Estados Unidos tiene grandes problemas de desigualdad social como
consecuencia del modelo capitalista que concentra el poder económico
en los dueños del capital sustentado en el valor ficticio del dolar,
impreso sin respaldo de ninguna naturaleza mineral, espiritual o
humano.
El intento por preservar ese modelo moribundo tiene su máxima
expresión en la activación de varios teatros de operaciones militares
en el planeta con el fin de ocupar por la fuerza territorios ricos en
materia prima y fuentes de energía.
Pero la ofensiva fuera de sus fronteras, el auge del movimiento
neonazi y las acciones contra la inmigración en territorio
norteamericano, solo han visibilizado las profundas contradicciones
que generan condiciones objetivas para "la caída de Babilonia la
grande" que Mao llamo: "el tigre de papel".
El pueblo norteamericano es una mezcla de todas las naciones del mundo
y atacar la inmigración es atacar una buena parte de su base social
que ya se ha mezclado con su historia, cultura y gentilicio.
La irracional actitud de quienes se autodenominan supremacía blanca
contra la inmigración Latina, Árabe y de otras latitudes parece
desconocer que en la genealogía de ese país, sus antepasados fueron
inmigrantes y que los pueblos originarios fueron y son los indígenas,
supongamos que por derecho y poder supremo se aplicara una medida
radical contra toda la inmigración hacia Estados Unidos antes de la
colonia: hasta el Presidente Donald Trump seria deportado con todo su
equipo de racistas.
Un país con una Constitución bícentenaria, gobierno excluyente y
subordinado a los intereses de los dueños del poder económico, con un
sistema electoral corrompido que permite legitimar al perdedor como
ganador y no garantiza la participación de las mayorías como electores
y elegibles, dando lecciones de democracia al planeta.
Peor aún, un gobierno y poder en manos de los dueños de las imprentas
del dólar que todo lo privatiza; educación, salud, viviendas y
servicios públicos, entre otros. Que impone deberes y violenta
derechos a la expresión del pensamiento, protesta pacífica y hasta el
derecho a la vida, dando lecciones en materia de derechos humanos a
otros pueblos.
El pueblo norteamericano esta en búsqueda de un líder que los saque
del laberinto que los lleva camino al infierno pero en el intento han
fracasado porque los dueños del poder económico a su vez son dueños de
los grandes medios de comunicación y todas las corporaciones de
producción audiovisual, digital y propagandística que les permite usar
las emociones de una buena parte del pueblo norteamericano, seducidos
como los niños y los ratones en el cuento del "flautista de Hameling".
El territorio norteamericano está "en el ojo del huracán", es el
Huracán Chávez de categoría 5 pero este no es destructivo sino
constructor de otro mundo posible, el pueblo norteamericano se levanta
en pequeñas, medianas y grandes expresiones de rechazo a la locura del
racista que esta de inquilino en la casa blanca, mas temprano que
tarde será enviado por su propio pueblo a la cloaca de la historia, el
pueblo norteamericano es amante de la paz y saben que para alcanzarla
tienen que hacer justicia.
En Estados Unidos la única alternativa de supervivencia es un proceso
Constituyente que les permita invertir la pirámide, que les permita
satisfacer los derechos históricamente postergados de su propio pueblo
y dejar la carrera armamentística por una carrera humanista que
coloque al ser humano como el centro de atención.
Para el pueblo norteamericano solo hay dos posibilidades; continuar el
experimento fallido de buscar en la democracia representativa la
solución a sus problemas que solo los llevara por el camino del
secesionismo convirtiendo el territorio norteamericano en un
archipiélago de pequeñas repúblicas tratando de sobrevivir a la
barbarie heredada del stablisment o comenzar un proceso Constituyente
que le retorne el poder a las mayorías del pueblo para refundar la
república.
La dictadura del dólar ya cayó, hasta el papel moneda del país más
pobre del mundo tiene más valor porque cuenta con algún respaldo en
oro y otros minerales, el mundo comenzó a migrar hacia el uso de otras
monedas que si tienen valor porque son producto del esfuerzo de sus
países, mientras los norteamericanos fueron escamoteados por la
reserva federal en manos de empresas que imprimen billetes sin valor,
sin respaldo y que pronto serán usados como papel higiénico en los
baños públicos.