierto es que ella tiene la doble cualidad de ser al mismo tiempo un objetivo y una motivación. Si pensamos que no la tenemos, la buscamos y si la tenemos ella nos impulsa a defenderla y codiciarla mucho más. Por eso tal vez sea la única codicia humana que beneficia a quien la persigue y a los demás.
En Venezuela el visionario Bolívar la incluyó en su proyecto revolucionario cuando declaró que "El sistema de gobierno más perfecto, es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política". Es por ello que a pesar de los diversos y permanentes ataques que ha recibido nuestro país durante los 18 años de la Revolución Bolivariana seguimos figurando todos los años entre los países cuya población se considera entra las más felices del mundo.
Un verdadero escándalo para los amargados y fanáticos derechistas que afirman contra toda lógica racional que vivimos en una "dictadura". Una lección de vida y política en todo caso para los que no terminan de entender y de aceptar que en Venezuela se está desarrollando una Auténtica Revolución Popular ampliamente respaldada por la inmensa mayoría del pueblo. Si no fuese así habría que preguntarse porque todos los días Venezuela aparece como tema de debate para la derecha en la política interna de diversos países. ¿Cómo es que en esos "justos" y "democráticos" países la "dictadura venezolana" se convierte en el tema de discusión?
Es evidente que ya no es el fantasma del comunismo el que anda rondando Europa y el resto del mundo como había afirmado Marx en el siglo XIX. Es el fantasma de la contagiante alegría de la espada de Bolívar que recorre la América Latina. Es el chavismo y su Revolución Bolivariana y Socialista del siglo XXI lo que les preocupa y por eso con sus mentiras y campañas sucias intentan distorsionar el ejemplo que viene desde Venezuela porque saben que es cuestión de tiempo que sus propios pueblos repliquen también la revolución que tanto necesitan para sacudirse de todo ese peso de opresión, tristeza y amargura que traen a cuestas desde hace décadas.
A los fascistas y amargados del planeta les decimos que podrán retrasar el comienzo de la fiesta de justicia, igualdad y libertad en sus países pero también que tengan la certeza de que no podrán impedirla jamás. La vida que es alegría y felicidad siempre ha podido y podrá mucho más.
Que Viva la Felicidad!
Que Viva la Revolución Bolivariana!
Que Viva la Revolución Mundial en camino!
