Nicolás Maduro Moros, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, en uso de sus atribuciones legales y constitucionales, ha procedido, como algunos le han recomendado, con un cambio parcial de su actual Gabinete Ejecutivo. Las reacciones han sido diversas y variadas, y trataré de dar mis opiniones respecto a tan espinoso tema.
En primer lugar, es indudable que este cambio parcial del Gabinete, no ha culminado. Particularmente creo que aún faltan nombres y cambios dentro de varias de las carteras ministeriales, por lo que las opiniones que se generen con respecto a ello pueden cambiar de un momento a otro.
Por otro lado, hubo designaciones y salidas de algunas figuras que ocupaban carteras ministeriales, algunas aplaudidas y otras no tanto. Realmente la labor de gobernar y de complacer todas las opiniones resulta harto, e imposible de complacer todas las opiniones, y sobre todo en medio de las dificultades y complejidades por las que actualmente le toca afrontar al país.
Por otro lado, ya expresábamos, más allá de la formalidad del inicio del período constitucional del sexenio de Maduro, el cual iniciará el próximo 10 de enero de 2019, que su verdadero gobierno comenzaba a partir del 21 de mayo. Ya estamos próximos a cumplir el mes de las elecciones presidenciales, y me parece, tal y como lo señale en artículos anteriores, que el tiempo de la alta política no es el mismo al del ciudadano y ciudadana de a pie.
Pero creo, que lo más peligroso de ello, es que se ha jugado con las expectativas de la gente, con la esperanza, y esto ya ha estado manifestándose de diversas formas, una de ellas, con el incremento de la participación en procesos electorales, lo que hace que el fenómeno de la anti política reaparezca dentro del escenario político venezolano. El reformismo se apodera peligrosamente de las estructuras de la Administración Pública y del Estado todo, y la posibilidad de retorno a la dominación que creíamos desterrada parece que pende como una espada de Damocles tendiente a convertirse en una realidad alarmante.
Hay designaciones en el gabinete que evidentemente me agradan. Me parece que el desempeño de la compañera Delcy Rodríguez al frente de la Vicepresidencia Ejecutiva es oportuna y más que merecida. Fue Ministra del Poder Popular para el Despacho de la Presidencia durante el gobierno de Chávez, Ministra de Comunicación e Información y de Relaciones Exteriores en el gobierno de Nicolás Maduro, Presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente y de la Comisión de la Verdad, además de Secretaria General del Movimiento Somos Venezuela. Además de hija de un mártir de la Cuarta República como Jorge Rodríguez. Es decir, una mujer que en la trinchera donde le ha tocado desempeñarse, lo ha hecho bien, además de su compromiso militante y más que demostrado por la causa socialista. Me parece que es una extraordinaria designación.
Asimismo me parecen positivas las designaciones de Hipólito Abreu en el Ministerio del Transporte, además de provenir de las filas del Movimiento Revolucionario Tupamaro, como una muestra de revertir el sectarismo al darle participación a otros factores políticos que no sean del PSUV dentro de la gestión gubernamental. Me parece que esta iniciativa del Presidente Maduro de incluir otros factores del Frente Amplio de la Patria en las responsabilidades gubernamentales resultaría hartamente positiva.
Igualmente me parece hartamente positiva la designación de Marleny Contreras como Ministra del Poder Popular para las Obras Públicas. Esta camarada es ingeniero civil y viene de una exitosa gestión al frente del Ministerio del Poder Popular para el Turismo. Aunque, no es menos cierto que su designación también representaría una cuota a la corriente de Diosdado Cabello.
La designación en el Ministerio de Industrias y Producción Nacional de Tareck El Aissami me parece que no es la más acertada. El Aissami como vicepresidente ejecutivo realizó una labor loable y muy valiosa en la preservación de la paz y en materia de seguridad ciudadana, al igual que en su paso por el Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz. Más en el ámbito económico no tuvo un buen desempeño a mi parecer, por lo que esta creación de este Ministerio y la entrega de la Vicepresidencia de Economía es un premio de consolación.
Asimismo, la designación de Mayerlin Arias, como expresión de la JPSUV, de provenir de aquellos heroicos jóvenes que dieron aquel debate en cadena nacional en la Asamblea Nacional de la talla de una Libertad Velasco, Robert Serra, Héctor Rodríguez, Yahir Muñoz, Manuel Dunn, Eder Dugarte, Andreina Tarazón, Osly Hernández es más que merecida. Han tratado de viralizar de que Arias habría firmado en contra del Comandante Chávez, pero el mismo Hugo Chávez la tuvo muy cerca y fue una de las que formo a esta muchacha, además de que ya ha tenido varios puestos de responsabilidad, por lo que en las funciones de gobierno, además del compromiso militante, hace falta también cierta experiencia, y creo que Mayerlin Arias posee ambos requisitos.
