Si nos preguntaramos ¿De dónde vendrían la enseñanza y los ejemplos que pudieran encauzar nuestro proceder como pueblo, para ser constructores de un mejor destino en esta Patria de Bolívar?
Pudiéramos decir sin temor a equivocarnos, que vienen de aquí de adentro, de nosotros, de nuestra historia, del ejemplo de nuestros proceres y nuestros libertadores ¿Acaso no quedó plasmada en documentos que registran la epopeya independentista y el ejercicio civilista, democrático y justiciero de nuestro Libertador Simón Bolívar, toda esa fuente excelsa donde puede abrevar por necesarios conocimientos el mejor ciudadano del mundo?
Hoy, no estaríamos queriendo ser lo que no somos, y no queriendo ser lo que verdaderamente somos, dando tientas a ciegas, para conseguir respuestas que coadyuven a un adecuado discernimiento, de todo lo que nos acontece, por la inducción e injerencias del imperio, en su afán depredador con el que se quiere engullir nuestros recursos.
En estos tiempos muchos venezolanos con buena fe y un alto interés en que se resuelvan los problemas sobrevenidos a causa de la delictual actitud imperial contra nuestro país, son sorprendidos cuando el
Presidente Maduro convoca a una Asamblea Nacional Constituyente, para eliminar archivos todos los males creados por una oposición inhumana y apatrida, que nos quita la paz. A ello agregamos la confusión que crea en el ciudadano desaprensivo la matriz de opinión de la derecha y exrevolucionarios devenidos en opositores, quienes basados en falsas interpretaciones de la CNRBV y mentiras, se oponen a la ANC.
Bien, dignos camaradas, esta disertación es para mostrar una triste falla que hemos cometido durante éstos años de revolución. Es, que por alguna razón no pudimos o no supimos enseñar a nuestro pueblo las bases ideológicas de esta lucha por lograr la justicia social tan
necesarias para un pueblo injustamente humillado por más de 500 años.
Recordemos que comenzamos esta conversación con una pregunta, acerca de donde estaba la fuente de conocimiento que nos permitiera un carácter patriótico que nos ligara a la Patria en una sólida identidad. Dijimos que la teníamos aquí dentro, en nuestra historia, en nuestra cosmovisión, nuestra cosmogonía y el ejemplo de nuestros pueblos originarios, nuestros precursores y libertadores. Lo reiteramos para afianzar, la enseñanza en la mente del pueblo, que refuerce la autoestima y el sentido de pertenencia, falencias estas que lastimosamente, nos han llevado a despreciar el gentilicio venezolano.
Términos como democracia, Poder originario, Poder constituyente, constitución, leyes, no deberían sorprendernos, ni exaltar a quienes los manipulan. Tampoco deberían ser utilizados para manipular a otros, o ser manipulados. Por el contrario deben ser de común conocimiento, entendimiento y uso, porque son las herramientas con que se labra la vida civil y, que en definitiva nos blinda contra la exclusión secular.
Esos conceptos siempre han estado ahí, imbricados en nuestro devenir histórico, profusamente usados en los más significativos y pedagógicos documentos del Libertador, como: El manifiesto de Cartagena, La carta de Jamaica, El congreso de Angostura, El congreso anfictionico de Panamá y muchos más.
Elegir la ANC y la consecuente redacción de una nueva CNRBV mediante la ejecución directa, creativa, participativa y protagónica del pueblo, requiere de conocimiento, experiencia y un alto nivel de responsabilidad. Es bueno tener presente que no hay oportunidad de escurrir el bulto y pasar desapercibidos. La historia está ahí, atenta, con una importante dotación de instrumentos tecnológicos para registrar todo evento.
De manera tal, que tú, pueblo, propondras, organizarás, crearas y aprobaras el marco legal, para la vida política y social de la Patria y debes prepararte para ello. ¡Voluntad y trabajo!
¡Independencia y Patria Socialista y Soberana!
¡Chávez vive!
¡La Patria sigue!
¡Viviremos y venceremos!
11/06/17 4 AM
