"Ya van más de treinta muertos en la marcha de la oposición", "algo tiene que pasar en este país, pero así no podemos seguir", "esta situación es inaguantable", "la vaina está jodida", "esta gente va a hacer de todo con tal de quedarse en el Poder", "Es que si salen del Poder pueden ir hasta presos", "los que estamos jodidos somos nosotros", "De este país hay que irse"... Son solo expresiones de lo mucho que se escucha en las voces de la gente que vive en carne propia las consecuencias de una crisis que cada vez se profundiza más. Ante esta crisis económica profunda, política y social el Gobierno del Presidente Maduro, defraudó a quienes tenían la expectativa de que se publicara el cronograma electoral o se anunciaran medidas que favorecieran al pueblo que vive de su trabajo para normalizar las mermadas condiciones de vida, y "sorprendió" a todos con el anuncio con bombos y platillos de una convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente con unas condiciones de "participación" en la que el pueblo queda como un mero "mirón de palo".
Ante el anuncio surgieron más preguntas y dudas que acrecientan el descontento popular "¿y cómo van a aprobar esa ANC'?" "¿No deberían hacer elecciones para ver si nosotros queremos ir a una ANC o no?". Las personas, por supuestos apelan a lo que fue su experiencia en la Constituyente del año 1999 y en la que el pueblo se sintió parte protagónica de la misma. Comentarios que se han hecho comunes denotan el rechazo de la propuesta entre un sector importante de la población. "Pero ¿quién entiende al gobierno? "Hasta hace muy poco rato el gobierno decía que esta era la mejor constitución del mundo, ahora le molesta" "Esta Constituyente es para poner a Maduro a gobernar quien sabe cuantos años más" "Quieren hacer una Constitución a su medida" los más escépticos afirman "eso es puro pote de humo, ni que con eso se comprara comida y medicinas. Eso es lo que deben hacer en vez de estar inventando vainas"
Por el lado del gobierno, las voces no son ni muy esclarecedoras ni, mucho menos, avizoran que se avance en el camino de la democracia participativa y protagónica. Al contrario , intentando justificar esta nueva decisión gubernamental se pudo escuchar a personeros de la casta burocrática las más inverosímiles excusas sobre las razones por las que "el soberano" no puede ejercer su derecho a decidir y, sobre todo, a ser escuchado. Por ejemplo Aristóbulo Izturiz: "No hay que preguntarle nada al pueblo porque hoy la Constitución contempla la Constituyente", para justificar la no-participación a través de un mecanismo antidemocrático en el que solo caben una participación arbitraria del 50% de instancias cooptadas al Estado.
La Constituyente para consolidar un régimen político de carácter autoritarista
Todos sabemos que la Constituyente no resuelve los problemas de la vida de la gente, quiere decir que el Gobierno no tiene entre sus prioridades que se normalice la cotidianidad de la población, sobre todo esa que hoy gana menos de 50 dólares al mes (bono de alimentación incluido). Lo que se revela y se pone de manifiesto, es que la prioridad de Maduro es consolidar un régimen de carácter autoritarista. Es, precisamente, por esa razón que la convocatoria a una nueva Asamblea Nacional Constituyente no puede ser de otras características. Un gobierno que hasta ahora ha violado la Constitución, ha confiscado la participación del pueblo, ha tomado decisiones en contravía con la CRBV, secuestra los poderes autónomos o simplemente los desconoce cuando no muestran una conducta complaciente y se supeditan por completo al Poder Ejecutivo, como es el actual caso del Poder Judicial.
El gobierno quiere que la población se someta a una "legalidad "a su medida en el mismo sentido que ellos se han adjudicado la prerrogativa de actuar en el marco de la ilegalidad absoluta. Un gobierno que cada vez más se transfigura en un régimen totalitarista no puede hacer una convocatoria con la más amplia democracia. Están incapacitados e inhabilitados para eso.
Solo cabe preguntarse si un gobierno que de facto eliminó nuestro derecho a elegir a través del voto, que ha roto el hilo constitucional usando el TSJ y el CNE como cínico cómplice, puede actuar siendo respetuoso de la Constitución y las leyes.
Ante esta sistemática violación de la CRBV y de nuestros derechos y libertades democráticas es perentorio y necesario que exijamos que la convocatoria a la ANC sea sometida a referéndum a través del voto universal y secreto.
Tenemos el Derecho a levantar la voz contra la sistemática violación de nuestras conquistas constitucionales y de nuestras libertades democráticas.
Tenemos el Derecho a exigir el restablecimiento del Estado de Derecho y del Hilo Constitucional.
Tenemos Derecho a levantar nuestras voces en contra de las pretensiones de imponer un régimen autoritarista.
Tenemos Derecho a desconocer las imposiciones y las arbitrariedades que nos pueden llevar a vivir décadas de obligatorio silencio y de férrea represión mientras se cae a pedazos el sueño de los millones que somos parte de este proceso revolucionario.