Particularmente me parecerán verdaderas interrogantes las gestiones de Eduardo Piñate al frente del Ministerio del Poder Popular para el Proceso Social del Trabajo, de Stella Lugo en el Ministerio de Turismo, de Yomana Koteich al frente del Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, de Caryl Bertho como Ministra de la Mujer (cuota de El Aissami pienso yo) Heryck Rangel como Ministro de Ecosocialismo y Evelyn Vásquez como ministra de aguas son una verdadera incógnita.
Pienso que si bien Dante Rivas tuvo excelente desempeño como director del SAIME, SAREN y el INTT, no obstante en su paso por el BCV y en lo referido a los procesos de simplificación de trámites no fue muy positivo. Igualmente sus dos incursiones electorales como candidato de las fuerzas revolucionarias a la alcaldía de Porlamar y como diputado por Nueva Esparta resultó un completo desastre. Por ello, también tengo dudas de como pueda resultar su desempeño al frente del Ministerio de Pesca y Acuicultura. Me parece que su designación obedece a otra cuota de El Aissami.
Pero, y como lo señalé párrafos más arriba, aún los cambios dentro del gabinete pueden continuar produciéndose. Y esto porque dentro de unas tres semanas, se dará el proceso anual de ascensos militares, y seguramente pueden haber algunos ajustes en lo concerniente al Alto Mando Militar. Y es muy factible que en el Ministerio del Poder Popular para la Defensa pueda producirse cambios. Los candidatos más fuertes estarían entre el actual Almirante en Jefe y Comandante Estratégico Operacional, Remigio Ceballos Ichazo, y el Mayor General y actual Comandante General del Ejército, Jesús Suaréz Chourio como posibles sucesores del General en Jefe Vladimir Padrino López.
No obstante, lo más importante de los nombres de los hombres y mujeres que ocupen responsabilidades dentro de las carteras ministeriales, lo que importa es la eficacia, eficiencia y efectividad de las políticas públicas a implementar. Lo que importa es que realmente haya un plan estratégico a desarrollar en el sexenio, que haya seguimiento y evaluación de las políticas, de manera realista y que pueda medirse, y que haya voluntad política de golpear duramente al delito y a la trampa.
Es importante que la Asamblea Nacional Constituyente asuma un rol más proactivo, ya que sus deliberaciones respecto a los avances a incluir en la Constitución Bolivariana mejorada es uno de los secretos mejor guardados, y a raíz de las recientes designaciones ministeriales, se ha establecido la percepción ante la opinión pública de una disolución de facto de la Asamblea Nacional Constituyente. Esto tiene que ver con el escenario de "muerte cruzada" que mencionábamos en artículos de algunos meses atrás, y que consiste en esa especie de peloteo de las responsabilidades para afrontar la actual crisis económica y social entre el Ejecutivo Nacional y el órgano expresión del Poder Originario Popular.
Y esto es muy peligroso porque la gente puede sentirse que la Constituyente fue una maniobra para darle largas a la atención de los espinosos problemas del ciudadano y ciudadana de a pie, y no como una excelente estrategia política tendente a garantizar la paz en contra de la violencia del fascismo. Pero las estrategias hay que reinventarlas, porque pueden agotarse y perder la eficacia con el tiempo.
La política es un ejercicio complejo y difícil por el que hay que hacerlo con las neuronas y no con las hormonas. Si nos dejamos llevar por las vísceras y las emociones en este complejo y difícil momento, podemos perder todo. Pero tampoco podemos catalogar que la decisión del Presidente en torno a su gabinete es 100% positiva. Tiene sus aristas y bemoles.
Le queda pendiente al Presidente Maduro aún una necesaria reestructuración del Gabinete Económico, el cual no ha dado pie con bola. Sin duda esta decisión adoptada por Maduro, indudablemente entre del renglón de decisiones políticas de alto impacto y no exenta de riesgos. Indudablemente también puede ser vista como una decisión para atender a algunas corrientes revolucionarias, pero no desde la óptica del reparto burocrático para atender cuotas de poder sino para el ejercicio del co- gobierno y el reparto de las responsabilidades gubernamentales, y en menor medida, de enroques, pues hay muchas figuras, objetivamente hablando, que si bien han tenido responsabilidades políticas, militantes y dentro de la Administración Pública, muchos debutan dentro de las responsabilidades ministeriales.
Por el bien del país y de la revolución, esperemos que estos cambios resulten. Ya que hay un volcán social en las calles y una bomba de tiempo que si no la sabemos atender, podría estallar en cualquier instante. Estamos obligados a desactivar y conjurar tales amenazas y peligros.
, Bolívar y Chávez viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen.
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!