Vale que le hagamos esta pregunta a los comerciantes del país, sobre todo a los más grandes: ¿Ustedes les han venido incrementando los sueldos y salarios al personal que les presta servicios y que, sin ellos, el negocio que tienen no funcionaría?
Válida la interrogante que nos la hemos estado planteando y creemos que si no lo han hecho aún, deben, se los sugerimos, estar dispuestos, sin más demoras, a tomar la decisión necesaria de hacerlo, pues si ayer vendían su mercancía en Bs. 1.000,00 y hoy la colocan en el mercado en un millón de bolívares y pasado mañana la incrementan en un 50% o 100% más, como vemos que está sucediendo desde que se inició este año de 2018, pues lo menos que tienen que hacer es reflejar de alguna manera esas exponenciales subidas de precios en los sueldos y salarios de sus empleados, en términos de la mayor justicia…
Deben compartir, señores mercaderes, el botín con los cómplices obligados a serlo que tienen en sus negocios, okey…???
A la par de estar pensando en ello, hemos estado viendo críticas ácidas y escatológicas de voceros opositores de todos los tintes políticos y de otros tantos arrastrados traidores a su propia clase, porque el Presidente Maduro ante esta atroz arremetida económica de la derecha criolla, con el apoyo decidido y monumental del mundo del gran capital internacional, dirigida a doblegar a nuestro pueblo haciéndole la vida todo un tormento por la vía de subir escandalosamente los precios de alimentos, medicinas y otros bienes esenciales para la vida, haya tomado la decisión de no abandonarlo y de tanto en tanto y mientras no se le encuentre una solución estructural al gravísimo problema que provoca esta terrible y criminal inflación inducida desde hace más de tres años, sin parar un segundo, haya acordado asignarles a los venezolanos de los sectores más necesitados del país, bonos especiales, dentro de la sabia idea de que con ellos puedan paliar tan feroz arremetida…
Qué pretenden los golpistas y sus corifeos de Miami, Bogotá y Madrid, que el pueblo se arrodille y les entregue el país para que la voraz oligarquía criolla se lo continúe chupando y exprimiendo como lo hizo desde la presidencia de Páez hasta el último gobierno de la Cuarta República…???
Adelante Presidente, esos bonos son, sin duda alguna, un gran paliativo, para poder enfrentar y derrotar este esfuerzo imperial y oligárquico por destruir la Revolución Bolivariana, así como lo ha sido el programa de los Clap, sobre el que le sugerimos ponerle una gran lupa, pues aún en muchos lugares del país, no se entrega regularmente (cada quince días o al menos cada mes), conforme a la orden que usted impartió hace mucho rato y que jamás olvida reiterarla, así como recordarle el Clap que usted ofreció con productos para el aseo personal, el que hasta la fecha nosotros no hemos conocido a algún compatriota que lo haya recibido y decirle, -además- que ese Clap es demasiado importante ante los escandalosos precios que tienen en el mercado esos productos y tanto lo son, que un jaboncito de apenas 60 gramos, lo venden en 40 mil bolívares, la pasta dentrífica de 100 miligramos, en 60 mil y, entre otros artículos para no extendernos demasiado, pues son muchísimos más, un kilo de jabón para lavar ropa en Bs. 180.000,00...
Quizás cuando salga publicada esta nota, esos precios que indicamos no tiene nada de extraño que hayan sido multiplicados por dos y hasta por tres…!!!
Y terminamos con este otro mensaje al Camarada Presidente Maduro, pues vemos como una obligación indeclinable, en nuestro carácter de revolucionarios y defensores de este proceso de cambios Bolivariano que se inició con el Comandante Eterno Hugo Chávez, transmitir aquello que, desde nuestra mirada, observemos que funciona de forma deficiente:
Es urgente que le ponga también la gran lupa a la banca pública, en especial al Banco de Venezuela, pues allí las cosas no andan nada bien. Los sistemas informáticos o la llamada plataforma para realizar las operaciones esenciales, como transferencias, pagos de servicios, verificación de saldos, etcétera, etcétera, ya son casi inaccesibles, se ha vuelto demasiado lento lograr que el sistema nos habilite el acceso a la página del Banco; le confesamos que hemos perdido todo un día y hasta dos, para lograr hacer ese tipo de operaciones. La lentitud no creemos que sea por fallas en los sistemas, sino por sabotajes internos, sospecha esa que nos surge porque, por ejemplo, tenemos -además- el caso de uno de nuestros hijos que abrió una cuenta hace más de dos meses en esa Entidad (28/NOV2017) y él no ha podido lograr desde entonces hacer una transferencia desde allí porque la fulana clave que debe llegarle de inmediato al celular para poder concluirla, jamás se la envían y lo único que le han dicho en el Banco, es que nada pueden hacer ellos porque el sistema es totalmente automatizado y lo que más nos sorprende es que nos cuenta el hijo que ni siquiera le toman nota del reclamo para elevarlo a la alta Gerencia de la institución y eso, por supuesto, nos hace pensar que pudiera haber dentro de la misma quienes provocan en el sistema esos eventos para que los clientes se molesten, lo que, por miles de razones, no es nada extraño que eso esté sucediendo…
Estamos contestes en que esos sistemas son altamente automatizados, además de que tienen garantizada su mayor seguridad, pero más allá de ello y dentro de nuestra crasa ignorancia en el tema, estamos muy seguros de que ante ese tipo de problemas, la única fórmula que hay para superarlos es por la vía de recurrir a los expertos informáticos que tiene a su servicio el Banco y son ellos y sólo ellos, los únicos que saben cómo hacerlo...
Es inadmisible que si esa falla existe, lo cual los mismos empleados del Banco lo pueden verificar y que afecta severamente a un usuario (o cliente) de la Institución y que ante su explicable y lógico reclamo, se le despache de manera olímpica, diciéndole que esa falla no tiene solución alguna, con el argumento tan simple de que el sistema es automatizado...???