Para el momento en que escribo estas líneas, ya ejercí mi derecho a votar y atendí mi cita con la historia. Desde el miércoles 26 de julio, estoy en la tierra donde me crié, Ciudad Guayana, esto a los fines de poder ejercitar mi derecho al sufragio, y poder visitar a mi familia.

Luego, al día siguiente, cuando iba de camino a Los Olivos, una zona urbanizada en Ciudad Guayana, tuve un encuentro con algunos de esos terroristas, que custodiaban barricadas. Algunos cargaban morteros, otros con armas largas. Pero en líneas generales, eran unos imberbes, unos niños, niñas y adolescentes, que no tienen claridad el motivo por el que ellos custodian esas barricadas, y están dando esa lucha.

De hecho, algunos y algunas de ellos y ellas, mostrando efectos de algunas sustancias estupefacientes y psicotrópicas, pretendían que hasta los peatones no pudiésemos transitar en dichas zonas, es por ello, que nos alzamos y enfrentamos con la palabra a estos fascinerosos y fascinerosas, logrando con ello quebrar esa violación al libre tránsito que pretendían estos imberbes contra personas que nada tenemos que ver con este atentado a este derecho.

Es por ello, al llegar a la casa de mi pareja y suegros, prácticamente nos secuestraron en esa zona. Tenía días tratando de escribir algunas líneas, pero en virtud de que Cantv es tan ineficiente, eliminaron el servicio de cantv de casa de mis suegros, y desde hace tres meses que han intentado algún tipo de respuesta ante su justo reclamo, el peloteo de los trabajadores y trabajadoras de este servicio ya adopta record de guiness.

Pero, pese al secuestro y a la limitación de ciertas informaciones, desde el 28 de julio pude enterarme como el gobierno gringo sancionaba a algunos funcionarios del Estado venezolano. La lista la encabezaba la rectora y Presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena; Elías Jaua, jefe de la Comisión Presidencial Constituyente y próximo constituyentista; Tarek William Saab, Defensor del Pueblo; M/G Néstor Luis Reverol Torres, Ministro del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, a quien los gringos ya han dictado una orden de captura por "el delito de narcotráfico"; al general Carlos Alfredo Pérez, director de la Policía Nacional Bolivariana (PNB); al general Franklin García Duqye, ex director de la PNB; al general Sergio Rivero Marcano, comandante general de la Guardia Nacional Bolivariana ; al M/G Jesús Suaréz Chourio, comandante general del ejército; Carlos Erick Malpica, tesorero nacional; Alejandro Fleming, ex ministro de Comercio; Rocco Albisinni, presiente del Centro Nacional de Comercio Exterior (CENCOEX); Simón Zerpa, vicepresidente de Finanzas de PDVSA; e Iris Varela, ex ministra de Servicios Penitenciarios. Es decir, se busca sancionar a los que han golpeado a las hordas terroristas, a los que tienen manejo sobre las finanzas del país, y a figuras emblemáticas y cuadros del Alto Mando Político y Militar de la Revolución.

Amenaza el imperio con más sanciones a individualidades del proceso, con más sanciones económicas, con sanciones petroleras. Pero no han terminado de entender que este pueblo, este "cuero seco" llamado República Bolivariana de Venezuela, está resuelto a ser libre.

Ahora resulta que hay países que quieren gobernar más que el propio pueblo venezolano. Perú, Colombia, México y Estados Unidos no "reconocen" a la Asamblea Nacional Constituyente. No entienden que, independientemente del resultado de hoy, ya la Asamblea Nacional Constituyente es una realidad que no pueden soslayar ni ignorar. Sin duda, nuestra cancillería tendrá mucho trabajo en los próximos días, ante las arremetidas que desde el exterior pretenderán en contra de este órgano supraconstitucional.
Venezuela, con la demostración de nuestro pueblo, ha cambiado para siempre. A partir de este momento, se abre una nueva etapa histórica. Empieza un debate sobre el modelo de Estado y de país que queremos. Inicia un diálogo en una etapa superior, y esto nada ni nadie puede detenerlo.

Los que preconizaban, cuales voces agoreras, de un Armagedón en nuestro país, pues erraron en sus análisis y sus cálculos. Este país no se fue por el barranco de la violencia, y llegamos a la Asamblea Nacional Constituyente.

Ahora bien, ese debate no estará exento de dificultades, de amenazas, de ataques. Pero que los mismos no nos distraigan de los grandes temas que debemos dilucidar ni del despeje de la misteriosa incógnita del hombre y la mujer en libertad. Debemos trabajar, todos y todas, por el bien inestimable de la unión y del rescate de la gobernabilidad y la gobernanza en nuestro país. Y con esto me dirijo no solamente al sector chavista, son al sector catalogado como independiente, incluso al opositor de a pie.

Vienen etapas donde todas y todos debemos aprender a escucharnos y a respetar las opiniones, aunque no las compartamos. Tremenda las lecciones de un pueblo, que pese a barricadas y amenazas, se movieron a pie, en bicicleta, en cola. Que no la detuvo ni el frío ni el calor, ni la lluvia ni el sol. ¡ Qué grande es sin duda el pueblo de Venezuela!
Y estoy completamente seguro, al igual que en 1999, que con esta Asamblea Nacional Constituyente y esta etapa de debates que se abre a partir del día de hoy, empieza una nueva etapa y ciclo histórico en nuestro país a la que estamos todas y todos invitados e invitadas.

Y a prepararnos desde ya, para este gran debate, de cara al referendo aprobatorio de la Constitución Bolivariana mejorada que surgirá al calor de este gran debate y diálogo nacional convocado de cara al país.

Y desde ya, que los debates de nuestra Asamblea Nacional Constituyente sean transmitidos por radio y televisión. Sería una extraordinaria oportunidad del relanzamiento de ANTV y AN radio, desde mi modesto punto de vista.

Y sin duda, como un primer análisis, ha triunfado la participación, la paz y el amor, independientemente del signo político o ideológico de los que hemos acudido al llamado de las urnas electorales.

Y los grandes derrotados fueron el fascismo, la violencia y la abstención.
De todas maneras, una vez conocidos los resultados por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), escribiremos nuestros correspondientes análisis.

Y sin duda, hoy más que ayer, Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen.
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
¡Hasta la Victoria Siempre!