La elección del 10D 2017, se constituye en el punto de inflexión que cambiará el sentido y la fuerza del accionar del Poder Público del Estado nación venezolano, para concretar a plenitud la tan anhelada Justicia Social y la mayor suma de felicidad, la mayor suma de seguridad y la mayor estabilidad política para el pueblo venezolano. Lo que ha sido, la sublime motivación del Libertador Simón Bolívar.
Hasta ahora el único poder público que se enfrenta a la guerra económica y actúa contra la descomposición social provocada por la abyecta y apátrida contrarrevolución, ha sido el Poder Ejecutivo nacional, a ello agregamos la participación activa del Poder Republicano, el Poder Judicial y la ANC (Poder originario), éste ultimo a partir del 30 de julio pasado.
Por ello afirmamos, que ésta elección municipal debe provocar la participación más activa y eficiente del Poder Público en su conjunto. Vale decir, el Poder Ejecutivo regional, el Poder Ejecutivo municipal, los Consejos Municipales; la ANC y los Concejos Legislativos de los Estados; el Poder Republicano y las direcciones regionales respectivas; El TSJ y sus direcciones regionales. Sólo así, todo el Estado nacional venezolano en bloque integrado podrá aunar esfuerzos para derrotar al poder económico que ha logrado fagositar al Poder Público nacional y con ello convertir todo el devenir de nuestro país en un caos. En el cual, de manera absolutamente irresponsable, el poder económico agrede y daña la vida del pueblo venezolano, perturbando su siquis, acosandolo día a día con toda suerte de agresiones inhumanas, que van desde la criminal especulación, hasta el condicionamiento de la venta, pasando por el acaparamiento, el bachaqueo, el contrabando de extracción, el escamoteo y manipulación de la moneda nacional y las divisas.
A tal extremo, que inducen -al pueblo- a incurrir en acciones y actitudes contrarias a la identidad amorosa, que deberían sentir justificadamente hacia su revolución y su patria.
Es de todos conocido, que hasta ahora en cada sitio de la patria existen poderes que deberían actuar para poner coto a los desmanes del poder económico. Pero todos esos poderes han cargado toda la responsabilidad politica de dirigir, proteger y controlar los destinos de la patria en el Poder Ejecutivo Nacional, limitándose solo a lo administrativo, sin intervenir en la política integral de sus respectivas regiones.
De ahí, que nos encontramos con una debil participación municipal, en la producción de alimentos, fármacos y otros rubros. Minimizando la explotación de la inmensa cantidad de tierra fértiles en las regiones, para lograr soberanía alimentaria. Al mismo tiempo se hace un escaso empoderamiento con el pobre impulso y transferencia de competencias ( Art. 184 CNRBV) que debería entregarse a las comunas y consejos comunales. Otro aspecto de la gobernanza obviado hasta ahora, es la protección de las fronteras, para evitar, el contrabando de extracción, la manipulación interesada de las divisas y el cono monetario, la delincuencia, el saboteó de los servicios públicos, el saboteó de las empresas básicas que operan en las regiones, la protección de nuestras costas y mar territorial, para fomentar y proteger para el usufructuo del pueblo venezolano, de todos los haberes que la Pachamama nos ha dotado en nuestros mares y rios.
En fin, es imperativo que todos los ciudadanos, los líderes y autoridades elegidas y designadas integremos nuestros esfuerzos para defender y proteger los intereses totales de la Patria.
De esta elección del 10D, 2017, debe lograrse una importante enseñanza, que no es otra, que cambiar la errada costumbre de abstenerse de participar en la elecciones municipales, o visto ello, como un sufragio son importancia.
De aquí en adelante las elecciones municipales deben concitar el mismo, o mayor entusiasmo a la participación que las elecciones presidenciales.
Porque el nuevo accionar, -que aspiramos- del Poder Público municipal y el Poder Popular en el devenir diario del pueblo, haciéndolo auténticamente beneficiario de la positiva acción del Gobierno revolucionario, bolivariano, humanista y socialista, como lo establece nuestra CNRBV. Logrará en consecuencia, mejorar la percepción del pueblo hacia las bondades de la mejor forma de vida para el humano: el socialismo.
Es a nivel municipal, donde el pueblo experimenta verdaderamente, la acción de Gobierno, la orienta, la dirige, la selecciona, la controla y la disfruta. Al integrar todos los espacios municipales beneficiados, tendremos entonces todo un país disfrutando su sistema de vida en un marco de Justicia social.
Este necesario cambio se concretará, con un contundente ejercicio de Gobierno integrado por pueblo y autoridades elegidas, en un nuevo accionar mancomunado.
¡Independencia y Patria Socialista y Soberana!
¡Chávez vive!
¡La Patria sigue!
¡Viviremos y venceremos!
Willi Castillo Pérez (el indio)
