Los fascistas temen tanto a la Paz, como a sí mismo.
Ellos viven en pesadilla eterna
marcando su destino
con la maldad de sus actos
Pensamiento del Autor
La oposición violenta y terrorista, impone por mandato de su trastocado entender, la tragedia como festín y la ausencia de civilidad como norma. Así, luego de haber sido derrotada en todas sus acciones violentas por la fuerzas de la paz a lo largo y ancho del territorio de la República Bolivariana de Venezuela, intensifican sus macabras acciones y sin menoscabo de cualquier viso microscópico de civilidad, trancan vías, saquean, asesina, quema y destruye a discreción de su mandato imperial, con el fin de tomar el poder por cualquier vía y a cualquier costo.
Sabemos que están asustados, que su dirigencia no tiene ninguna posibilidad de recomposición de las fuerzas políticas que les acompañaron en Diciembre de 2015. Entendemos que han perdido liderazgo y ahora están a expensas de los párvulos violentos y narcotizados que contrataron para hacer el trabajo sucio. Les percibimos enredados en una trama sin sentido que impone la anarquía y cierra toda posibilidad a la razón política, al debate, al despeje de las diferencia y a la búsqueda de encuentros en el marco de la Constitución y bajo el manto del Estado que nos cobija a todos.
En ese sentido, han perdido atractivo noticioso, sustancia discursiva y sobre todo seriedad y compromiso patrio.
Ahora están agudizando el foquismo con el fin de aterrorizar a la población, amenazando a los pequeños comerciantes y atentando contra todo aquel que se atreva a salir de su casa a realizar cualquier actividad, a pesar de los destrozos por ellos ocasionados.
Su estrategia es cerrar todo el comercio, sea grande o pequeño, su tema es impedir que la gente adquiera los productos de primera necesidad y mantener un clima de caos que conlleve a la ingobernabilidad y en consecuencia potencie el desespero y desborde las pasiones en la población que sufre las consecuencias de sus irresponsables acto.
En ese sentido, ellos multiplican los focos del conflicto con el fin de agotar la capacidad de respuesta de los cuerpos de seguridad: Policías y GNB., y amparados en los derechos humanos, que gracias a la Revolución Bolivariana les protegen, van incrementando la violencia hasta llegar al colmo de acusar a cualquiera de Chavista, para que las masas intoxicadas por el odio, lo linchen, lo quemen y lo maten.
En consecuencia, debo advertir, que no hay ninguna posibilidad de entrar en razón con ellos, que estos individuos no tienen ni la más mínima noción de política, lucha democrática o aspiración republicana y civilizada, su objetivo es devastar todo, acabar con todo y quemar todo, hasta que caiga el Presidente Maduro y desaparezca el Chavismo de la faz de la tierra.
…Pobre gente, cuando no están drogados y/o intoxicados por alcohol, son movidos por la violencia o por dogmas advenido de complejos religiosos que le sirven de sustento para atacar cual perro rabioso contra todo lo que consigan a su paso: Persona, Animal o Cosa…
Ahora bien, mientras esto terroristas están activados, en el sector militar acantonado en los cuarteles, se tiene clara conciencia de los niveles de actuación que son requeridos para mantener la paz, pues como todos sabemos, con el marco legal de los DDHH y la posición asumida por la señora Fiscal General, toda acción militar en el uso progresivo y diferenciado de la fuerza, puede ser interpretado como una represión autoritaria que desconoce el profundo carácter democrático institucional de nuestra Fuerzas Armadas Nacional Bolivariana.
En ese sentido, creo que ha llegado la hora del pueblo organizado, no para confrontarnos en una lucha inútil entre los enfermos contratados por la derecha y nuestro poder popular, sino para combatir junto a la gente por la paz, la armonía y la concordia con la fuerza de los programas sociales que deben llegar hasta el último rincón de la patria.
Como vemos, estamos caminando por el filo de una hojilla y la paz requerida para las elecciones Constituyente no se puede romper.
En estos tiempo de lucha y victoria contundente, ha llegado la hora de usar toda la fuerza legal que dispongamos en pro de la Paz, son tiempos propicios para que el pueblo revolucionario acompañe en las calles a nuestra fuerzas policiales y militares, armados con filmadoras y cámaras fotográficas, teléfonos inteligentes y demás instrumentos que sirvan para documentar las acciones por la restitución del orden que nuestro valientes soldados y policías a diario deben acometer. Como diría Diosdado: A Dios Rogando y con el Mazo Dando.
La Constituyente es nuestra senda para asegurar la democracia revolucionaria y Chavista. Los revolucionarios estamos obligados a protegerla como legado eterno en favor de todos, incluyendo, en favor de quienes no adversan. Por ello mientras la oposición tranca toda vía de entendimiento e impide el libre tránsito de la inteligencia, nosotros tenemos el deber de dar el combate por la vida desde el amor y con la contundencia de nuestro compromiso por la patria. Viva el Presidente Nicolás Maduro. Viva la Revolución Bolivariana y Chavista.